The Way I Loved You - Gavi

Capítulo 17

Cuando el partido acabó, bajamos al túnel para saludarlos. Pedri se acercó serio, pero al llegar a mi me dio un abrazo levantando mis pies del suelo.

- ¿Donde has estado cuando he marcado? Te he dedicado el gol
- En el baño -mentí- lo siento muchísimo de verdad
- No te preocupes, estoy muy contento igualmente por haber ganado. La próxima vez ya lo verás -sonrió

Me dio un beso largo y cuando todos entraron a cambiarse, Sira se puso a mi lado de brazos cruzados sin decir nada. Me sentía muy mala persona ahora mismo.

Los chicos salieron, y Sira no dejó que me fuese con Pedri. Se inventó una excusa para llevarme ella a casa, era obvio que quería hablar conmigo.

Una vez en el coche, ninguna decía nada. Era la primera vez que tenía un silencio incómodo con ella y las ganas de llorar todavía no se habían ido. Sabía que cuando dijese la primera palabra, las lágrimas empezarían a caer.

- ¿Por qué? -preguntó
- Sira, te juro que no ha pasado nada
- ¿Y habría pasado si no hubiese entrado?

Me quedé callada. Realmente no estaba segura de qué habría pasado si nunca nos hubiese interrumpido.

- Ya -dijo- ¿desde cuando?
- ¿Desde cuando que?
- ¿Desde cuando te gusta Gavi?
- ¿Que? No me gusta
- ¿Me vas a decir eso después de pillaros casi besándoos?
- Quiero estar con Pedri, de verdad. Me da estabilidad y estoy tranquila con él
- De nada vale eso si no lo quieres
- Sí lo quiero
- ¿Y por eso estabas ahí con Gavi?

Cerré los ojos suspirando y apoyé la cabeza hacia atrás.

- No sé Sira. Si te soy sincera, estoy tan hecha lío. Lo único que tengo claro es que no quiero perder a Pedri de mi vida.
- Si no eres sincera con él, es lo que acabará pasando

Giré la cabeza y la miré.

- Cuando estoy con Pedri estoy perfecta, pero de repente llega Gavi y le da la vuelta a todo, mi cerebro y mi cuerpo dejan de funcionar y se me olvida todo lo que no tenga que ver con él. Odio que me haga sentir así

Sira respiró hondo y la tensión de sus hombros se disipó un poco. Aparcó el coche delante de mi casa y después de poner el freno de mano se giró en su asiento mirándome.

- Mira, eres mi amiga y créeme que te quiero muchísimo, pero ellos también lo son. Tienes que aclararte, no puedes estar con Pedri si piensas en Gavi, porque cuanto más lo alargues más daño os vais a hacer tanto a ti como a él. Yo no sé que es lo que pasa entre Gavi y tú, pero si sé que Pedri siente cosas por ti

Que Sira me hubiese dicho eso me provocó un escalofrío en el cuerpo. Me quedé en silencio unos segundos y después hablé.

- Voy a alejarme de Gavi, no puedo perder a alguien que me cuida y me trata tan bien por una persona que nunca sabe lo que quiere y que lo único que hace es sacarme de quicio, no puedo más con esto
- Es tu decisión, pero piensa en las consecuencias de lo que vayas a hacer
- Voy a centrarme en todo lo bueno que tengo, que es Pedri, y a Gavi lo apartaré como sea

Asintió sin decir nada más. Sira me dio un corto abrazo y salí del coche casi corriendo.

Cuando entré en casa ni siquiera saludé a mi padre, me encerré en la habitación y me tiré en la cama escondiendo mi cara en la almohada.

Esa noche no respondí el mensaje de buenas noches de Pedri.

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Una semana después, el viernes me encontraba tirada en cama con la mirada perdida, mirando a un punto cualquiera de la habitación. No había salido mucho durante la semana, me dedicaba a comerme la cabeza con todo lo que pasaba.