↳;; ❝Volkacio AUs♡

meet me in the pale moonlight✨

20➪ flowers❀

(High School AU en el que Volkov, Horacio y otros personajes son adolescentes)

-Recomiendo leer el One Shoot que escribí para el Día 3 de la Volkacio week y el que se llama "rain" porque están algo relacionado con este. 

Ya tenía ganas de volver a escribir de este AU

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Horacio se despertó empapado en sudor. Había dejado la ventana abierta durante la noche, pero el aire era demasiado caliente en el mes de julio. Bostezó. Tenía muchas ganas de darse una ducha fría, pero lo primero que hizo fue mirar el móvil para ver si tenía algún mensaje. Ignoró los que no le interesaban y abrió el chat de Gustabo, en el que le preguntaba si quería venir esa tarde al río, como cuando eran pequeños, junto con Segis, Emilio y el resto. Evidentemente le dijo que sí, y escribió un mensaje a su novio para invitarlo. 

Aprovechó para darse una ducha fría mientras esperaba la respuesta de Volkov. Se vistió con ropa fresca de verano y un bañador. Comprobó su móvil y Volkov le había dicho que le encantaría ir y le había pedido que fuera a buscarlo porque no tenía ni idea de donde quedaba la ubicación que Horacio le había mandado. El peliazul se puso algo nervioso, porque pocas veces había visto a los padres de Volkov, pero aceptó gustosamente. 

Escuchó el timbre de su casa y la voz de Gustabo y sonrió. Antes de bajar, vació su mochila de clase y metió todo lo que necesitaría esa tarde. En el piso de abajo, Gustabo charlaba animadamente con sus padres, cargando con su mochila y una bolsa con comida. 

—¡Hola! Dios, que lento eres, tardaste años en responder mi mensaje —le recriminó. 

—Estaba dormido —se excusó Horacio, mientras hacía el amago de coger una tostada de un plato que su padre había colocado sobre la mesa. Gustabo le dio un golpe en la mano antes de que las tocara. 

—Ya comemos allí, vamos, que después hace mucho calor —Horacio suspiró. Gustabo siempre tenía muchísima energía por las mañanas. 

—He invitado a Viktor, no te importa, ¿no? —preguntó, mientras se acercaba a la puerta junto a Gustabo. 

—Lo daba por hecho, uno no va a ningún sitio sin el otro —Horacio lo miró con el ceño fruncido para que se callara. 

No es como si sus padres no supieran que estaban saliendo, porque la verdad es que era algo obvio. Nunca lo habían hablado como tal, porque a Horacio le incomodaba hablar de temas amorosos con sus padres, pero que estaba saliendo con el chico ruso era algo que todos tenían claro. 

—Tenemos que ir a buscarlo, ¿vale? —se despidió de sus padres y salió de su casa junto a Gustabo—. Me ha dado su dirección. 

Vio como Gustabo cogía su bicicleta, así que Horacio cogió también la suya, porque así por lo menos no les pesarían tanto las cosas. No tardaron mucho en llegar a la casa de Volkov. 

—Gustabo, ven conmigo, porfavor —pidió, mientras bajaba de su bicicleta y la dejaba apoyada en el suelo. 

—Ni de coña, que incómodo —se negó Gustabo. 

—Es que estoy muy nervioso, ¿y si les caigo mal a sus padres? —Horacio estaba lleno de dudas, así que Gustabo hizo un gesto con la mano para quitarle importancia. 

—No vas a conocerlos, tranquilo. Sólo salúdalos y llévate a tu novio. Rápido, por favor, que hace calor —se movió hasta quedar bajo la sombra de un árbol y sacó su móvil, dando por terminada la conversación.