↳;; ❝Volkacio AUs♡

don't you recognize me? ✨

16➪ unrequited love (amor no correspondido) 

Donde Dan y Fred llegan nuevos a comisaría y Horacio siente que ha perdido lo que tenía con Volkov. 

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Horacio se vistió con el nuevo uniforme y se puso el pasamontañas azul. La verdad es que era sumamente incómodo llevar eso en el rostro, pero era necesario por su seguridad, como los nuevos nombres. 

A Horacio no le gustaba ser Dan. Dan no llevaba cresta ni ropa colorida, Dan trabajaba duro sin hacer tonterías y no bailaba nunca. Volkov no confiaba en Dan, Dan no confiaba en Volkov. Pero Dan era el héroe y Horacio solo un criminal, así que si quería seguir en comisaría se veía obligado a ser Dan. 

Conway los había citado en su despacho para presentarlos a los comisarios antes de su primer día de trabajo. Después, irían a patrullar y empezarían a integrarse con la malla. Por un lado les gustaba eso de ser alguien nuevo, poder empezar de cero, pero por otro lado dolía volver a empezar, sobre todo a Horacio, que tenía más lazos afectivos en el CNP que Gustabo. 

Subieron las escaleras sin hablar entre ellos, porque Gustabo percibió lo nervioso que estaba Horacio y prefirió dejarlo un rato solo. El rubio llevaba prácticamente toda su vida junto a Horacio, y lo conocía más que a él mismo. Sabía que cuando Horacio estaba pasando por un mal momento prefería estar solo para poder pensar tranquilo. Aún así, a Gustabo le sabía mal no poder ayudarlo, así que le dio una suave caricia en la espalda antes de abrir la puerta del pasillo. 

—No te pongas tan nervioso. Solo son Volkov, Greco y Conway. Además, seguro que no tenemos ni que hablar, el abuelo se encargará —Horacio asintió. 

—A Dan no le gusta Volkov —dijo, más para sí mismo que para Gustabo, intentando autoconvencerse. 

Gustabo no respondió, porque no se esperaba ese comentario, tan solo dio unos suaves golpecitos en la puerta del despacho. Ambos debían comportarse de forma más seria y profesional, porque Dan y Fred eran subinspectores, no alumnos. Gustabo no podía llamarles "abuelo" o "cabeza hormiga". Tenía que mostrar respeto. 

Escucharon la voz grave de Conway dejarles pasar, y eso hicieron. Conway estaba sentado en su silla, con Volkov a su derecha y Greco a su izquierda. 

Se sentaron en sus sitios de siempre, Gustabo a la derecha y Horacio a la izquierda, en frente de Volkov. 

No pudo evitar mirarlo discretamente de arriba a abajo, y se descubrió a sí mismo deseando ser reconocido. Sabía que eso lo arruinaría todo, pero no podía evitar que hubiera una parte de él que quisiese hacer que Volkov descubriera que nunca los había traicionado, que no era un criminal. 

Se le retorcieron las tripas al pensar en que Volkov consideraba a Horacio un traidor, así que se centró en Conway para distraerse. 

—Subinspectores Fred y Dan, estos son los comisarios Volkov y Greco —los mencionados saludaron con la cabeza. A Horacio le dolía el sentirse tratado con tanta frialdad, cuando entre ellos cinco siempre había habido una buena relación—. Son nuevos. 

—¿Puedo preguntar por qué van enmascarados, caballeros? —preguntó Greco. Gustabo decidió responder. 

—Por nuestra seguridad —fue una respuesta breve, que indicaba que no quería profundizar en el tema, y Greco no insistió. 

Horacio se fijó en Volkov, que los miraba con la misma frialdad con la que miraba a Horacio y Gustabo al llegar a comisaría. Con el paso del tiempo, Horacio se había dado cuenta de que Volkov los miraba de manera más cercana, sobre todo a él, que había conseguido hacerse un pequeño hueco en el helado y herido corazón del comisario. Y ahora, después de haber avanzado tanto, le dolía muchísimo tener que volver a empezar de cero con él.