Yuanfen

CVI. Ninguno de nosotros te juzga

-          ¿Nadie va a decir nada? – Preguntó Finn con suavidad, al notar la preocupación de todos

-          Creo que aún estamos un poco aturdidos – Respondió Kadet

Luego de la conversación con Jorus, fueron a buscar a los Padawan para ponerlos al tanto de la nueva información que habían obtenido. Probablemente llevaban más de una hora en la sala de reuniones, en donde Rey se encargó de explicar cada detalle, incluso a Jacen, a quien contactaron usando uno de los computadores portátiles que estaba disponible

-          ¿Cómo es que de pronto existen treinta Sith en la galaxia? – Soltó Poe, fastidiado mientras se levantaba de su asiento – Apenas pudimos lidiar con uno, ¿qué carajo vamos a hacer con treinta?

-          Poe...

-          ¿No se supone que solo podía haber dos? – Cuestionó mirando directamente a Ben, a la espera de una respuesta

-          Esa era la regla – Contestó el aludido

-          Tenemos a nuestros mejores pilotos ahí afuera, con el riesgo latente de que se encuentren con estas mujeres, estoy... estoy cansado – Dijo, apoyando sus brazos en el muro, al tiempo que depositaba su cabeza en ellos con la intención de esconder su rostro – Quisiera por una sola vez en la vida, tener algo de paz

Rey caminó silenciosamente hasta él y le acarició la espalda con suavidad

-          Realmente llegué a creer que no íbamos a tener que volver a pasar por esto – Continuó, lanzando un profundo suspiro, antes de reincorporarse y encontrarse con la comprensiva mirada de ella – No puede ser que siempre alguien quiera arruinarlo todo

Ben observó la congoja de quienes lo acompañaban. Por primera vez le tocaba estar al otro lado de la situación e inevitablemente, se sintió responsable por los años en que sus acciones habían afectado a otros. Nunca había visto a sus "enemigos" como personas dignas de tener o desear un futuro mejor, probablemente porque siempre se había desmarcado de emociones como la empatía o la misericordia, pero ahora las cosas habían cambiado radicalmente para él

-          Lo lamento – Se disculpó Poe - Me cuesta ser optimista en estos momentos

-          Si sirve de consuelo y según lo que ustedes mismos dijeron – Intervino Jacen - Jorus no tenía certeza de que la gente que sigue a Lady Dorka sean todas Sith. Eso solo era una presunción por parte de él

Aun cuando sus palabras eran ciertas, el silencio se pegó en sus gargantas

-          ¿Qué es lo que decía mi madre sobre la esperanza? – Preguntó Ben, con la genuina intención de subsanar sus errores

-          Que es como el sol – Respondió Poe, mientras se formaba en sus labios una suave sonrisa

-          "Si solo crees en él cuando lo ves, nunca superarás la noche" – Contestaron los demás al unísono, completando la frase

Inevitablemente, todos rieron. Ya fuese de manera directa o indirecta, el impacto de las enseñanzas de Leia estaba arraigado en sus corazones

-          Bien, intentemos volver a enfocarnos – Sugirió Finn

-          De acuerdo – Comenzó a resumir Poe - En el peor de los escenarios, tenemos al menos treinta Sith rondando la galaxia, escondidas y protegidas por la Orden Democrática Imperial, la cual a su vez, está siendo manipulada y corrompida por Lady Dorka