The Way I Loved You - Gavi

Extra 1: Halloween

31 de octubre de 2037
-NARRA LARA-
Noah no paraba de correr por toda la casa, persiguiendo a las perras y sacándome de quicio. No quería ponerse su dichoso disfraz de vampiro después de haber estado toda la semana deseando ponérselo. Así era, igualito a su papi con solo tres años.

Me acerqué al marco de la puerta de mi baño, apoyándome y viendo como mi marido se pintaba las marcas de sangre por la boca. Los tres íbamos a ir a pedir chuches por las casas en compañía de nuestros amigos y los padres de Pablo, que habían venido a pasar el puente a Barcelona para estar con su nieto. Después, Pablo y yo nos iríamos a una fiesta en casa de Balde y Noah se quedaría con sus abuelos. Los tres íbamos de vampiros por ocurrencia de Gavi.

- Amor de mi vida, ¿puedes perseguir a tu hijo y traérmelo para que le ponga el disfraz? -le pregunté a Pablo

Giró la cabeza mirándome y sus labios se curvaron en una sonrisa ladeada.

- Joder -dijo- que sexy estás
- Céntrate, tú hijo, disfraz -reí levantando el mini conjunto de Noah
- Voy

Dejó la pintura sobre el lavabo, saliendo del baño pero no sin antes darme un manotazo en el culo. Lo escuché llamar por su hijo, el cual seguía a su bola. Yo me quedé en la puerta escuchando como hablaban.

- Cariño, hay que ponerse el disfraz
- No
- ¿No quieres ir así de guapo como papá?
- Estás feo

Apreté mis labios escociendo una risa y seguí espiando su adorable conversación.

- ¿Y has visto a mamá? Está guapísima
- No
- Vete a verla
- No quiero
- Bueno... si no quieres ponerte el disfraz, entonces tendremos que irnos sin ti a recoger chuches
- ¡No!
- Pues corre a ponértelo o te quedarás aquí y nosotros iremos con los abuelos a comernos todas las gominolas del mundo

Escuché los pies de mi hijo venir corriendo hacia mi, y sonreí al tenerlo delante por fin preparado para ponerle su disfraz.

- Yo voy a seguir con mi tarea -sonrió Gavi
- Graciasss -susurré

Subí a Noah sobre la cama y le puse el disfraz. Estaba realmente adorable, para comérselo. Llevaba unos pantalones negros, una camisa blanca y una capa negra y roja. Además, Gavi le pintó sangre con mi labial.

- Ven a verte campeón -dijo Pablo

Cogió a nuestro hijo en brazos y fue hasta el baño.

- ¡Somos iguales! -dijo Noah
- Los dos hombres más guapos del mundo

Sonreí mirándolos desde la habitación y finalmente terminé de vestirme mientras Gavi se encargaba de vigilar a Noah. Bajé a la sala donde Gavi había dejado a Noah mirando los dibujos mientras él le hacía la merienda.

- ¿Ya tienes todo? -pregunté
- Sí, todo para que no se muera de hambre

Rodé los ojos sonriendo y me acerqué a uno de los armarios para coger un vaso. Sentí el cuerpo de mi marido por detrás, su mano acariciando mi trasero.

- Pienso chuparte toda la sangre esta noche -susurró

Un calor subió por mi estómago y tragué toda la saliva que tenía en la boca. Le di una patada delicada con el pie y salió de la cocina riéndose.

- Idiota -susurré con una sonrisa

El timbre de casa sonó, y escuché como Noah salía corriendo hacia la puerta sabiendo que sus abuelos estaban detrás. Gavi abrió y yo me acerqué para saludarlos.

- ¡Lari! -sonrió Belén, que ya tenía a su nieto en brazos- ¿Cómo estás?
- Muy bien -sonreí dándole un beso- pero baja a ese bicho, ya pesa bastante y te va a fastidiar la espalda
- Tranquila, no me molesta
- Que cabezona eres Belén -sonrió Pablo, el padre
- Ahora que estamos todos -dijo mi marido- ¿nos vamos?
- Siii -sonrió Noah- chuches chuches