Alex:—No seas un dramático Charlie, no soy una tonta.
El rubio alzó las cejas indeciso ante ello y le di un pequeño pellizco en el brazo.
—¡Auch! —golpeó mi pierna—. Estúpida niña.
—Charlie ya he ido a la escuela antes, no es nada nuevo —resoplé divertida.
—Ibas en línea, solo presentabas exámenes en la escuela. ¡Eso no es una escuela!
—Antes de eso, toda la vida fui a escuelas normales, estúpida —rodé los ojos.
—Pero no a esta —gruñó—. Estaré solo en casa, Cody también está en la escuela y ahora tú. Esto rompe mi corazón, ¿Okay?
—Según mi horario saldré a las doce, no me extrañes mucho —reí—. Como sea, debo entrar porque se supone que debo buscar mi salón. Te veo después.
—No quiero reportes, quejas o regaños. Ve y partele en trasero a todos esos cerebritos, niña genio —besó mi mejilla.
—Lo que tú digas, rarito.
—Ten un lindo día, conoce gente, estudia y te amo —sonrió.
—Gracias —regresé el gesto.
—¡Come el lonche que te hice, te amo! —me bajé del auto y le miré divertida mientras tomaba mi mochila.
—No me hiciste lonche, Charlie.
—¡Oh mierda! —golpeó su frente—. Olvidé por completo que ahora tengo dos hijos y un hombre, se lo hice solo a Cody y tu papá, la costumbre de tenerlos en casa —alzó sus hombros—. Prometo mañana hacerte uno a ti también, te comparé una lonchera para no olvidarlo —guiñó.
—Bien, lo toleraré —sonreí—. Te veo más tarde. Me recogerás, ¿No?
—Hmm... la casa está a diez minutos de aquí... caminando, en auto son tres... —alzó las cejas—. Cody sale a las tres de la tarde, tú a las doce...
—¿Y por qué si me traes?
—Porque debo dejar a Cody, él no puede irse solo...
—Soy una bebé —reí.
—Haremos un trato, te traigo en las mañanas... y en las tardes caminas. Si aceptas te haré postres extra para tu lonche.
—Más te vale que tenga toneladas de chocolate —le apunté.
Cerré la puerta mirándole amenazante.
—¡Eres asombrosa!
Asentí y me encaminé a la entrada de la escuela.
La verdad era que la escuela no era algo emocionara mucho, nunca he sido fan de despertarme temprano todos los días, así que eso apestaba.
Entré a la escuela y todo parecía bastante normal, gente por todos lados como si estuvieran tan felices de verse, gritos, abrazos, blah blah. Me concentré en buscar el salón correspondiente y en aquel entré con normalidad.
Al parecer la puntualidad no era una cualidad de los estudiantes pues el salón estaba casi vacío y solo estaban un par de chicos y algunas chicas conversando por ahí.
Intenté ver los lugares vacíos y, para mi ventaja eran la gran mayoría así que podría elegir mi lugar comodamente.
Ese salón tenía una gran vista del campo, bastante grande y lleno de árboles, me gustaba. Era muy diferente a mi anterior escuela, aunque esta era más pequeña.
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Waves -Finn Wolfhard-
أدب الهواة❝ Me hiciste sentir como si el mundo fuera mío y ahora no importa lo que digas, sin ti el cielo está siempre gris. ❞ {TERMINADA}