Narrador:
—¡No, Nick! —gritó la pelirroja empujando al mencionado a un lado—. ¡No es válido empujarme! ¡Eres un maldito tramposo!
—¡Es en defensa propia! —atacó empujándola de nuevo—. ¡Ya deja de ir en primer lugar, estúpida!
—¡No te atrevas a empujarme de nuevo, basura!
—¡Quítate, estorbo!
—Deja a mi nov... —Finn guardó silencio tapando su boca con su mano—. Ya cállense, groseros. No saben hablar sin maldecir. Debería darles vergüenza.
—¿Qué?
—¡Quita esa mierda! —ordenó viendo a Nick,
Quien sorprendentemente obedeció sin replicar y se despidió del en vivo.
—¿A ti qué te pasa animal? Casi metes la pata, como por milésima vez —regañó cruzándose de brazos—. Un día de estos te voy a patear.
—Fue accidente, solo quería defenderte —hizo un puchero—. ¿No puedo ser buen novio o qué?
—Defiende a tu abuela —intervino Nick.
—¡Tú no te metas! —reclamó Alex apuntándolo—. No es tu regaño, deja de robarle protagonismo al greñudo.
—¡Cállate, enana! —Nick de igual manera le apuntó.
—¡No estoy enana! —quejó—. Estamos del tamaño, idiota.
—¡No le digas enana a mi enana!
—¡Cállate, Finn! —ordenó Alex.
—¡Cállame a besos, enana!
—¡Dejen de gritar! —reclamó Eric desde la cocina.
—¡Tú no nos grites! —respondieron los tres jóvenes al tiempo.
—¡Todos dejen de gritar! —intervino Mary—. Parecen niños pequeños y tengan por seguro que no lo son.
—Claro que soy su bebé —replicó Nick—. Soy su bebé.
—¡Claro! —exclamó Alex—. Con razón hueles a mierda, vete a cambiar el pañal, asqueroso.
—¡Alexandra! —regañó Mary—. ¡Las groserías!
—¿Por qué me regañan por decir mierda y a Nick no le dicen nada por empujarme?
—Basta los dos.
Alex le miró con los ojos entrecerrados pero al sentir la fuerte mirada de asesina de Mary sonrió y alzó sus pulgares.
—¿Vamos al cine? —preguntó con regularidad Finn—. Te invito.
—Sí —respondió Nick ganándose una mala mirada de ambos adolescentes.
—¿A ti quién te invitó, basura?
—¡Alexandra!
—Como sea, entonces ¿Vamos? —guiñó.
Alex lo pensó unos segundos y negó.
—No, ve con una de tu tamaño —se cruzó de brazos—. Idiota, me llamaste enana ¡Y no lo soy!
—Ve con una jirafa —se burló Eric.
—¡Papá! —reclamó Finn—. ¡No puedo creerlo! Todos me hacen bullying.
—¿Qué? Creí que nos estábamos burlando de los demás, y yo quería jugar.
—Te amo, Eric —Alex sonrió divertida—. Todo lo que digas es un rotundo sí.
—¿Y a mí me amas? —preguntó Nick colocando sus manos debajo de su barbilla tratando de verse tierno. La ojiazul le miró con una mueca de disgusto y negó repetidas veces.
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Waves -Finn Wolfhard-
Fanfic❝ Me hiciste sentir como si el mundo fuera mío y ahora no importa lo que digas, sin ti el cielo está siempre gris. ❞ {TERMINADA}