Capítulo 16 [2]

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   Hoy el día estuvo bastante tenso. Desde que me metí para practicar con el tridente, nada fue normal. Generé un récord del que los técnicos aquí habían imaginado para mí. Derroté quince hologramas más de los esperados. Luego me pusieron a practicar con Enobaria y nos tuvieron que separar porque se me fue de las manos todo. Incluso me desgarré el hombro en las pruebas de lanzamiento de cuchillas. Aunque sólo con una pomada volví a estar normal. Se puede decir que soy una máquina de matar ahora. Nadie me quiere hablar por miedo a que los atacaré.

   Debo salir de inmediato, Finnick está con Mags y Haymitch en la sala, quienes al verme se levantan de inmediato

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   Debo salir de inmediato, Finnick está con Mags y Haymitch en la sala, quienes al verme se levantan de inmediato. No me importan los gritos y salgo hasta llegar al elevador. Las puertas se cerraron antes de que Haymitch llegara a detenerlo.

   Cuando llego a mi destino (la azotea) me dejo caer y arrojo al suelo lo primero que veo, tengo ganas de arrancar cabezas. Quiero estar en la Arena ya mismo.

—Me siento tan impotente —me digo a mi misma. Por que no puedo hacer nada, y me guste o no, no sé con exactitud si sobreviviremos allí o Finn o Peeta morirán.

—No te hicieron nada las plantas para que las lastimes así —me interrumpe una voz, ahora veo que lo que arrojé fue una maceta—. ¿Te encuentras bien, Phira?

—Nada que no pueda arreglar, Peeta —el chico camina hasta sentarse a mi lado—. ¿Qué haces por aquí?

—Salí a pensar, es un buen lugar —asiento y él me mira preocupado—. En verdad no luces bien y por lo que dijiste pues...

—La suerte no está de mi parte, nunca lo ha estado...

—Lo sé, lamento eso... —piensa mirando a las calles—. ¿Qué harás en las pruebas? Son mañana. Se supone que no lo debemos decir, pero pintaré a Rue.

   Pintar... mi cuerpo es el mejor lienzo que puede haber. Mi espalda más que nada.

—Me has dado una idea, Peeta. Pero necesito tu ayuda.

   Los dos esbozamos una sonrisa gatuna y le cuento lo que tengo pensado. Para ser aceptada.

(...)

—Beetee Latier, preséntese a su sesión privada.

   Estoy a minutos de entrar a mi sesión. Ya no es igual que en mis Juegos pues no estoy tan nerviosa. Pero aún se siente la presión en mi pecho, claro que Finnick y yo debemos aparentar tener todo en la bolsa, puedo ver como Peeta luce algo impaciente y nervioso. Está un poco asustado por mí, recién ha caído que lo que haré es muy peligroso.

 Está un poco asustado por mí, recién ha caído que lo que haré es muy peligroso

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Saphira 《Finnick Odair》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora