36. Always hate me.

3.3K 305 243
                                    

Caleb:

Realmente, hoy había sido un día raro. Con altas y bajas.

Ver a Alex, me hacía muchísimas cosas, en su mayoría negativas.

Deseo su felicidad, pero es muy doloroso verla así de feliz con alguien más.

Como jamás lo fue conmigo.

Darme cuenta de que ella fue la que siempre dio más de sí misma me duele, porque siempre tuve la idea errónea de que yo la hacía feliz a ella. Y no. Ella me hacía a mí.

¿Por qué no podía soportar verla así?

Si tanto amas a una persona deseas su felicidad, pero verla ser feliz con alguien más me hacía mal.

Verla bailar, reír, sonreírle así a Finn, ver como él la miraba me mataba completamente.

Había hablado con ella en los momentos en los que no estaba con Finn, me impresionaba ver como realmente me perdonó todas las cosas más estúpidas que cometí, pero lastimosamente, es muy tarde.

Ella ya encontró alguien que realmente la va a hacer feliz y la valorará, algo que yo por desgracia no hice.

No puedo creer que tuve a alguien tan maravillosa para mí, y la perdí así de fácil.

Dejé todos nuestros sueños y metas juntos por alguien que no valía la pena.

Melanie, un chica que siempre tuvo celos de su propia mejor amiga. A quien conocía de toda la vida, y quien no quería a su mejor amiga siendo feliz. Siempre pude ver que Melanie apreciaba a Alex, pero aun así le guardaba envidia.

Sí, Alex era más bonita, tenía mejores sentimientos, un mejor corazón puro, y sobretodo jamás fue superficial o egoísta. Melanie era lo contrario y aún así Alex la adoraba con su vida, porque jamás logró ver esa parte tan víbora de su amiga.

Y yo caí completamente en su fachada de chica buena.

Alexandra era la indicada, pero la dejé ir, o más bien, ella se fue porque sabía que yo no era el indicado para ella.

—¡Ale!—tomé su brazo—, ¿Cómo estás? No hemos tenido mucho tiempo para vernos ni conversar —sonreí—. ¡Me alegra muchísimo verte!

—Hola, Caleb. Muy bien, ¿tú? —respondió con una sonrisa recargándose en la pared.

—Bien. ¿Y eso que viniste? Creí que no lo harías —reí mientras me acercaba a ella.

—No quería venir completamente, pero tampoco me quería perder esto —se alzó de hombros aun conservando su sonrisa—. Te queda linda esa camisa —sonrió.

—Gracias. Por cierto te ves realmente bien esta noche, Ale —comenté mientras miraba su vestido.

—Ah gracias. ¿Qué tal la noche?

—Bastante normal. ¿La tuya? —sonreí.

—Para ser sincera, increíble. Tenía tiempo que no bailaba y eso —asintió—. No había recordado lo mucho que disfrutaba hacerlo y tenía mucho que no me reía tanto.

—Oh, sí te miré. Aún bailas increíble. Bailabas con Finn, ¿No? —asintió energéticamente.

—También con Sophia y Jack —guiñó—. Y Chosen y Jaeden... y todos.

—Sí, creo que sí lo noté —reí—. ¿Recuerdas cuando te caíste en esa presentación de Jazz?

Al instante un sonrojo apareció en sus pecosas mejillas y una risilla burlona.

Waves -Finn Wolfhard-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora