19. Desmadre total.

1.1K 95 6
                                    

HOLAAAAA SI ACEPTO QUE HE ESTADO MUY DESAPARECIDA Y ABAJO LES EXOLICARÉ EL PORQUE.

Mientras tanto disfruten este capitulo.

Adriano.

Luego de haber aterrizado en mi ciudad, llego a mi casa directamente a ducharme y tomar una siesta por el cansancio que tengo.

-Pensé que vendrías en unos días-la voz de Roth hace que gruña del coraje. Tomo una almohada y la lanzo en la dirección donde escuché la voz-pero no entiendo la agresividad...-siento la cama hundirse y maldigo con la cara enterrada en la almohada.

-Déjame dormir por favor-pido y en vez de aceptar decide ponerse de lado para después acomodarse-¿Qué haces?-pregunto y lo imito.

-Acomodándome para que me cuentes absolutamente TODO...y por tu esposa no te preocupes la mandamos a volar-mis ojos se abren tanto como pueden-es broma, quiso irse a España a pasar unos días con su hermana ya que tu estabas fuera ella aprovecho-asiento a lo que dice-muy bien, ahora cuéntame todo sobre los pequeños terremotos-sonrío por lo que dice.

-Son una maravilla mis dos hijos...-siento que se me hincha el corazón al decirlo con orgullo-uno de ellos me reconoció y lo que te diré sonará muy loco, pero ya conocía a uno de mis hijos y cuando lo vi aquella primera vez sentí esa conexión mas no le presté atención-mi hermano abre la boca impactado.

-¿Y cual de los dos ya conocías?-pregunta intrigado.

-Adrián-el me mira sin saber que decir-si, Aiyana le puso el nombre de mi padre a uno de mis hijos y Emmanuel es una cosa increíble...aún no puedo llegar asimilar que esas dos personitas inocentes son producto de nuestro amor que en algún momento tuvimos-sonrío al recordarlos-pero bueno...-escucho como alguien golpea la puerta de manera brusca.

-¿Qué sucede?-pregunta apenas entra uno de nuestros hombres de seguridad.

-Acaban de informarnos el primer anillo de seguridad que unas camionetas negras se están acercando a la casa-informa y nos ponemos de pie de inmediato.

-¿Cuántas camionetas son?-tomo mi arma y la reviso si está cargada.

-Son 4 camionetas-informa y asiento.

-Que los demás anillos de seguridad estén atentos a cualquier enfrentamiento-mi celular suena y veo que es un número desconocido, la acepto.

-Querido te informo que estoy llegando a tu casa de seguridad y...-lo corto.

-¿Dónde conseguiste la información?-pregunto con mi cabreo a mil.

-Tranquilo que yo se todo Adriano...tengo ojos por todos lados-informa y mi mandíbula se tensa-vengo para hablar de negocios así que anda diciéndole a tu seguridad que deje de apuntarme-cuelga, otro hombre entra y trae un portátil donde se ven todas las cámaras de seguridad.

Veo a Kaín bajarse de uno de sus carros y mirar directamente hacia la cámara, alza las manos pero una de ellas se mueve a modo de saludo.

Tomo el radio de la cintura de mi guardián.

-Lo requisan y que entre solo con su mano derecha mas nada...Más nada repito-recibo la respuesta.

-No se que hace ese hijo de puta aquí pero Bratt nos tiene que dar una maldita explicación de porque no nos avisó de esta mierda, vamos-le indico tanto a mi hermano como a los demás y llegamos hasta el ala de la sala.

Veo a Kaín analizar cada esquina de mi mansión, apenas me ve una sonrisa aparece en su rostro y se acerca poco a poco a mi dirección.

-Tiempo sin verte Ferrara-me ofrece su mano y antes de tomarla analizo su rostro por completo.

El jefe supremo de la mafia ItalianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora