«Tu mirada» •Wos•

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Narra Mica:

—Mica...— me retó mi mamá otra vez y después sentí una patada de Agustina por abajo de la mesa. Se la devolvi haciendo que grite y levanté la mirada. Estaban todos observandome, especialmente mi mamá con cara de orto.

Hace media hora estaba hablando con Valentin por el celular y no me había dado cuenta. Cuando hablaba con el, el tiempo se me pasaba volando. Mire mi plato y todavia seguia lleno del guiso que me sirvio mi mama. Guiso en verano ¿enserio mama?

Desde que fui a rendír no vi a Valentin, y eso que fue ayer. No queria ser pesada pero, me voy a ir y quiero pasar el mayor tiempo con el. 

Valentin estaba muy concentrado en su disco y dentro de poquito iba a empezar a viajar otra vez para sus shows. Me dijo que lo acompañará sin pensarlo dos veces pero tengo que ver. Obvio que de "querer" siempre voy a querer ir y acompañarlo, ver como cumple sus sueños y apoyarlo pero la cuestion no es si "quiero" es si "puedo".  Voy a acompañarlo cuando pueda pero tambien es momento de que empiece la facultad y a hacer mi propia vida.

No vivo del aire.

Por cierto aprobé. Y esta vez si le dije a la vieja de Quimica "Chau vieja chota ahora sí que si no la veo nunca más en la puta vida" aproveche sabiendo que no la volvia a ver y de que ya no me pueden poner sanciones y si me las ponian no me iba a afectar en nada. Obvio está vez si me miró con cara de orto pero que la rasque. ¡Termine la secundaria!

—Dale boluda, deja el celular y adivina lo que te dijo Facundo.— lo señaló y me pegó otra vez Agus en el hombro. Últimamente Mariano nos mostró una rutina que tenían en su casa con Agus que era hacer adivinanzas mientras comíamos en vez de mirar la television. No me pareció buena ni mala idea, la verdad me chupaba un huevo.

Pero por ahí te re cagabas de risa y bue... Que se yo.

A mi mama le encanto la idea porque dice que asi pasabamos mas tiempo en familia y que aparte la comida con las noticias del orto que daban le revolvia el estomago haciendo que la comida le caiga mal. Solo ella se entiende.

—¿Que dijiste? No te escuche— le dije a Facundo mirándolo. El negó con la cabeza mordiendose el labio mientras se reia y se metia un poquito de pan con juguito a la boca masticando.

—Ay ay ay. Esa cabecita de enamorada— dijo con la boca llena y Ale le peo en la nuca diciendole un "no se habla con la boca llena" Facundo se rio y se le escapo y pedacito de pan todo baboseado en sus piernas, Agustina grito asqueada mientras mi mama le pasaba una servilleta y Mariano, Ale y yo nos cagabamos de la risa. 

Mi mamá extendió su mano para que le dé el celular. Puse cara de culo sin querer dárselo pero es imposible con esta mujer. Se acerco mas a mi provocandome.

—Sin celulares en la mesa. Ya lo habíamos hablado— dijo mi mamá cuando se lo di y de lo guardo en el bolsillo trasero de su jean. Con su tremendo culo me lo va a dejar planchado y calentito al celular. Una lamina voy a tener, se me va a trizar toda la pantalla.

No importa si tenés 20, 18, 9 o 50 y pico de años. Mi mamá le sacaba el celular a cualquiera que lo usaba durante la comida. Decía que era un momento "familiar" pero bien que después me corretea con la chancleta por toda la casa la hija de puta.

—'cuchame.— dijo Facundo.— hasta ahora nadie lo adivino, te toca. Hay que chuparlo muuuucho para mojarlo, hay que empujarlo bastaaaaante para meterlo, hay que lamerlo, lamerlo mucho para pararlo ¿que es?— dijo en tono sexy.

—Ay que cochino de mierda que sos.— dijo Agustina tirandole una servileta usada en la cara sin darme tiempo a responderle.

—¿Porque? si digo la verdad, para meter un hilo en una aguja tenes que hacer eso ¿cual flasheas?— agarro el sifon de soda y le disparo un chorro de soda en la cara empapandole el pelo y corriendole el maquillaje.