↳;; ❝Volkacio AUs♡

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Dónde Volkov vuelve a la ciudad después de mucho tiempo, sin saber si tiene todavía una oportunidad con el que fue su primer amor, y llegó a considerar el amor de su vida.

Parte 1 de 2.

Basada en la canción del título, en especial en esta estrofa, porque me pone soft y sad al mismo tiempo:

—[✨]"It's no big surprise you turned out this way

When they close their eyes and prayed you would change

And they cut your hair, and sent you away

You stopped by my house the night you escaped

With tears in my eyes, I begged you to stay

You said, hey man, I love you but no fucking way"

(Traducción:

—[✨]"No es una gran sorpresa que hayas acabado así

Cuando ellos cierran los ojos y ruegan que cambies

Y te cortaron el pelo, y te despidieron

Paraste en mi casa la noche en la que te escapaste

Con lágrimas en los ojos, te rogué que te quedaras

Tú dijiste: 'Te amo, pero de ninguna manera' ")

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Volkov no prestó atención a lo nervioso que estaba hasta que empezó a sentir los síntomas físicos. El dolor en su estómago, el hormigueo que le recorría todo el cuerpo, el temblor en sus manos y lo tensa que tenía la mandíbula.

Respiró hondo, intentando calmarse. Se repitió a sí mismo que todo iría bien, pero en realidad no tenía ninguna esperanza puesta en que así fuera.

Pero tenía que intentarlo.

Conforme caminaba por las calles, los recuerdos iban apareciendo en su mente, como si hubieran estado bloqueados hasta ese momento. Todo seguía igual que hacía cuatro años. Y, aunque la última vez que vio esos árboles y esas casas era de noche, recordaba los colores y las luces a la perfección porque soñaba con ellos constantemente.

No pudo luchar contra la punzada dolorosa que le atravesó el pecho al recordar ciertas cosas, al recordar cómo le habían arrebatado la felicidad, cómo había sufrido por razones que se salían de su control. Cómo había hecho a otros sufrir.

Cómo había hecho sufrir a Horacio.

No había sido culpa suya, nunca lo había sido. A veces -por algún motivo que Volkov no había entendido en su momento y seguía sin entender- la vida ponía obstáculos en el camino de personas buenas que no lo merecían.

Hacía tiempo que ambos lo habían descubierto.

Cuatro años antes...

Horacio no había podido dormir en las largas tres horas que llevaba en la cama.

Aunque Volkov le había dicho que todo iría bien, que no tenía por qué tener miedo, no había podido librarse de la sensación de pánico en toda la noche. Se removía entre las sábanas, nervioso, y miraba constantemente la pantalla de su teléfono móvil, con el brillo al mínimo, esperando ver el nombre de su pareja en la barra de notificaciones.

Intentaba apartar todos los pensamientos negativos, respirando hondo para combatir la ansiedad e intentando aferrarse con todas sus fuerzas al poco positivismo que le quedaba dentro. Pero tenía miedo, y eso sobrepasaba todo su autocontrol. Las horas se le hacían infinitas esperando un mensaje, una llamada, cualquier cosa que le hiciera saber que todo había salido bien, pero al otro lado de la línea no había más que silencio.