TE ESPERÉ
Múnich, Baviera, Alemania21 de agosto
La puerta de mi habitación se abrió dejando ver a Hiro y a Diego, el último tenía una bandeja con comida en las manos.
Habíamos llegado hace un rato, Sam se fue a su departamento a descansar, Miha me dijo que había tenido cirugías todo el día y estaba a punto de desfallecer. Ella se había marchado hace unos minutos, tenía turno nocturno y prometió que nos veríamos mañana.
—Hola —murmuré tanteando el terreno.
Este incidente había sido completamente mi culpa, los preocupé por mi descuido conmigo misma, era de esperar que ellos estuvieran molestos.
—¿Qué le dirías a Ashton si se descuida de esta manera? —preguntó Diego con el ceño fruncido, la pregunta fue más directa de lo que me esperaba.
—Que su guapo tío se ve muy sexy enojado, pero no queremos que le salgan arrugas, así que debe comer a sus horas —bromeé sin éxito.
Hiro pasó del regaño y se dejó caer a mi lado en la cama.
—No me vuelvas a preocupar de esa manera —exigió el pelinegro, abrazándome con mucha fuerza—. Te lo juro, Hope, yo mismo te mato, ya que por tu culpa tengo más canas en mi precioso cabello.
—Cuando Miha llamó para decirme que estabas en el hospital, inconsciente, tuve un déjà vu —siguió Diego, ignorando mi broma y a Hiro, dejó la bandeja en mi regazo y ordenó, con la mirada, que comiera todo—. Me sentí igual que cuando Oliver me llamó, pidiendo que, si estaba con Amanda fuera a un lugar privado, ese día me suplicó que no reaccionara impulsivamente a lo que estaba por decirme. ¿Sabes lo difícil que fue convencerla de subir a un avión sin decirle por qué?
—Lo siento, Diego, de verdad, lo olvidé. Tenía muchas cosas en la cabeza, demasiados pendientes por atender en el día que solo pospuse el almuerzo para cuando terminara en el orfanato. No fue mi intención acabar en hospital, ni que Miha descubriera lo de Nick, ni que Sam fuera...
—¡¿Miha sabe?! —exclamaron al unísono.
Asentí.
—Oliver tuvo que enviar mi historia clínica, ella me tuvo que atender por falta de personal, así que la leyó antes de que despertara, le expliqué algunos detalles y prometió no decirle a Sam.
No mencioné que Miha dijo que no se lo diría, por ahora.
—Joder, bonita, ella en verdad no le oculta nada a Sam —bufó Hiro.
—¿Te imaginas que Sam hubiera visto tu historia clínica?
—No quiero ni pensarlo.
—Mejor no hablemos de eso, has tenido suficiente estrés por hoy —sugirió Hiro.
Diego lo apoyó.
Los chicos me contaron sobre su día, Diego había llorado cuando Sergio se fue y le hizo un drama por abandonarlo, lo usual. Hiro estaba por explicar que hicieron él y Daniel todo el día cuando Oliver llamó.
La emoción en Diego era indescriptible, intentó contenerse cuando respondió, era la primera que hablaban desde que Oliver, Ashton y Amanda viajaron. Fue a su habitación —la antigua habitación de Amanda— por un poco de privacidad.
—Hope... —murmuró Hiro.
Había reemplazado la bandeja de comida por una almohada y su cabeza, estaba jugando con su cabello cuando me preguntó.
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Solo deja que te toque © [EN PROCESO]
RomanceCuando dos personas están destinadas a estar juntas no importa el tiempo que pase, ni las nuevas personas que lleguen porque, al final del camino, volverán a encontrarse y nunca más se dejarán ir. Así podemos hablar de la historia de Hope y Sam, bu...