The Way I Loved You - Gavi

Capitulo 63

El día 12 volvimos a Barcelona de tarde. A la abuela le había costado mucho despedirse de nosotros, y vi sus ganas de llorar cuando nos abrazó, pero no lo hizo por miedo a que Lucas y yo volviésemos a desencadenar la tristeza.

Cuando llegamos a casa, papá nos mandó sentarnos en el sofá para hablar con nosotros. Solía dejarnos nuestro tiempo cuando nos pasaba algo malo, pero siempre terminaba por hablar sobre lo que nos preocupaba, y esta vez no iba a ser menos.

- Sé lo difícil que es todo, lo dolidos que estáis, pero estoy aquí, siempre estaré aquí para vosotros. Si queréis llorar, gritar, lo que sea. Soy vuestro padre, sois lo que más quiero en mi vida y me destroza veros así, haré todo lo que pueda porque os recuperéis de esto -dijo

Lucas lo abrazó sin decir nada. Hice lo mismo, abrazándonos los tres y dejando caer unas lágrimas por mis mejillas.

- Os quiero mucho

Después de eso, nos dejó tiempo a solas. Yo me fui a mi habitación, y por primera vez tomé la iniciativa de llamar a alguien que no fuese Gavi.

- Mi niña -dijo Sira al descolgar- ¿cómo estás?
- Ya he vuelto
- ¿En serio? ¿Puedo acercarme a tu casa?
- Porfa
- Enseguida voy

Colgamos la llamada y me quedé en la cama acostada, esperando que mi timbre sonase para ver a mi amiga. Me sentía un poco mal porque no le hice mucho caso desde lo de mi madre, ni contestando a sus mensajes, pero sabía que Gavi la mantenía al tanto de todo y eso me tranquilizaba.

El timbre sonó minutos después y me levanté para ir a abrir. Sira me sonrió cuando me vio, y lo primero que hizo fue abrazarme con fuerza.

- Lo siento muchísimo -dijo

Seguía sin saber que responder a eso, solo correspondía el abrazo en silencio.

- Vamos a mi habitación

Sira asintió y cerró la puerta para después acompañarme a mi cuarto. Las dos nos sentamos en la cama en forma de indio, mirándonos sin decir nada.

- Puedes hablar -sonreí- no voy a llorar a la mínima
- Lari, no voy a decirte nada, solo que te quiero y que eres la persona más fuerte que conozco -agarró mi mano con una sonrisa- solo escucharé lo que quieras decirme, si quieres decir algo, y si no me quedaré aquí a tu lado

Le dediqué una pequeña sonrisa y miré nuestras manos unidas. Sira era la mejor amiga que podía tener alguien, todo el mundo necesita a alguien como ella.

- Duele mucho -admití- y lo peor es el sentimiento de culpa de que lo hizo por mi, por lo que le dije
- Cariño, no es tu culpa
- Ya Sira, es lo que Gavi dice, pero no puedo evitar pensar que lo hizo justo después de decirle yo eso, que no me importaba lo que le pasase. Joder, como se me ocurre
- Estabas dolida, te hizo muchas cosas y es completamente comprensible que hubieses reaccionado así. No puedes volver atrás, no puedes deshacer lo hecho, pero si puedes pasar página. Que hubiese acabado así, no quita lo que te hizo, y entiendo que era tu madre, pero fue su culpa todo el dolor que pasaste. Tú no puedes atribuirte la responsabilidad de su decisión.
- Solo quiero que pase el tiempo y todo cure
- Lo harás, y estaré a tu lado, siempre
- Te quiero mucho Sira
- Y yo corazón

Le di un fuerte abrazo, y después de eso se quedó a mi lado toda la tarde, hablando y viendo su serie favorita: Gossip Girl. Escuchar los problemas de ricos de esa serie y como mi amiga hablaba sin parar, acabó animándome más de lo que pensaba.

Cuando dieron las 9, el timbre volvió a sonar y escuché como papá se levantaba a abrir, así que no me molesté en moverme. Me había enganchado a la serie de pijos esa.