¿Gustabo o Pogo?

Investigaciones... (Michelle)

Supongo que si estáis leyendo esto es porque he muerto y no creo que de una forma poco dolorosa. No os preocupéis, sabía que en algún momento acabaría así, estaba metida en muchos líos, pero el caso "Conway" así nombrado por mi, era el más arriesgado y con él que más tiempo llevo.

Todo empezó cuando tenía unos 15 años, mi padre era un gran psicólogo reconocido en todo el país por haber tratado con gente importante. Eran mediados de septiembre cuando mi padre nos informó a mi hermana y a mi que seríamos cambiadas de instituto a uno mejor. Mi familia tampoco era de clase alta ni nada por el estilo, una noche le pregunté a mi padre y me respondió que trataría a la familia del director de aquel instituto.

A las pocas semanas descubrí que mi padre trataba con la familia "Conway" y comencé a investigar sobre ellos por simple curiosidad. ¿Adivinar lo que encontré?, un historial marcado por asesinatos, ¿Se trataba de una familia que asesinaba a gente?¿Cómo que el gobierno deja que tuviera un cargo tan alto o simplemente que estuviera libre habiendo tenido ese pasado?, pero no solo se trataba de eso, si no que eran los mayores purgadores de toda la historia habían sido los Conway y metiéndonos más en este tema encontré una tradición que se hace en todas las purgas en la que si un Conway participaba en ella, el juego no comenzaría hasta que él no se hiciera la primera sangre, había hasta gente que deseaba ser asesinado/a por aquella familia y solo se presentaban a la purga para tener la "suerte" de que uno de ellos te matara. Me parecía una locura.

Llegado a ese punto decidí acercarme al hijo de Connor Conway, un hombre con el mayor poder hablando dentro de lo militar y director del instituto al que pertenecía.

Tarde apenas unos días en encontrar a Jack en aquel instituto de 1800 personas. Me pasaba la mayor parte del tiempo observándole entre las sombras, hasta llegaba a saltarme las clases y cuando quise darme cuenta había quedado totalmente absorbida en la investigación.

A Jack le veía a un niño normal y corriente, ahí fue cuando empecé a replantearme que igual todo lo que había leído igual era simplemente para meter miedo pero todos esos pensamientos cambiaron cuando un día Jack intento apuñalar a un niño en el comedor, cosa que me sorprendió ya que cuando se encontraba encima del niño sosteniendo el cuchillo tenía el rostro de un psicopata pero tras haber sido apartado de aquel alumno comenzó a llorar, ¿Por qué lloraría?¿Había sido obligado o simplemente había sido un impulso?, no entendía nada.

Mi padre comenzó a acompañarnos a Julia y a mi al instituto. Pasaba mañana y tarde allí, Jack no asistía a ninguna clase y supe que algo andaba mal. Una noche entré al despacho de mi padre y vi los diagnósticos que tenía sobre Jack, pero más escondidos encontré los de muchas generaciones atrás sobre los Conway y en todos estos documentos aparecían subrayados el de doble personalidad, en ese momento muchas cosas me cuadraron, llegué a la conclusión de que se trataba de un legado, pero una enfermedad así llegaba a ser hereditaria hasta un punto, ahí llegué a la conclusión de que podía ser un demonio o algo así, pero eso era precipitarse mucho.

Esa misma noche en la cena fui castigada por mi bajada de notas y mal comportamiento, así que no pude seguir investigando a Jack.

Pasado varios días mi hermana le conoció, cosa que me asusto muchísimo ya que sabía que aunque Jack no quisiera podría asesinarla sin darse cuenta.

Pase de investigar enfermedades a como deshacerse de un demonio, quien lo diría, a cualquiera que le cuente esto pensaría que estoy loca. Un lunes a la hora del almuerzo cuando Julia y Jack comían sentados en uno de los bancos pegados a la pared del instituto subí a la azotea con un cubo lleno de agua bendita y se la tiré encima, pero me lleve el chasco de que no sucedió nada, estos dos se levantaron y miraron hacia arriba, en ese momento me encontré con la mirada de Jack, una mirada neutra, tanto que me llegó a dar un escalofrío, pero era muy extraño ya que movía sus labios pero al parecer no estaba hablando con Julia, me quedé mirándole fijamente, no podía apartar la mirada y cuando Jack la apartó pude volver en mi y ver que estaba al borde de la azotea, en ningún momento había subido a aquel pequeño muro. Fue ahí cuando confirme mi teoría de que era un demonio pero era distinto ya que no posee su cuerpo si no su mente.

Cuando Danielle y Mathias nacieron tuve el miedo de que este legado se cumpliera y al parecer no era la única ya que Jack se veía muy nervioso por las constantes pesadillas de Mathias.

A día de hoy todavía no le encuentro ninguna explicación pero si sé algo... no tiene cura y si en algún momento nos encontramos acorralados hay que matarlos, no hay otra solución.