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Jack
Estaba apoyado con los brazos cruzados en una de las paredes que estaba al lado de la puerta principal de mi apartamento. Levante un poco el brazo izquierdo dejando ver el reloj que llevaba, este marcaba las 7:49.

- Vamos Gustabo, que llegamos tarde a la reunión - dije nervioso dando ligeros golpes al suelo con mi zapato.

Vi a Gustabo bajar las escaleras vestido con un traje que le había dado para la reunión.

- Si no me hubieras obligado a ponerme esto ya hubiéramos salido - me recrimino mientras intentaba ponerse la corbata
- Encima no se atarme esta mierda -

- Ven, te la pongo yo -

Gustabo se acercó a mi y como le había dicho le hice el nudo de la corbata. Gustabo se me quedó mirando fijamente sorprendido de lo rápido que se lo hice.

- ¿Usted donde aprendió a hacerlo? - Su mirada no se apartaba de la mía.

- Me enseñó mi padre cuando era pequeño - le respondí separándome de él para buscar las llaves del coche.

- Mi padre no me enseñó... ni siquiera me acuerdo de cómo era, ni de su nombre... - dijo cabizbajo.

Tras oír aquellas palabras se mi hizo un nudo en la garganta, carraspee intentándomelo quitar pero fue imposible.

- Es mejor que salgamos ya que vamos a llegar tarde - dije intentando ignorar aquel tema.

Llegamos al edificio del CNI justo a tiempo. Nos dirigimos a una sala de reuniones que hay en la segunda planta. Era una sala grande con un proyector y una mesa redonda en medio, esta estaba rodeadas de sillas blancas.

- Llegáis un poquito tarde - dijo Michelle mientras miraba el reloj de la pared.

- Lo siento - dijo Gustabo y fue a sentarse al lado de Horacio.

- Yo no tengo porque disculparme - le respondí cruzándome de brazos.

- Como veas... - me respondió.

- Ya estamos todos así que os comento. Nos han chivado que hay varios grupos de personas vendiendo droga y armas por la ciudad - comentó Michelle mientras extendía un mapa encima de la mesa.

- Aquí es donde más se concentra la venta - dijo marcando con un rotulador rojo sitios de la ciudad.

- ¿Sabemos algo más? - pregunto Volkov.

- Si, nos han chivado que hoy uno de los grupos estarán vendiendo droga por aquí - dijo señalando uno de los círculos marcados en el mapa - necesitamos que alguien vaya para sacarles información y ahí es donde entra Gustabo - dijo señalando al nombrado.

- ¿no puede ser otro? - pregunto.

- No, tú tienes dos identidades si te fichan como Gustabo no pasará nada, igualmente es importante que no metas la pata o sabrán que los estamos vigilando - respondió Michelle.

- ¿Dos identidades? - pregunto Gustabo

En ese momento me empecé a poner nervioso, ya sabía a lo que se refería Michelle con doble identidad.

- ¡Bolígrafo! - grite sin pensar impidiendo que Michelle respondiera la pregunta de Gustabo.

Todos los que estaban en la sala se giraron y me miraron extrañados, yo mantenía mis puños cerrados para que mis manos dejaran de temblar.

- ¿Te encuentras bien papu? - me pregunto Horacio extrañado.

- Yo... ¿si?... no, no estoy bien... - conseguí decir - ¿Puedo hablar contigo Michelle? - pregunté y esta asintió.

Salimos de la sala y nos dirigimos a un sitio apartado para poder hablar tranquilamente.

-¿Qué te pasa? - me preguntó.

- Yo... no le he contado nada a Gustabo... - dije susurrando.

- ¡No le puedes esconder su propia identidad!, el es Mathias, Mathias Conway, tu hijo - me dijo dando golpecitos en mi pecho con su dedo índice.

- Necesito tiempo... - le respondí.

- Jack...el tiempo es oro, aprovéchalo, luego te arrepentirás de haberlo malgastado -

Michelle me puso las manos en mis hombros y la mire fijamente a los ojos.

- Se que es complicado... pero si es necesario te ayudaré, pero cuanto antes se lo digas es mejor para todos - me dijo.

Asentí y volvimos a la sala de reuniones para continuar con el plan.

¿Gustabo o Pogo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora