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➡️(NUEVO)ME ACABO DE DAR CUENTA QUE TODO LO QUE ACABÉ ESCRIDIENDO EN ESTE CAPITULO ES DE UNA SOLA NOCHE WTFFFFFF.....JAJAJAJAJAJAJAAJAJAJAJA PENSÉ QUE HABIA PASADO SEMANA Y MEDIO O MAS JAJJAJAJAJAJAJAJJJA. POR CIERTO LA OTRA SEMANA SI SIGO VIVA ACTUALIZO.

Stop: Primero: Holaaaaaa; Segundo: Voten por el capitulo para ver si tiene apoyo esta hisoria de subidones y bajones; Y tercero: A LEERRRRRRRR:) 

Adriano.

Los diablos me llevaban de ver la hora y no saber nada de Aiyana, bueno si sabía, pero obviamente no se lo diría, a pesar de que es muy inteligente como para no darse cuenta había enviado un guardaespaldas con ella.

No quiero exponerla de ninguna manera o que la tomen por sorpresa nuevamente, no volvería a permitir que pase eso, la necesidad de personalmente irla a buscar no cesaba de mi cabeza, pero suficiente tengo con mis enemigos siguiéndome los pasos.

Verla llegar es como si mi alma se hubiera ido con ella porque apenas mis orbes cayeron sobre su pequeño cuerpo, mi cuerpo y corazón si es que lo tengo recobraron vida.

Conversar con ella y hablar de cualquier idiotez es lo único que necesito para olvidarme del mundo de mierda en el que vivimos. Se que tengo un sentimiento por ella, porque lo que desborda por dentro mío es algo que nunca había experimentado, pero me arriesgaría de ser necesario por ella, ¿Qué si tengo miedo? Claro que sí, mi padre siempre me inculco no sentir nada por ninguna mujer a menos de que sea algo placer y orgasmos ¿Qué si me quiero volver a separar de ella? Por supuesto que no, ya eso no entra ni entrará en mis planes.

El día que llegamos a casa y me quede a solas con ella en mi habitación me quebré, lloré, si, yo lloré, y le pedí perdón a mi padre por haberlo hecho, le había prometido que ya no derramaría una lagrima por nadie que no sea por el, pero como evitarlo cuando estuve a nada de perder a Aiyana, mi corazón se estrujo cuando la vi asustada con esa arma entre sus manos intentando defenderse, se veía tan indefensa, tan débil; cuando me propuso lo de enseñarle a defenderse me pareció buena opción, pero enseñarle a usar un arma ese es otro tipo de nivel, sinceramente no quisiera que ella se manche las manos de sangre me da igual si yo me las mancho nuevamente al fin y al cabo llevo una lista larga de muertos...pero ella...ella siendo un ángel, mi ángel, no me gustaría verla con sus manos sean deshonradas de tal asquerosa manera, pero sé que cuando ella se propone algo no hay quien le quite esa idea de la cabeza, así que no me quedará más remedio que ayudarla o más bien enseñarle, pero lo haré personalmente no me gustaría ni que ningún hombre la estoy mirando demás.

No voy a negar que estoy exhausto no ha sido un buen día he tenido que lidiar con algunas pataletas de mafiosos, pero nada que el jefe supremo no puede arreglar, pero como decía mi padre, "hijo, si la vida te da limones, has limonada" así sea pasar unos minutos más con ella acompañándole a estudiar me bastaría para seguirla admirando.

Sus labios, son cálidos, suaves, sus besos son tiernos, son mágicos...¡VERGA! quién diría que yo estaría pensando tanta cursilería, pero con esta pequeña es demasiado difícil no pensar en tanta estupidez, aunque a decir verdad no me arrepiento, sé que solamente ella puede ver lo que causa en mí a través de mis ojos.

Entramos a su recamara y ella pone todos sus apuntes y libros encima del escritorio.

-Bueno... tengo que estudiar la mayoría de derechos civiles-se voltea a mirarme- pero de verdad si estás cansado no hay ningún problema puedo hacerlo sola, de igual tengo todo el fin de semana para estudiar-la quedó mirando y sale una sonrisa genuina de mis labios, de verdad que esta chica es demasiado hermosa para este puerco mundo.

- No te preocupes tengo todo el fin de semana para descansar-se la devuelvo, ella se ríe, pero no se niega más. Está claro que no puede vivir sin mi presencia, nótese el sarcasmo.

El jefe supremo de la mafia ItalianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora