81. Todos caemos en el juego

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Matteo

Una semana, una semana extrañando, extrañado todo de ella; me sentía devastado, me sentía vacío pero al mismo tiempo, estaba molesto, estaba furioso, eran varias sensaciones que por momentos me hacían llorar y otros me hacían gritar con todas mis fuerzas.

¿Acaso jamás me amó? ¿Siempre fui su víctima? ¿Estuvo apunto de matarme alguna vez? ¿Me extraña o le da igual? ¿Y si la llamo e intento arreglar todo?. ¿Cómo podría arreglar todo después de toda la mierda que le dije? Joder que idiota que soy.

En el presente estoy echado en el suelo de mi habitación, al lado mío hay una botella de whisky media vacía; iba agarrar la botella cuando de repente tocan la puerta — Dije que no quiero ver a nadie Miguel.

— Ni siquiera a tu... ¿Qué mierda te ocurrió? — preguntó Kevin; en otras ocasiones me hubiera emocionado de volver a ver a mi mejor amigo, pero en esta ocasión sólo pude alzar los hombros.

— Hola — murmuró — ¿qué haces aquí? — preguntó sin verlo.

— Viejo vengo de visita durante dos semanas y te encuentro hecho mierda — habló, no logró identificar si está molesto o indignado por mi apariencia; alcé los hombros en respuesta y note como él se hecho a mi lado — a juzgar por el desorden se que te ocurrio algo malo, ¿deseas que llame a Noah?.

— Noah ya no es mi amigo, él es amigo del difunto Antonio — contesté sin importancia.

— ¡¿Difunto?! ¡¿murió?! — preguntó sentándose sorprendido.

Si Scarlet lo mató, aunque siendo sinceros se lo merecía — Si, murió.

— Wow, ¿Y si llamo a Scarlet? — preguntó con una sonrisa, negué — ¿por qué? Antes que me vaya ustedes estaban muy felices.

— Si, bueno terminamos, estuvimos juntos pero terminamos — conteste desanimado.

— ¿Por qué? — preguntó Kevin obligándome a sentarme.

Bueno, me enteré que fui su víctima desde el principio, que ella y toda su familia son asesinos y han matado a mucha gente alrededor del mundo y que ella mató a Antonio y a sus secuestradores, porque si, estuvo secuestrada y fingió su muerte — Eran muchos problemas.

— ¿Pero aun la sigues amando, no? — volvió a preguntar y asentí sin dudarlo — entonces, qué esperas para llamarla.

Negué — Le dije cosas feas — y aunque me haya mentido durante todo este tiempo, aun la amo — no hay solución para lo nuestro.

— Lo siento mucho amigo, — dijo para luego agarrar una botella de whisky y beber un poco — al fin al cabo es una Frost, todos caemos en el juego de los Frost..

En ese momento no entendí a que se refiere con ¨todos caemos¨ que yo sepa él y Edgar solo estaban por sexo y nada más... ¿Acaso Kevin se enamoró de Edgar?.

Scarlet FrostDonde viven las historias. Descúbrelo ahora