1- Cuatro años después

11.2K 641 329
                                    

4 años más tarde, 10 de junio de 2027
-NARRA LARA-
Por fin me iba a graduar. Cuatro años después de haberme mudado a Francia, iba a conseguirlo. En teoría tendrían que haber sido tres, pero todo se torció el día que me fui, el que día que dejé todo atrás.

Ese primer año fue un caos. ¿Quién fue el que dijo que cuando te rompen el corazón va a mejor? Porque es la mayor mentira del mundo. Nada va a mejor, todo va a peor. Duele y duele cada día más. Y no deja de doler nunca, solo aprendes a vivir con ello, lo apartas y sigues con tu vida aunque ese hueco siga ahí. Lo escondes hasta que lo olvidas.

Para hacer un resumen, volví a Francia. Los primeros días, semanas y meses fue un ciclo vicioso de llorar, salir de fiesta, acostarme con tíos que no volvía a ver en mi vida, y no ir a clase. Buscaba la aceptación, el cariño y la autoestima en cuerpos ajenos, en hombres que me decían lo bonita que era solo para llevarme a la cama y después irse. Pero servía, servía durante unos minutos, y después volvía al mismo pozo. Gavi destrozó mi confianza, lo destrozó todo, y que cualquiera me dijese lo guapa que era me servía para estar con él y sentirme mejor por unos minutos.

Así que como es obvio, suspendí casi todas. A mi padre casi le da un paro cardíaco, pero como siempre no dijo nada, no se enfadó. Aceptó por lo que estaba pasando y me dejó intentarlo de nuevo.

Estuve hundida, literalmente. No comía, no dormía, tenía unas ojeras de monstruo y dejé todo de lado, todo lo que quería lo abandoné, tal y como había hecho Pablo conmigo. Le hice daño a todas las personas de mi alrededor, las arrastré a mi dolor.

Dejé de hablar con Pedri, con Alba, con los chicos. Eliminé cualquier rastro de Gavi de mi vida, hice como si nunca hubiese existido. Y Pedri vino, vino a Francia a buscarme y a hablar conmigo, pero no le dejé entrar. No abrí la puerta y no salí hasta que supe que había vuelto a España. ¿Fui mala? Probablemente. Pero solo hablar con ellos, seguir siendo su amiga como si nada, era algo que no podía soportar, no después de eso. Quería olvidarme de Pablo lo antes posible, y seguir siendo amiga de sus amigos, con quienes pasaba todo el día, eso no ayudaba. Lo hacía peor. Así que hice como si nunca los hubiese conocido, borré las fotos, los bloqueé de todas las redes sociales, eliminé sus contactos y los eliminé de mi vida.

Sira se enfadó, me gritó y también vino a hablar conmigo. Pero cuando volví a llorar en sus brazos, después de noches y noches abrazada a ella para que no me dejase sola, entonces ahí entendió que yo tenía que superar esto como pudiese, y si esa era la forma, ella no tenía nada que decir. Ya ni siquiera hablábamos de Ferran, cualquier cosa relacionada con Pablo me rasgaba el pecho, así que dejé todo eso olvidado en el fondo de mi mente. Enterré sus recuerdos, la vida que compartimos, enterré todo.

Menos una cosa, una cosa que no podía enterrar por más que quisiera. El tatuaje.

Pensé en borrármelo, en gastarme todo el dinero que tenía solo para quitarme eso de la piel, pero no pude. No sé por qué, realmente no tengo ni idea de porqué no lo hice, pero lo dejé y no volví a mirar el lugar donde estaban las letras. No volví a bajar mis ojos a esa zona que estaba marcada, que dejaba la prueba de que mi vida con Pablo había sido real, que lo había amado y que me había destrozado. Solo lo dejé ahí.

La última interacción que tuve con Gavi fue unos meses después de enterarme de que me había engañado, en mi cumpleaños. Estaba pasando las fiestas en Galicia, y me llegó una carta. Sabía que era suya, lo sabía porque aunque no llevaba remitente, en su interior estaban las entradas para ir a ver a Taylor. También había un pequeño papel donde ponía: Last Kiss. Sabía qué canción era, claro que lo sabía porque me sabía todas las de Taylor. La escuché durante horas, llorando completamente sola. Pero lo peor, lo que más me impresionó, es que una de las canciones sorpresa en el concierto fue esa. En cuanto empezó a sonar, lloré como nunca. Martín me acompañó, y me abrazó durante toda la canción.

The Way I Loved You - GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora