↳;; ❝Volkacio AUs♡

happiness[2]✨

Donde Volkov y Horacio deciden llevar su relación en secreto, para mantener las apariencias en el trabajo.

(Parte 2 del AU basado en el canon actual)

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Horacio intentó ocultar un bostezo lo mejor que pudo, inclinando un poco la cabeza hacia abajo y tratando de cubrirse con el brazo.

Sintió a Volkov reprimir una sonrisa a su lado, bajo la máscara, y él, contagiándose, tuvo que hacer lo mismo.

Las cosas habían avanzado a una velocidad apabullante, y el mero hecho de estar juntos les arrancaba una sonrisa a ambos. Horacio nunca había visto a Volkov sonreír tanto como lo había hecho esas últimas semanas. Por no hablar de la cantidad de tonterías que hacía con el único fin de hacerle reír cuando lo notaba bajo de ánimos.

Y él también había recuperado un poco aquellas partes de su personalidad que se habían ido ocultando con el pasar de los años. Poco a poco, volvía a ser él mismo. Principalmente gracias a la terapia, pero la presencia tan íntima de Volkov en su vida ayudaba mucho.

Ambos sacaban la mejor versión del otro, la que se reía y hacía el tonto sin vergüenza. La que sonreía hasta que le dolían las mejillas.

Dirigió una breve mirada a Volkov. Se veía tan aburrido como él. Se arrepentía de haber aceptado asistir a esa reunión con la LSPD. Pero era el jefe del FBI, y debía guardar ciertas apariencias.

Apariencias. Tenía que guardarlas en muchos aspectos de su vida, y por muchos motivos. En el trabajo no podía permitirse actuar como lo hacía fuera de servicio.

Y tampoco podía dejar que se supiera que uno de sus subordinados era su pareja. O lo que sea que fuera Volkov.

Simplemente no sería lo adecuado para mantener la imagen de seriedad que se suponía que debía dar el FBI. No podía gritar a los cuatro vientos que tenían una relación, aunque de vez en cuando quisiera hacerlo. No se consideraba una persona especialmente celosa, pero había veces en las que tenía que morderse la lengua para no soltar ningún comentario a la gente que ligaba con Volkov tan evidentemente.

Lo miró de nuevo, esta vez distrayéndolo lo suficiente como para hacerle apartar la mirada del frente y dirigirla a él. Las máscaras hacían que sus ojos fueran la única parte visible de sus rostros. Mantuvieron el contacto visual durante unos segundos, hasta que Horacio le guiñó un ojo y Volkov apartó su mirada casi por instinto.

Divertido con la reacción, Horacio deslizó su silla unos centímetros, con el mayor cuidado y lentitud posible para no llamar la atención, y se acercó un poco más a Volkov, que lo observaba curioso.

Ambos dirigieron su mirada al frente, donde el jefe de la LSPD hablaba sobre algo que hacía tiempo que habían dejado de escuchar. Sin mostrar ningún gesto delator en el rostro, movió su mano izquierda hasta posarla en la rodilla de Volkov. Apretó, haciéndole dar un respingo que sólo fue notorio para él, y después la deslizó hacia arriba, colocándola en la mitad de su muslo.

Acarició la zona y Volkov lo miró con pánico rebosando en la mirada. Realmente no sabía qué estaba haciendo Horacio, o qué pensaba hacer. Así que, con la intención de frenarlo, llevó su mano también bajo la mesa y entrelazó sus dedos con los de Horacio, que se dejó hacer.

Ambos tenían el corazón ligeramente acelerado por el nerviosismo a ser pillados, pero era justo eso lo que más les gustaba.

Horacio negó con la cabeza levemente. Se sentía como un puto adolescente haciendo manitas bajo el pupitre, intentando ocultarse de la mirada de su profesor.