CAP 82

292 10 0
                                        

NARRA AIDA

Por fin estoy en Barcelona, salgo muy deprisa para poder ver a mi bebe hasta que la encuentro ahí más hermosa que nunca. Voy corriendo hacia ella, me aviento a su cuerpo, pero juro que escuché una queja como de dolor; le preguntó si está bien, me dice que si todo bien, que me echo mucho de menos. Nos vamos para mi casa, nada más entramos y me tiro con muchas ganas sobre mi novia.

Aida: Qué pasa amor? Te estoy haciendo daño? Que te duele?
Alba: ....
Aida: Por favor Alba habla.
Alba: Pero no te asustes, de verdad que estoy bien.
Aida: Habla de una vez, qué pasó?
Alba: Ayer me dispararon y la bala rozó mi brazo... Me quedo por un momento sin reaccionar hasta que salgo de ese transe y lo primero que hago es quitarle la camisa que llevaba encima, lo hago rápido, pero con mucho cuidado. Veo un parche en su brazo izquierdo.

Aida: Como fue? Estás bien? Por qué no me lo dijiste? (Digo asustada)
Alba: Bebe estoy bien, solo fue un roce.
Aida: Por qué no me lo dijiste, Alba? Te pedí que me dijeras la verdad. Ayer ese grito fue porque ..
Alba: Porque me estaban curando. (Dice bajando la cabeza)
Aida: Debiste decírmelo, yo muy tranquila en Londres mientras que tú puedes hasta morir aquí. (Digo llorando)
Alba: Mi amor por favor no llores, no quería preocuparte.
Anna: Qué pasa? (Dice interrumpiendo) Mi amor que dicha verte aquí. (Dice abrazándome) Por qué estás llorando?
Alba: Buenos días Anna.
Anna: Hola cariño, qué pasó Alba? (Viendo su brazo) Pueden hablar por favor.
Aida: Que a mi novia le dispararon y yo soy la última en enterarme. (Digo llorando)

Me subo a mi habitación dejando a Alba con la palabra en la boca.
Me tumbo a mi cama y me pongo a llorar.
Oigo como tocan la puerta de mi habitación, sé que es ella.

Alba: Mi amor por favor ábreme, déjame explicarte.
Aida:...
Alba: Princesa por favor, escúchame.
Alba: No me pienso ir de aquí hasta que me abras, por favor bebe.

No puedo más, necesito abrazarla, sentirla a mi lado y asegurarme que está bien. Abro la puerta, sus ojitos están cristalizados.

Aida: Abrázame y dime que estás bien. (Llorando mucho)
Alba: Estoy bien mi cielo, ahora lo estoy mucho más porque te tengo entre mis brazos. (Mientras me abraza fuerte)

Mi Felices Para SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora