Yuanfen

LXXIII. La charla

Ben se quedó paralizado en el umbral de la puerta

- ¿Qué ocurre? – Preguntó Rey al verlo

- Mmm... No quiero alarmarte – Le contestó retrocediendo lentamente, volviendo a entrar a la choza – Pero tengo la impresión de que Nakia ha pasado la noche con Kadet

Rey contuvo la respiración involuntariamente

- ¿Por qué crees eso? – Le preguntó

- Acabo de verla escabullirse desde su choza – Explicó Ben - La otra opción es que se haya levantado extraordinariamente temprano para ir dónde él... ¿Realmente te sorprende? – Dijo notando cómo la mente de ella parecía trabajar a toda velocidad

- No, pero me preocupa – Confesó ella – No estoy segura de que Kadet vaya a quedarse con nosotros luego de que terminemos el entrenamiento

- Bueno, los últimos días han estado muy unidos – Opinó él - Han ido a la cascada juntos e incluso ayer frente a todos, se contuvieron el uno al otro en la gruta. Tal vez cambió de parecer

- ¿Piensas que está pasando algo más entre ellos?

- Claramente - Dijo él, divertido

- Pero ¿crees que estén...? ya sabes... ¿haciendo algo más que solo besarse? – Insistió ella mordiéndose el labio, inquieta – Nunca he hablado este tipo de cosas con los Padawan. Han estudiado la biología de las especies galácticas en libros, pero no es lo mismo

- Tal vez llegó el momento de que converses con ambos – Analizó él

- No sabría que decirles – Dijo Rey contrariada - No son niños como para contarles la historia de la Wookiee mamá y el Wookiee papá

Ben lanzó una carcajada

- No te burles, tendrás que ayudarme – Señaló ella

- ¿Yo?

- Sí. Tu hablarás con Kadet y yo con Nakia – Resolvió Rey con una sonrisa maliciosa

- ¿Qué? No, no... – Dijo Ben nervioso

- Él necesita hablar con otro hombre – Insistió ella

- Rey, me estás metiendo en un lío – Manifestó sobándose en entrecejo con los dedos

- Por favor... - Dijo ella con un meloso tono de voz, mientras se le acercaba y ponía ambas manos sobre su pecho

- Mmm, de acuerdo – Cedió Ben suspirando ante su manipuladora mirada suplicante

Rey se colgó de su cuello y lo besó intensamente por largos minutos

- Esta me la debes - Le dijo él cuando se separó de sus labios - ¿Y qué se supone que le digo?

- Pues no lo sé, tendrás que improvisar igual que yo

El resto del día lo pasaron con relativa tranquilidad, puesto que mañana les tocaría regresar a la gruta. Subieron al collado y tuvieron un entrenamiento simple con los sables, donde dejaron que los Padawan entrenaran entre ellos. Ninguno de los dos lo confesaría, pero estaban profundamente inquietos por la inminente conversación que tendrían que tener con Nakia y Kadet.

Luego del almuerzo, todos quedaron en libertad de acción, tiempo que tanto Rey como Ben, utilizaron para ponerse de acuerdo sobre qué sería específicamente lo que hablarían con los demás, decidiendo hacerlo esa misma noche.