Capítulo 80: Karma

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Perfumes volaron por la habitación estrellándose igualmente en las paredes, una de las largas cadenas de oro que tenía sobre una pequeña mesa la rompí solo a la fuerza, mientras pateaba todo lo que estaba a mi paso. Deshice la cama solo a tirones, la ropa estaba esparcida por toda la habitación, todo estaba en el suelo y cuando no encontré que más lanzar para dejar escapar mi rabia, simplemente comencé a darle golpes a la pared tan fuerte como pude, mis nudillos no tardaron demasiado en enrojecer y la pared no tardó en romperse, pero seguí haciéndolo, una y otra vez hasta que unos golpes en la puerta me detuvieron. Abrí la puerta acelerado y vi a mi chofer sorprendido, su rostro estaba rígido.

-Qué quieres? - pregunté molesto.

-Disculpe señor Bieber, está bien? Puedo ayudarlo en algo? -preguntó preocupado y su voz era temerosa.

Quería gritarle y sacarlo a patadas de la casa, pero nadie tenía la culpa de lo que estaba pasando, solo yo, por lo que me contuve un poco.

-Estoy bien, por favor, déjame solo, que nadie más venga -le suplique y él asintió.

Cerré la puerta con seguro y seguí mi entrenamiento de furia, golpeando todo y viendo como poco a poco caían gotas de sangre de mis nudillos.
Cuando me detuve a mirar la habitación destrozada y la pared rota, ya no encontraba que destrozar y la rabia seguía intacta. Me senté en el suelo en una esquina de la habitación, tiraba las puntas de mi cabello con mis dedos y comencé a sentir algo caliente en mis mejillas, hace tanto tiempo no lloraba que se sentía demasiada extraña la sensación ahora. Estaba solo nuevamente y todo era por mi culpa, por haberme aferrado a un noviazgo largo que pensé que sería para siempre, por haberme aferrado a la idea de que solo ella podría quererme y aceptarme con el mundo que vivo, pero me equivoqué enormemente porque dentro del mundo normal había alguien esperando por mí, dedicaba su vida a mí sin que yo supiera y era feliz con solo verme sonreír. Creo que me enamoré de su mirada desde el primer día que la vi y yo no supe asumirlo. Ahora comprendo todo, desde que la vi fue especial, quise tenerla cerca sin pensar en la razón. Mientras estaba en la cárcel aquella vez pensaba en ella y llegó hasta Miami a verme, cada vez que hice cosas sin pensar cuando estábamos juntos ella lo aguantaba todo y me apoyaba, confiaba en mí por sobre todo, peleó con paparazzis por mí, dejó toda su vida normal por mí, por solo estar conmigo. Ahora que podía pensarlo todo de ese modo me sentía una mierda totalmente, la perdí por mi culpa, solo por mi propia culpa. Definitivamente éste era mi karma.

Revisé entre las cosas de mi chaqueta que estaba tirada en el suelo también y examiné bolsa negra de Khalil, al abrirla pude ver botellas de un líquido extraño y unas agujas con inyecciones, no conocía mucho de esa droga, solo sabía que se inyectaba a la vena y por el hecho de ser una droga dura era una de las que te hacían borrarte totalmente. No dudé en probar un poco, preparé una inyección y la inyecté directamente en mi brazo, enseguida comencé a sentir algo extraño, veía todo nublado y la cabeza me daba vueltas pero no me olvidaba de ella aún, necesitaba hacerlo. Preparé otra dosis y volví a inyectarla en mi vena, ésta vez veía cosas extrañas, ya no estaba en mi habitación, veía todo oscuro y en una esquina estaba ella sonriendo, quise caminar hacia ella pero cada vez se alejaba más y entonces volví a inyectar otra dosis.

No sabía cuánto tiempo había pasado desde mi primera inyección, pero me picaba la piel y sentía infinitas ganas de vomitas, no podía ponerme de pie y no recordaba porque estaba en esta situación, miraba a mi alrededor sin entender prácticamente nada y comenzó a faltarme el aire, mi respiración iba demasiado lenta y a pesar de que sentía la necesidad de respirar más de prisa no lo conseguía.

CASSY.

Allison y su novio Eric nos esperaba en el aeropuerto, mis tíos estaban felices de vernos luego de tantos años. Habíamos llegado en la mañana y tenían un desayuno preparado, para mi suerte ellos no preguntaron nada de Justin, supuse que Allison los había advertido. Caminé un poco por la playa con mi hermano luego del desayuno, Sebastián insistía en que debía prender mi celular y hablar con Justin, pero pensé que sería bueno despejarme un poco de todo aunque fuera por un rato.

He ain't all bad © (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora