Mi Felices Para Siempre

CAP 78

NARRA AIDA

Tal parece que es más grave de lo que pensaba. Le prometo a mi novia que no volveré a hacer lo de hoy, pero me es muy difícil, no es fácil estar tranquila mientras que ella está en peligro. Karen recibió una bala por cubrirla a ella, es por eso que la cuida mucho, el cariño entre ambas es muy grande.
Me despierto, Alba ya no está en la cama, veo la hora y aún es temprano para que se haya ido a trabajar. La busco en el baño y no está, ya sé dónde puede estar.
Y ahí está, sabía que la iba encontrar haciendo ejercicio, que sexy se ve. Está de espaldas golpeando el saco de box, se mueve de un lado a otro dando golpes fuertes, entro sin hacer mucho ruido, cuando ya estoy cerca a ella salto a su espalda agarrandome de su cuello. Me ve con el rabillo del ojo y me sonríe.

Alba: Buenos días mi amor.
Aida: Buen día bebe. (Besando su mejilla)
Alba: Y ese milagro que estás despierta tan temprano. (Dice riendo)
Aida: Para que veas mi amorcito.

Me bajo, ella se gira para quedar frente a frente, me toma de la cintura y yo del cuello.

Aida: Estás muy sudada.
Alba: Tu estás muy sexy así vestida.

Me recorre con la mirada, me ve con tanto deseo.

Aida: Enséñame lo que estabas haciendo, quiero aprender a pelear.
Alba: En serio? (Dice sonriendo)
Aida: Si mi amor, siempre es bueno estar preparada.
Alba: Tienes razón princesa.

Saca otro par de guantes, va a la habitación y trae un short.

Alba: Póntelo por favor, me distraes mucho así. (Dándome un pico)
Aida: No te gusta? (Digo picara)
Alba: Me fascina, si sigues así en vez de enseñarte voy a terminar haciéndote el amor aquí mismo.
Aida: Mmm suena tentador, pero primero mis clases.

Me coloca los guantes, se pone frente a mi.

Alba: Separa ligeramente las piernas, tu pierna izquierda ponla un poco más adelante.

Hago todo lo que me dice.

Alba: Está pierna es la que te va dar el equilibrio para que puedas dar los puñetes.
Aida: Entiendo.
Alba: Tus manos siempre tienen que proteger tu rostro, casi a la altura de tus pómulos. Ahora estira tu brazo izquierdo como si quisieras darme un puño, mientras que con el derecho proteges ese lado de tu rostro, vale? Siempre cuidando tu guardia.

Hago lo que me dice.

Alba: Ese primer golpe es el que te permite calcular la distancia que necesitas para darle en el rostro a tu rival.
Aida: Pero yo soy diestra amor.
Alba: Lo sé bebe, es por eso que con ese calculas para luego soltar un derechazo, inténtalo conmigo.
Aida: Y si te golpeo?
Alba: Venga mi amor. (Dice riendo) Primero con el izquierdo, luego el derecho, entendido?
Aida: Si bebe.
Alba: Ahora.
Hago lo que me dijo, Alba se mueve esquivando los golpes, es muy rápida.

Alba: Muy bien bebe, siempre tienes que estar en movimiento, tu cadera te ayuda para eso, no le des tiempo a tu rival de que mida.
Aida: Tu esquivas muy rápido amor.

Se pone tras de mi, me toma de la cintura moviéndola de un lado a otro, hace que me incline un poco como si estuviera esquivando golpes.

Alba: Voy a intentar golpearte, te mueves como lo acabo de hacer contigo, vale?

Asiento con la cabeza.

Alba: Ahora!

Pues si hubiera sido de verdad ya estaría con el labio reventado🙄. Aida: Es muy rápido. (Digo enfadada)
Alba: Poco a poco princesa. (Dándome un pico) Yo entrené mucho para pelear como lo hago.
Aida: Si amor tienes razón. Tú me enseñaras todo.
Alba: Claro que si, y como pagarás mis clases?
Aida: Mmm como te gustaría que te pague? (Mientras me saco los guantes)
Alba: Pues no lo sé, sorpréndeme. (Sacándose los guantes)

Me voy sacando el short seguida de la playera, Alba me mira muy atenta, se muerde el labio.

Aida: Que te parece un pago carnal?
Alba: Me parece perfecto, ven aquí.

Me subo en ella colocando mis piernas en su cintura, Alba me besa con mucha pasión mientras me aprieta muy fuerte mi trasero haciendo que se me escapen unos cuantos gemidos. Estoy tan perdida en sus brazos que ni sentí en qué momento me llevó hasta la cama. Me deja en ella, empieza a desnudarse, pero la detengo.

Aida: Yo lo hago mejor. (Quintándole la playera)

La desprendo de todo, recorro todo su cuerpo, su abdomen marcado me vuelve loca.

Aida: Me fascina tu cuerpo. (Besándole el abdomen)

Estoy sentada en la cama, voy bajando mis labios hasta su parte intima, beso por encima haciendo que Alba suelte un gemido. Sigo con lo que estoy haciendo, veo un poco su rostro el cual está totalmente perdido por el placer.

Alba: Sigue bebe, ya voy a correrme.

Sigo jugando con mi lengua en su sexo hasta que siento que el cuerpo de Alba se va endureciendo y en un pequeño grito llega al orgasmo. La agarro de la cintura porque veo como todo su cuerpo tiembla. La llevo conmigo a la cama, su respiración ya se calmó y ahora es ella quien me besa muy efusivamente, me coloco encima de ella, Alba me besa todo el cuerpo, lame y muerde mis senos, pasa su mano por mi trasero. Me coloco bien sobre ella para que nuestros sexos queden unidos, empiezo a cabalgar, me toma muy fuerte de las nalgas para apretarme más a ella y quedar más unidas. Nos besamos para tratar de ahogar nuestros gritos

Aida: Sigue mi amor, venga Alba.

Aumentamos la velocidad ambas hasta que las dos llegamos al orgasmo, caigo totalmente rendida sobre el cuerpo de mi novia.
Alba: Así si quieres te doy lecciones todos los días y a todas horas. (Dice sonriendo)
Aida: Tonta. (Dandole un pico)
Alba: Te amo, te amo mi amor.
Aida: Yo más, yo mucho más. (Abrazándola fuerte)
Alba: Vamos a ducharnos.

Nos metemos a duchar, ambas nos vestimos y luego vamos para la cocina para hacer algo de desayunar.

Alba: Ya se me hizo tarde. (Viendo su reloj)
Aida: Solo por hoy amor.
Alba: Si bebe, Ehh amor
Aida: Dime.
Alba: Los huevos. (Señalando la sartén)
Aida: Joder!
Mi querida novia empieza a reírse porque soy un completo desastre para cocinar, aunque con ella estoy aprendiendo mucho.
Nos sentamos a desayunar hasta que suena el móvil de Alba.

Alba: Es Karen.

Alba📞: Hola Karen. (Dice feliz)
Alba📞: Voy para allá.

Aida: Qué pasó? Está todo bien?
Alba: Quiero asegurarme de eso...