partners in crime✨

3.2K 337 267
                                    

Dónde Volkov y Horacio son criminales que se conocen y se enamoran en la cárcel ♡︎

(Me ha gustado mucho escribir este AU no sé por qué, ojalá que a vosotros os guste también) 

(Os recomiendo que os pongáis musiquita de chill de fondo, pega con varias situaciones. Ahora sí, me callo y os dejo leer)

*´¨'*•.¸¸.•*´¨'*•.¸¸.•*´¨'*•.¸¸.•*´¨'*•.¸¸.•

Apuró el resto de su comida, mientras compartía miradas con Gustabo, que estaba sentado en la otra punta del comedor. Tenía el estómago revuelto por los nervios, pero dejar todo en el plato sería extraño viniendo de él, así que hizo un esfuerzo por acabar su comida.

De camino a la celda en la que había pasado los últimos siete meses de su vida intentó disimular su sonrisa. Sentía una peculiar corriente eléctrica recorrer su cuerpo, todo su sistema nervioso, cada vez que pensaba en lo que iba a pasar esa noche. 

De pie en medio de su celda, un chico alto, de hombros anchos y cintura fina, escondía algo entre las páginas de uno de los libros de la biblioteca de la prisión. Llevaba el uniforme de preso arrugado y desaliñado, pero su peinado seguía tan impecable como siempre, perfectamente peinado hacia atrás con la cera que había conseguido que uno de sus contactos le trajera del exterior. Se inclinó sobre la mesa del centro de la celda y el movimiento contrajo los músculos de sus hombros de una manera que instó a Horacio a acercarse por la espalda y abrazarlo. 

Lo sintió sobresaltarse levemente ante el contacto, pero se relajó al instante en el que se dio cuenta de quién era. Las manos frías de Horacio se colaron bajo su camiseta de algodón amarilla, erizándole la piel con las suaves caricias que repartía por su vientre y estómago. 

—¿Qué hacías? —murmuró contra su espalda, aspirando el olor a jabón de su ropa. 

—Preparar las últimas cosas —aclaró, sujetando los brazos de Horacio, que ascendían bajo su ropa hasta casi acariciar su pecho. Con suavidad los retiró de bajo la prenda para darse la vuelta y abrazarlo. 

Era increíble cómo habían cambiado las cosas en poco más de medio año. Horacio no pudo evitar que su mente vagara tranquilamente entre los recuerdos que afloraban en su cabeza al pensar en el momento en el que había conocido a ese insoportable ruso que se había ganado su corazón. 

Siete meses antes… 

Cuando llegó a prisión junto a Gustabo por robo a mano armada, se desesperó al saber que no iban a estar juntos en la misma celda. Y cuando vio a su compañero -un ruso de ojos color cielo y actitud altiva- temió por su seguridad. 

Pero, a pesar de que no se llevaron muy bien al principio, Viktor Volkov jamás le tocó un pelo. A los ojos del ruso, Horacio era demasiado efusivo y entusiasta como para llevarse bien con él. Compartían habitación pero no hablaban más que para lo necesario, hasta el día en el que lo escuchó decirle a Gustabo que quizás les vendría bien hacer amigos para que les ayudaran a ganarse un sitio en la cárcel. 

Volkov, tumbado en su cama, no pudo evitar soltar una risa sarcástica, que captó la atención de ambos jóvenes. Gustabo puso los ojos en blanco y decidió ignorarlo, pero Horacio -con el rostro rojo de la rabia y la vergüenza y el ceño fruncido- decidió dejar de lado el respeto que le imponía el ruso para encararlo. 

—¿Qué pasa? —preguntó irónico, y Volkov sonrió de esa manera socarrona, que Horacio le había visto un par de veces, antes de responder. 

—Que es ridículo. Aquí no tienes amigos, sólo procura no tener enemigos —le aconsejó, levantándose de la cama para hacer frente al chico—. Pasa desapercibido, créeme que será lo mejor. 

↳;; ❝Volkacio AUs♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora