↳;; ❝Volkacio AUs♡

my worst✨

Dónde Volkov y Horacio son muy diferentes, pero tienen que pasar tiempo juntos.

Parte 1 de 2 (creo, no sé, ya veré). 

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Horacio Pérez y Viktor Volkov eran como la noche y el día.

Y quizás ahí radicaba el odio mutuo e injustificado que llevaban teniéndose desde los trece años.

Nunca habían hablado en otro contexto fuera del instituto, y tampoco tendrían pensado hacerlo si el destino no lo hubiera causado. Eran tan diferentes que todas sus conversaciones acababan en gritos, porque ninguno podía darle la razón al otro.

Volkov era perfecto. O, por lo menos, era lo que trataba de demostrar. Le daba igual que hablaran mal sobre él, porque tenía su objetivo claro. No estaba en su último año en el instituto para escaparse y fumar, o para hacer amigos,  como la mayoría de sus compañeros. Quería sacar las mejores notas posibles. Necesitaba hacerlo.

Greco, la única persona que toleraba, solía decirle que se esforzaba demasiado. Y siempre escuchaba por los pasillos algún que otro comentario sobre él, en general bastante desagradables y en referencia a sus buenas notas.

Pero le daba igual. Su futuro era suyo, y no dejaría que nadie se metiera en medio.

Por eso era algo esperable que lo eligieran como candidato para optar a las becas internacionales de una de las mejores universidades. Se le daba la oportunidad a todos los alumnos, realizando un examen sobre conocimientos científicos y matemáticos, literarios y lingüísticos, históricos y artísticos, y de idiomas. De su instituto, Volkov había sido una de las personas que había sacado la calificación suficiente como para presentarse a los exámenes contra alumnos de otros países.

La otra persona había sido Horacio.

Por una parte, Volkov no se había sorprendido. No era la primera vez que Horacio sacaba una nota tan alta como la suya, o incluso le superaba. Aunque seguía sin entender cómo era posible.

Horacio se saltaba la mitad de las clases de cada asignatura, y cuando iba se pasaba la hora durmiendo o hablando con sus amigos. Jamás prestaba atención, y tampoco parecía hacer nada en su casa. No es que Volkov le hubiera preguntado o supiera de su vida, pero lo seguía en sus redes sociales y podía ver que se pasaba la vida en la calle, fumando y, en su opinión, perdiendo el tiempo.

Horacio siempre había sido uno de los chicos más populares del instituto. No de una manera molesta, simplemente su nombre resonaba entre la boca de los demás alumnos porque llamaba la atención. Era atractivo, y tenía un estilo llamativo. Hablaba con todo el mundo, y era muy amable. Había acabado juntándose con el peor grupo de todos, probablemente las amistades más tóxicas que podía haber encontrado, pero Volkov no podía juzgar eso.

Porque con él, Horacio jamás había sido amable. Quizás le había cogido manía desde el primer momento en el que se habían visto, pero no tenía ningún motivo real porque Volkov jamás le había hablado mal hasta ese momento. Horacio había empezado la primera pelea, y desde ese momento no soportaban la presencia del otro.

Ese último año, Horacio había dejado de ser agradable con los demás. Volkov ya no era la excepción, era frecuente verlo discutiendo con gente, incluso llegando a pelearse físicamente. Y el ruso, igual que todo el mundo, sabía el motivo, aunque hubieran llegado al acuerdo tácito de no hablar de ello frente a Horacio.

Las fotos.

Las fotos de Horacio que alguien había publicado anónimamente a principios de curso. Él había actuado como si le diera igual, pero su actitud había cambiado. Al principio había sido difícil para él enfrentarse a todos los comentarios y cuchicheos por los pasillos, pero con el tiempo el rumor había ido menguando lo suficiente como para que pudiera llevar un día a día normal.