↳;; ❝Volkacio AUs♡

police and thieves [2]✨

(Parte 2 de este AU, la primera parte está unos capítulos más arriba)

Dónde Horacio toma una decisión. Y Volkov también.

(Me basé en la canción de la multi para escribirla, escuchadla si queréis <3)

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Tan sólo había ido a verlo una vez, pero no estaba enfadado con él. Había sido probablemente gracias a Volkov que su condena quedara reducida tan mínimamente, así que le debía una. Además, no tenía ningun derecho a ser él el enfadado.

Y es que el mal rato que le había hecho pasar, evitando sus sentimientos y con la intención de romperle el corazón, había sido cruel. Nadie -y menos aún Volkov, que le había tratado tan bien- merecía pasar por eso. Y se sentía culpable.

No es que de repente tuviera claro lo que buscaba con Volkov, al contrario, ahora tenía incluso más dudas, pero sabía que no lo quería lejos. O, por lo menos, mientras decidía lo que hacer. Lo quería cerca, necesitaba su presencia para saber que, después de todo lo que le había hecho, aún no lo odiaba.

Por eso, una semana después de salir de prisión, le pidió verse. Había esperado esos días para intentar restablecer su vida, pero sentía que el tiempo se le echaba encima y prefería sacarse de encima el asunto de Volkov. Acabara como acabara, tenía que enfrentarse a ello. Si esperaba más, ese aspecto de su vida le engulliría y controlaría el resto de sus relaciones, dependería siempre de la sombra de su relación con el ruso. Tenía que hablar con él.

Volkov ya no trabajaba en el turno de noche, como siempre lo había hecho. Decía que lo prefería, porque así tenía el día libre por si Horacio quería verlo. Él siempre se preguntaba de dónde sacaba tiempo para dormir o para comer, ya que se pasaba la noche trabajando y aún así siempre encontraba un rato para él.

Pero después de su estadía en prisión y su distanciamiento, Volkov cambió su rutina a una más cómoda, trabajando durante la mañana y teniendo la noche para descansar.

Por eso Horacio le pidió verse tarde, demasiado tarde como para que el ruso estuviera despierto y dispuesto a responder a su mensaje. Pero lo hizo. Siempre lo hacía. Siempre estaba dispuesto si se trataba de él.

Ese era otro de los motivos por los que Horacio lo necesitaba a su lado, a pesar de su miedo profundo al amor.

—[✨] It's like the t-shirt that I'm never gonna wear again
But I can't throw away
And I can't stand the thought of not talking to you one day
Forgetting our old ways

(—[✨] Es como la camiseta que no voy a volver a ponerme
Pero no puedo tirar
Y no puedo aguantar el pensamiento de no hablarte un día
Olvidando nuestras viejas costumbres)

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Ambos se vistieron con ropa oscura, casi como si quisieran mimetizarse con la noche. No fueron juntos, a pesar de que se dirigían al mismo lugar y podrían haber compartido coche. Horacio decidió dar un paseo hacia allí.

Hacía una noche demasiado bonita como para pasarla dentro de un bar. Era la típica noche en la que ocurren cosas, las noches que incitan a hacer locuras. Las noches en las que los amantes se escapan juntos, y los enamorados se dejan llevar. Ese tipo de noches en las que no existen secretos y la vergüenza y el arrepentimiento sólo llegan con la primera luz del sol. Noches para pasar despierto, para escapar de casa, para disfrutar del aire nocturno.

Y a Horacio le apetecía ver a Volkov, pero no le apetecía tener esa conversación. Sabía que había perdido su confianza en el momento en el que había confesado su decisión de no enamorarse nunca más, y que la había perdido más aún en el momento en el que le había detenido por tráfico de drogas. Pero, por otro lado, también sabía que necesitaban aclararlo todo. Y que él no tenía derecho a tratar a Volkov como la canción en tu playlist que nunca escuchas pero tampoco borras.