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La penetró, la sujetó de los tobillos y le  levantó las piernas hacia atrás, en posición de anvil empezó a moverse hacia abajo, de arriba a abajo aplastando las nalgas y pelvis de la grifo.

La hembra dio jadeós agitadamente, soltando gemidos entre ellos que mostraban cuan plancentero era para ella, la diferencia de tamaño era un chiste para aquellos dos, pues habia infinidad de posiciones normales que compensaban estos defectos en las parejas con diferencias de tamaño.

Lucas movió sus caderas y gimió como el podía, miró las vistas, la ventana daba una hermosa vista a la ciudad de Manchester, siguió embestiendo, no podía sentirse más bendecido por aquellas vistas y lo que sucedía bajo sus caderas.

-¿Que te interesa más?, ¿Las vistas o yo?..-Preguntó una agitada Jackeline. Lucas río y bajó sus piernas para ponerse entre ellas y besar a la grifo.

-Ambas son hermosas..-Respondió en el beso.

Acomodó la pierna de la grifo a un lado, como si acostará de costado, se metió entre ellas y la penetró, tenía una vista de su cuerpo de lado, asi como sus hermosas alas pegadas y su carnoso trasero rozando su rodilla. En esa posición la embistió, ella gimió ante sus movimientos, la cama se movió suavemente ante la rapidez del conejo, su pene se deslizó entre la carne apretada de su amante, se acercó a chupar su pecho expuesto y a tomarla de la cintura, se sentía tan caliente y deliciosa, como si su virilidad se deslizará en mantequilla, el olor del sexo inundó todo la habitación, pego su pecho al torso de la grifo y siguió embistiendo salvajemente haciendo temblar su cuerpo.

La movió otra vez hasta ponerla boca abajo, metió su pene entre sus gluteos y volvió a penetrar su vagina, deslizó una vez más su pene hacia adentro y afuera de ella, haciendo que el cuerpo de la grifo brincara y sus alas simularan una atrofiado movimiento de aleteo mientras rebotaban.

Si él pudiera verse a si mismo sería casi ridiculo, sus patas apoyando sus piernas, su cadera moviéndose de arriba abajo para penetrar el sexo de su amante, su lindo rabo deslumbrante como siempre, todo mientras golpeaba las nalgas de la grifo haciendola gritar de placer.

La acomodó jalando sus caderas hacia el, ella gustosa pegó sus nalgas a el, en esa posición siguió sus movimientos lentos y profundos, Lucas jadeó y una vez más admiró las vistas, tanto de su hembra como de la ciudad, con unas últimas estocadas dejó en paz a la grifo y se acomodó a un lado de ella.

-¿Pasa algo mi rabito?..-Preguntó ella de manera cariñosa, se subió encima del conejo y unió su pico con su hocico. El correspondió el beso y la tomó de la cintura.

-Solo me cansé un poco..-Ella soltó un "entiendo" apacible, le besó la pequeña y rosada nariz y acomodó el pene del conejo debajo de ella.

Acomodó sus garras/manos en el respaldo de la cama y rasguñó la madera de este, movió sus caderas de atrás a adelante, Lucas tomó sus caderas y cerró sus ojos, sus pechos comenzaron a danzar de arriba a abajo casi sincronizados, el conejo pegó sus muslos en las nalgas de la grifo mientras esta continuaba moviéndose.

De atrás a adelante, rebote tras rebote de su cuerpo deslizaba el miembro de Lucas en ella, su vagina apreto su miembro y lo bañó en miel de hembra.

Lucas apoyó su espalda en el respaldo, miró a Jackeline excitado, su pequeña y rosada lengua amenazaba con salir por entre sus labios entreabiertos, la grifo miraba hacia arriba con los parpados apretados y la boca jadeante, el conejo la tomó de los senos, los aprisionó en sus manos mientras ella saltaba en su miembro.

Unos minutos y nuevamente cambiaron de posición, Jackeline debajo de Lucas, el conejo entre sus piernas en un misionero normal, con la sabana cubriendo las nalgas de Lucas que eran tomadas por la grifo quien le guiaba a su interior y de pasó acariciaba su lindo rabo, Lucas aferraba sus finas manos al respaldo de la cama y cerraba sus ojos mientras sus piernas y cadera impulsaban su carne dentro de la grifo.

Lucas Capítulo 1 (Furry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora