El jefe supremo de la mafia Italiana

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Aiyana.

Después de despedirme de Adriano con un beso en la mejilla me siento rara, ósea no tuve por qué haber hecho eso claramente el no respondió, pero lo que me causa más curiosidad es ¿Por qué quiere hacer las cosas bien conmigo?

Camino entre las personas y tal vez en otro momento le hubiera aceptado que me llevará a mi casa, pero no quería que pase otro altercado y otra vez llevarnos como perros y gatos.

Llego a departamento después de caminar por mil horas, bueno si, si soy una exagerada no demoré mucho en llegar, no me saco ni los zapatos y me tiro sobre la cama, voy a dormir 10 minutos y después me levanto a cambiarme de ropa.

Mis ojos se van abriendo poco a poco, siento que he descansado lo suficiente como para...MIERDA SON LAS 6 DE LA MAÑANA.

Me levanto de un salto y tengo fe de que el reloj de mi mesa de noche este dañado, enciendo mi celular y veo que es correcta la hora de mi reloj de mesa ¿Cómo es que pude dormir tanto?

Lo bueno es que ayer hice los deberes que me toca presentar hoy en la universidad, me ducho y me aseo para alistarme para ir a la universidad. Mi celular suena y veo quien eso, blanqueo lo ojos al ver el nombre que aún no cambio.

-¿Qué quieres?

-Solo...solo quería que nos viéramos y hablar.

-¿Y que me vuelvas a intentar violar? No gracias.

-De verdad solo quiero hablar y arreg..

-¿Que quieres arreglar? ¿Qué me intentaste violar? No para eso no hay arreglo, Adiós.

No dejo que responda y cierro la llamada.

No quiero saber nada de Andréi, el me intento violar y para eso no hay arreglo ninguno, tan solo el tiempo para aunque sea tratar de superar lo que me hizo aunque también le debo la vida a Adriano si no hubiera sido por que el me salvó juraría que estaría al frente de un psicólogo enfrentando un posible abuso.

Llego a la universidad y me encuentro con Merissa, mi mejor amiga.

-Hola amiga ¿Cómo estas? -nos saludamos con un beso en la mejilla, ella fue la primera quien supo lo de Andréi.

-Hola, mucho mejor...aunque hoy en la mañana me llamo a según el querer arreglar las cosas-hablo y veo que la reacción de mi amiga no es muy buena que digamos.

-PERO...QUE HIJO DE PUTA-insulta y al alzar la voz todo mundo nos voltea a mirar incluyendo al de la limpieza-Perdón...que maldito desgraciado ¿Qué le respondiste?-pregunta y seguimos caminando, me ofrece un poco de su Starbucks pero niego.

-Le dije que no hay manera de arreglar algo y le colgué-le digo y ella se emociona porque empieza a dar saltitos.

-Esa es mi amiga carajo-habla y me pasa su brazo por mis hombros.

Seguimos a las clases y como es de rutina de las clases a la cafetería, de la cafetería a la biblioteca y después al trabajo.

-Trata de conseguirme un trabajo-habla Merissa desde el lado del piloto, ella siempre me hace el favor de llevarme al restaurante ya que le queda de camino su casa.

-Veré si habló con el jefe de mi jefe a ver si encuentra algo para ti ¿aunque sea de secretaría? -pregunta sarcástica.

-Bueno si no hay que mas tendré que aceptar-habla y empezamos a reír, ¿Por qué nos causa gracia lo de ser secretaria? Pues porque ella hace unos días tuvo un sueño demasiado húmedo y dijo que ella se follaba muy duro a su jefe.

-Nos vemos mañana en la universidad-nos despedimos y entro al restaurante, no sé porque, pero mis ojos miran hacia todas las mesas de exclusividad y no encuentro esos ojos negros que una noche me salvo de ser violada.