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Lucas estaba de pie, no sabia donde o cuando estaba, no tenía heridas visibles ni dolor en ninguna parte, todo estaba oscuro, como su departamento viejo cuando la luz se cortaba, últimamente le pasaba mucho eso.

-¿Dónde-...?-Se preguntó Lucas algo preocupado, sus orejas se movieron por unos sonidos.

Al fondo había una luz, y en esa luz escuchaba un tarareo tierno y melódico, reconocia esa voz, cuando llegó, vió a su madre sentada en una banca. Todo el escenario cambio, ahora estaba junto a su difunta mamá, hembra preciosa y pequeña, de orejas pequeñas y cabello negro hasta la espalda, en sus manos escribía en un pequeño cuaderno con su mano zurda.

-Capítulo treinta, Daniela entró en la habitación de Romeo y encontró el medallon del Rey Midas, ¡él lo tenia en sus manos!..-Susurró con emoción tierna mientras escribía.

-¿Mamá?..-Preguntó Lucas sentándose a su lado.

-¿Hijo?..-Preguntó ella divertida. Lucas rió muy escasamente.

-¿Que haces aqui?..-Preguntó.

-Lo mismo me pregunto, no se supone que deba estar aqui..-Dijo ella aún escribiendo.-Aún trabajo en mi libro..-

-Nunca lo terminaste..-Susurró Lucas con tristeza.

-¿De que hablas mi amor?..-Preguntó ella mirándole por fin.

Lucas se quedó mirando atónito, los hermosos ojos de su madre, idénticos a los suyos, le miraban una vez más, llenos de vida y felicidad.-Ya llevo tres volúmenes..-Continuó divertida, siguió escribiendo.

-M-Mamá..-Carraspeó Lucas.-¿Estoy muerto?..-Una vez más, Bonibelle Carlona miró alrededor.

Era un parque, precisamente el parque que estaba cerca de las madrigueras, era un lugar bonito y verde, con una banca escondida entre la fuente y la zona de juegos. Ahi estaban ellos.

-No creo..-Dijo ella.-O talvez si, ¿Te sientes muerto?..-Preguntó ella con una risilla. Lucas suspiró, pero entre ese letargo encontró cierta felicidad, extrañaba la personalidad de su querida madre.-Lucas, ¿Morí por el cáncer?..-Preguntó ella algo seria.

El conejo se sorprendió, dió un trago amargo y asintió temeroso del recuerdo, pero se mantuvo firme y logró mirarla. Ella soltó un pequeño "Ya veo...".

-Pero... ¿No te alegra verme feliz?..-

-Por supuesto mamá..-Dijo Lucas erguido.-Me encanta verte aqui, tan tranquila, escribiendo tu novela y haciendo chistes..-Dijo él mirandole fijamente.-Estoy tan feliz de volverte a ver..-

Lucas avanzó un poco para recostarse en el hombro de su mamá, ella correspondió con calidez abrazándolo.

-Has hecho cosas impresionantes mi amor, has ayudado muchas personas y hecho muchos amigos, estoy tan orgullosa de ti..-Lucas no pudo evitar sollozar y ocultar sus lágrimas.-Pero no te corresponde aún estar aqui..-Lucas levantó la cabeza suavemente, había lagrimas en sus bonitos ojos y respiró algunos mocos de su nariz.

-S-Supongo que no..-Inquirió él tranquilizandose.-M-Mamá, ¿Esto es real?..-

-¿A quien le importa bolita?..-Preguntó ella con una risilla.-¿Será una alucinación creada por químicos externos e internos de tu cuerpo en coma?..-preguntó intrigada.-¿O será que una fuerza mayor que nadie puede comprender te permite hablar con mi espíritu?..-Se preguntó curiosa.-Que intrigante, ¿No amor?, debería escribir eso..-Observó emocionada mientras escribía en la parte de atrás de su libreta.-Fuerza... Mayor... Incomprensible... No, mejor... Misteriosa-Dijo escribiendo. Lucas se levantó de la banca, sentía que era el momento de irse.

Lucas Capítulo 1 (Furry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora