Waves -Finn Wolfhard-

04. Particular taste.

Finn:

Era increíble que no podía estar en paz en la sala.

Los fuertes ruidos que provenían de la habitación de Nick me ponían muy molesto, además, las operaciones de matemáticas parecían ser imposibles. Esos sonidos del videojuego que mi hermano y la gruñona de Alexandra jugaban me desconcentraban a más no poder.

Lancé el lápiz que tenía en mi mano frustrado. Cerré mi laptop y subí hasta el cuarto de Nick.

Como decía mi papá; si no puedes con el enemigo, únetele.

No, la realidad es que solo buscaba un pretexto para no hacer mi tarea.

No entendía como ella la terminaba tan rápido y yo llevaba dos horas en la misma operación.

—¿Qué juegan? —me senté en la cama de Nick mientras ambos seguían mirando la pantalla concentrados.

Al parecer Nick iba perdiendo por lo que podía ver.

—Te odio —dijo Nick lanzando el control lejos de sus manos—. Odio que juegues tan bien, nunca nadie me había podido ganar y llegas tú y me haces sentir como un perdedor.

—Pues, si te soy sincera sólo había jugado una vez este juego —puso su control en sus piernas y comenzó a jugar con sus dedos.

—Gracias por ignorarme —dije sarcástico.

Ambos centraron su vista en mí y sonreí satisfecho.

—Cállate, estoy en depresión porque ella me ganó ocho veces seguidas.

—Oye Alexandra —llamé su atención ya que la había perdido por completo.

—¿Qué? —me miró mal mientras sujetaba su cabello en una coleta baja.

—Voy por agua —avisó Nick saliendo de la habitación—. No lo vayas a matar, Alex.

—¿Está bien? —frunció el ceño en dirección a Nick para después verme—. ¿Y tú qué querías?

—Hmm... se lo preguntaría a Nick para no perder mi dignidad, pero es un completo idiota —rodé los ojos—. ¿Sabes matemáticas? —dije algo apenado.

—Sí —se levantó del pequeño sillón y tomó su celular en manos que segundos antes había comenzado a vibrar.

—¿Podrías ayudarme en unos problemas de mi tarea? —me miró alzando una ceja.

—¿Tengo cara de maestra?

—Pues... no —pero sí de sangrona.

—Porque no lo soy y no te voy a ayudar. Ya estás bastante grande como para no entender matemáticas, ¿Cómo puedes memorizar diálogos y no fórmulas? Debes ser un completo idiota — alzó sus hombros.

Sino fuera mujer ya la hubiera golpeado con la almohada y ahogado hasta que se muriera.

Quizá estoy dramatizando, pero ella es imposible.

Ama a Nick y me odia a mí.

Me sentí ofendido, pero solo me crucé de brazos mostrando mi indignación con ella.

—No soy un idiota, soy bastante inteligente, pero... —su fuerte risa me hizo parar—. ¿De qué mierda te ríes? No dije nada gracioso.

—"Soy bastante inteligente" —imitó mi voz y siguió riéndose.

—En serio me gustaría peg... —guardé silencio al escuchar la voz de Nick.

—¿De qué se ríe? —preguntó viéndome.