Capitulo 11 - Hope

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QUÉDATE
Boston, Massachusetts, 2013

27 de Enero

No esperé a que la alarma sonara para despertar. Aún era muy temprano cuando bajé a servir mi desayuno.

—Te he visto poco estos días, amor —me reclamó papá, estaba sentado en el balcón tomando café— ¿la escuela te tiene muy ocupada?

—No, no es eso, solo tuve que arreglar unas cosas de Brook Farm y definitivamente ya no me distraeré con nada del pueblo —aseguré.

Me serví un vaso de jugo de naranja, tomé una dona y volví con papá.

—¿Nada de Brook Farm te distraerá? No entiendo, cariño, creí que tenías  una relación con ese chico Cristian.

—No, para nada —sonreí—, si quieres hablar con los tíos acerca de un sustito no me enojaría.

—Tienes mi sentido del humor —estalló en carcajadas.

—Claro, papá, es broma...

La venganza es mala, el karma siempre llega, no dejé de repetirme para no pedirle algo malo a papá.

|=|

Las cosas con Sam ayer no acabaron ni bien ni mal, solo no acabaron.

Estuvimos poco más de una hora abrazados en el parque pero no mencionó nada acerca del corto —demasiado— beso que le di. Después de eso caminamos hasta el edificio y solo me dejó en mi apartamento pidiéndome que descansara, que ya mañana podríamos hablar en la tarde.

—Hola, bonita —me saludó un chico Moreno luego de abrir la puerta del apartamento de Sam—, ¿buscas a alguien? Porque yo puedo ser tu compañía.

No pude evitar reír, asumí que eso debía ser coqueto y seductor pero solo resultó cómico, demasiado a decir verdad. Nadie podría decir que aquel muchacho era feo, tenía un rostro anguloso atractivo y hombros anchos que iban con su porte y gran talla. 

—¡Puto barato! —gritó Daniel apareciendo detrás del guapo moreno— No le puedes hablar así a la futura novia de Sam —le llamó la atención.

¿Novia de Sam? Otro escenario que olvidé considerar pero que no se oía nada mal.

Sentí como un repentino calor adoraba mi rostro, sonrosando mis mejillas.

—No sabia que ella era Hope, tu dijiste que habían chicas bonitas y asumí que te buscaba a ti, prostituto, y pensé en ofrecerle algo mejor —se defendió haciendo una mueca de burla a Daniel—. Patrick Najara —extendió su mano hacia mí.

—Hope O'Connor, es un gusto —la estreché.

—Me disculpó, pensar que venís a buscar al gigoló de cuarta me descuadró pero Sam, definitivamente, es mejor que los dos juntos —se encogió de hombros y se perdió tal cual Daniel había aparecido.

—¿Buscas a mi hermano, cuñadita? —cureoseó Daniel, movió las cejas sugerente.

—No soy tu cuñada —aún, añadí en mi mente—, pero si busco a Sam, tenemos algo de que hablar.

—Soy mensajero de malas noticias, Sam acaba de salir con su antigua novia, Vanessa.

¿Es posible que el alma se salga de tu cuerpo, te deje muerta unos segundos y solo vuelva para hacerte vivir una pesadilla? Si es posible, eso fue lo que sentí.

Solo deja que te toque © [EN PROCESO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora