86. Roses.

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Narrador:

—Hay que salir, dejemos que tengan privacidad —indicó Mary mirando a su familia y a Mallory.

—Si se matan ahí adentro es culpa tuya, madre —comentó Nick.

—Tú solo eres un chismoso que quiere escuchar lo que dicen. Vámonos.

Obedeciendo a Mary los cuatro salieron de la habitación con pasos lentos para darles privacidad a ambos adolescentes y ver si de esta manera por fin podían aclarar las cosas.

La mirada de Alex era fría, estaba demasiado molesta como para razonar en el momento. Finn solo la miraba con algo de fastidio, tenía tantas cosas por decirle, tantas cosas que había ocultado, era su momento de por fin hablar con ella.

Pero aún había un gran temor en él, Alex iba a escuchar lo que tuviera por decirle, pero aquello no le garantiza que volvería con él. Porque después de todo, esa decisión solo dependería de ella.

—Anda, estoy esperando tu explicación de lo inexplicable —cruzó sus brazos—. ¿O no tienes nada por decir?

—Estoy harto de fingir que no me lastimas, no deseo fingir más. Jamás te he dejado de amar, debes enter que te haría cualquier cosa, pero jamás sería capaz de lastimarte. Porque sabes que siempre te he amado.

—¡Yo sé lo que vi! No intentes convencerme diciéndome que me amas, porque no lo haces.

—¡Cállate! Estoy hablando yo, no tú —interrumpió alzando la voz—. ¡Jamás haría algo para lastimarte! Kendall, tú lo sabes. Por más de un año te demostré que eras la única chica en este mundo que me importaba.

—Me gustaría creerte, pero no puedo. No existe algún motivo razonable para quedarme, no hay algo lo suficientemente fuerte para hacerlo.

—Lo hay —murmuró acercándose con pasos cortos a ella—. Me amas.

—No, no lo hago. Se acabó.

—No amas a Christopher. No lo amas como lo haces conmigo. No hay manera en que lo ames como a mí.

—¿Por qué lo metes a él?

—Sé que me amas, sé que lo haces, así como también sé que es imposible que ames a dos personas. Él no es para ti, y debes dejar de intentarlo, porque jamás funcionará.

—¿Y tú sí pudiste amar a dos personas? Digo, ya que tuviste el valor de salir conmigo mientras te divertías con Mallory. ¿Tú sí puedes amar a dos personas al mismo tiempo?

—Solo te he amado a ti.

—No te acerques más —cerró los ojos—. Lo digo en serio.

Finn exhaló todo el aire que retenía en sus pulmones y negó lentamente con su cabeza, se acercó un poco más a ella y la tomó con delicadeza del mentón obligándola a verlo.

—¿No tenías intriga de saber qué pasó? ¿Era muy difícil escucharme?

—Aún lo es —susurró—. Me duele, Finn. Confíe en ti ciegamente, y aún así me traicionaste.

—Puedo entender que estabas enojada, y lo que menos querías era verme o hablar conmigo. Pero no tenías porqué irte sin escuchar todo lo que te tenía por decirte, porque crees que sabes todo pero no es así.

—No tenía porque escucharte cuando las cosas estaban más que claras para mí.

—¿Y todas aquellas veces que yo estaba molesto contigo? ¿Las recuerdas? —apartó sus manos de su rostro—. Por más molesto que estuviese siempre te escuché. Te escuchaba porque te amaba lo suficiente para hacerlo, jamás te aparté. Y tú sigues apartándome una y otra vez.

Waves -Finn Wolfhard-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora