Silencio

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Pov. Omniciente.


  Austin estaba apunto de subirse al auto cuando Alexis lo tomó por el brazo suplicándole por un segundo para hablar con él.

—¡Suéltame! —Austin se sacudió su mano de encima.

—¡Austin, solo un segundo, lo prometo! Después de eso, si deseas irte, hazlo, pero no sin antes al menos oírme.

  Austin cerró la puerta del auto con fuerza y se apartó lo suficiente como para que pudiesen hablar a solas. Melinda giró los ojos al igual que Christopher en el volante al imaginar el inminente perdón de Austin hacia su novio.

—¿Qué es lo que quieres decir? —La voz apenas salía de su boca y se cruzó de brazos contra el maletero mientras los hermanos Shannel los miraban con discreción por el retrovisor.

—¡Lo lamento! Enserio lo hago... —Se puso las manos sobre la frente y daba bocanadas de aire como si estuviese apunto de hiperventilar—. ¡Soy un patán! Lo sé, siempre lo he sido, y también soy un idiota. Pero... —Austin lo interrumpió.

—¡No lo digas, por favor!

—¡Tengo que hacerlo! —Alexis se acercó para tocar el rostro de su novio y que este lo mirara a los ojos—. ¡Austin te amo! Si, fallé de la manera más cruel y tonta posible, pero te amo... y me siento terrible por lo que sucedió. ¿Perdonaste a Alana? ¿No? ¿Porque no darme solo una oportunidad?

  Austin hizo que le retirara la mano del rostro y bajó la mirada.

—Porque Alana no fue quien se acostó con Bryce, fuiste tú... Porque no fue Alana de quién estuve enamorado por seis años en silencio, y por supuesto no fue Alana la persona que me juró que siempre íbamos a ser solo él y yo... Fuiste tú, y mentiste. —Austin tragó grueso antes de terminar las palabras—. Es por eso que tu ya no significas nada para mi...

   Se dirigió a la puerta nuevamente, Alexis se quedó congelado por un momento pero lo volvió a sostener de ambos brazos con fuerza, y mirándolo fijamente intentó besarlo. Austin se quedó estático sin tan siquiera cerrar los ojos. Cuando Alex se apartó el volteó el rostro.

—¡Eso no significó nada para mi! El amor que te tenía... Tú ya lo mataste. —Abrió la puerta para entrar.

   Alex se lanzó al suelo y lo sostuvo por una pierna llorando.

—¡Austin, no me dejes solo! Te suplico solo una oportunidad, una... ¡No puedo vivir si no estás conmigo!

   El corazón de Austin estaba partido en dos, Alex se aferraba a su pierna como si fuese un niño, deshecho en llanto, mientras que por el rostro frígido de Austin, una lágrima comenzó a caer antes de que se sacudiera y se subiera al Royce cerrando la puerta tras de él, dejando a Alex llorando en el suelo.

   Se secó la lágrima con las mangas de su abrigo y se dirigió a Christopher endureciendo la mirada.

—¡Acelera! —Ordenó.

—¿Aus, estás seguro de que quieres esto? Es decir, si, yo soy la ex novia de Alexis, sé muy bien que nuestra relación fue tóxica, y que la tuya con él en cierto modo también, pero... ¿Realmente quieres dejarlo así?

—Mel... no quiero volver a verlo...

—Déjalo, Mel, sabe lo que hace... ¡Quizas te la pases mejor en londres ahora que soy parte del viaje! —Christopher le dio un guiño coqueto que Austin ignoró.

   Melinda decidió no interferir y obedeció a Austin, acelerando mientras Alexis veía de rodillas sobre el concreto como el auto se alejaba con la persona que amaba dentro de él.


Centro penitenciario de Las Vegas, Nevada.


—Amateo Harrison Jr, tiene derecho a una llamada, solo dos minutos. —El guardia del centro penal lo empujó.

   Amateo tomó el teléfono y marcó el número de Diana, pero ella no le respondió. Entonces decidió marcar el de Dynia. Al pasar de unos segundos ella contestó.

—¡Hola! ¿Quién habla? —No tenía idea de que era su padre.

—Dynia, hija... tienes que sacarme de aquí por favor, todo es mierda en este lugar, comemos mierda, dormimos sobre mierda y todo huele a mierda. —Parecía consternado, Dynia del otro lado del teléfono apretó los labios—. ¡Sabes que yo no hice las cosas de las que la maldita de Alana me está acusando!

—Lo sé papá... —Le respondió.

—Entonces... ¿Me ayudarás? —Pareció animarse un poco.

—No, claro que no... Puede que no hayas cometido este crimen, papá, pero aún así eres culpable, eres culpable de golpearnos a Ashton y a mi desde que éramos unos niños, por cualquier cosa. Eres culpable de mantener a mamá como una esclava a tu lado, sin ningún derecho más que ser tu esposa dorada y perfecta ante la sociedad. Eres culpable de sobornos, estafas, corrupción, y estoy realmente feliz de que estés en la cárcel, porque al menos, mamá y yo seremos libres de ti.

—Mocosa malcriada, siempre fuiste una vergüenza de hija, ojalá la vida me hubiese dado otro varón en lugar de una inútil mujer como tú. —Le gritó.

—Si, soy una mujer, pero tengo valores papá, tengo coraje y es más de lo que puedo decir de mi hermano femicida o de ti. Un par de días en la cárcel y mírate... ¡Ya estás suplicando por el perdón de Alana!

—No necesito el perdón de esa zorra, ni el tuyo. No estaré aquí por mucho tiempo, cuando el juicio se efectué voy a demostrar mi inocencia y saldré libre. —Se rió burlándose de ella—. No tienen pruebas, y mucho menos testigos que estén en posición para declarar.

   Dynia se rió de su padre a carcajadas.

—¡Estás tan equivocado! Mamá y yo hablamos... y ambas... ¡Vamos a unirnos a Alana para hundirte! Porque te lo mereces...

   Amateo se quedó sin habla.

—Te arrepentiras de esto Dynia, cuando empieces a pagar por los pecados de Alana, lo lamentarás...

—No, no lo haré, incluso si eso llega a suceder... Porque sé que hice lo correcto. Por tu culpa yo guardé silencio cuando Shelfa Bomday fue asesinada por Ashton, y dejé que Alana debiera huir... guardé silencio cuando Mailette Ares fue asesinada por mi hermano también, callé bajo tus órdenes y entonces yo debí huir. También he callado el secreto de Ava Monroe por tu culpa, y no lo revelaré incluso aunque ella esté muerta... Pero esta vez, ni mamá ni yo estamos dispuestas a no hablar...

   Amateo desconectó la llamada molesto, golpeando el teléfono mientras un guardia con su vara reglamentaria lo golpeaba en las manos para que se comportara.

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La Biblia De Una Dominatrix © [ EN FÍSICO ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora