Capitulo 66

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-NARRA LARA-
Dos días después, Sira y Alba me mandaron un mensaje para ir con ellas a la playa. Los chicos habían quedado en tener un día sin chicas, así que no teníamos más remedio que copiarles el plan y tener un día para nosotras.

Me recogieron a las 5 delante de mi casa y bajé con mis cosas. Me subí en el asiento trasero saludándolas con una sonrisa y Alba se giró en su asiento mirándome.

- ¿Qué tal estás guapísima? -preguntó
- Bien -sonreí- ¿y vosotras?
- Genial -dijeron a la vez

Llegamos al aparcamiento de la playa y Sira dejó el coche en el primer lugar que encontró a la sombra. Bajamos con nuestras cosas, y arrugué las cejas al darme cuenta de que mi silla estaba en el maletero de Gavi.

- ¿Qué pasa? -preguntó Sira
- Mi silla está en el coche de Gavi
- Pues te toca mancharte con la arenita -dijo Alba

Hice pucheros y las tres fuimos hacia la arena, donde dejamos nuestras toallas estiradas y nos quitamos la ropa.

- ¿Al agua? -preguntó Sira
- Desde luego -dije- pero antes echadme crema por detrás, que si me vuelvo a quemar me da algo

Las dos rieron y Sira me echó crema por la espalda. Yo me eché por la parte delantera y corrimos al agua en cuanto estuvimos listas.

- Que buena que está el agua -dijo Alba
- ¿Qué harán los chicos? -preguntó Sira
- No lo sé, pero no lo pienses -dije- que les den, es día de chicas
- ¡Eso! -sonrió Alba- y después vamos a cenar al sitio este de hamburguesas guarras que hay que comer con guantes
- Apoyo eso -dije

Estuvimos un buen rato en el agua, hablando y haciéndonos bromas, hasta que decidimos salir y volver a las toallas. Una hora después, mientras tomábamos el sol, Alba se moría de sed, como siempre, y Sira le echó la bronca por no haberle hecho caso y traer agua en una nevera.

- Es que de verdad -dijo Sira mientras caminábamos hacia el quiosco- mira que te lo avisé, siempre igual
- Si hay quiosco, que más da -rió Alba
- Pero lo bien que estaba tomando el sol

Alba le sacó la lengua y nos pusimos a la cola las tres, era increíble la cantidad de gente que tenía este mini bar, aunque estando a pie de playa era completamente comprensible, y sus granizados sabían a gloria.

- Hombre, mira tú por donde

Mis amigas y yo nos giramos, viendo a los chicos que habíamos conocido hace unos días y con los que habíamos jugado al vóley.

- Que gusto volver a veros -dijo Axel
- Hola -dijo Alba- igualmente
- ¿Qué tal estáis? -pregunté
- Muy bien -dijo Damián- ¿vosotras?

Sentí un pinchazo en el brazo, y me giré a ver a Sira que nos miraba con curiosidad al no saber quienes eran esos chicos.

- Esta es Sira, una amiga -la presenté- Sira, ellos son Axel, Leo, Damián, Darío y Brais -dije señalándolos uno a uno
- Encantados Sira -dijo Brais
- ¿No tendréis otras dos amigas, no? -rió Leo
- No, pero lo que sí tenemos son novios -sonrió Sira

Los chicos se quedaron cortados, y tosí para cortar el ambiente.

- ¿Y han venido? -preguntó Axel
- Nop -contestó Alba
- Entonces, ya que somos pares, ¿os apetece jugar de nuevo? -preguntó Darío- íbamos ahora a la red

Miré a mis amigas esperando una respuesta por su parte, o íbamos las tres o ninguna. Ambas asintieron, así que los acompañamos hasta la red del día anterior e hicimos los equipos.

Alba y Sira iban con Leo y Darío, y yo con el resto de los chicos.

- ¿Preparados para perder? -rió Alba
- Ya quisierais -dijo Axel

The Way I Loved You - GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora