One shots | Charles Leclerc

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Un precioso bebé de un año y cinco meses balbuceaba en su andadera mientras caminaba de un lado a otro en medio de la sala, mientras que Olivia su madre preparaba el almuerzo para su futuro esposo que llegaría en unos minutos.

El pequeño Jules se acercó a su madre y le jalaba el mandil, Olivia dejó el cuchillo en la tabla y se incó para ver a su pequeño.

—¿Qué pasó mi amor? —le acarició el cabello —Qué precioso eres mi vida.

Jules aplaudía y le enseñaba su cochesito de gomita que había tirado al piso, Olivia lo levantó y se acercó al lavabo para lavarlo y dárselo a su hijo nuevamente.

—Papá — reía Jules —Papá.

—Si mi amor papá ya viene, voy a terminar el almuerzo Jules.

El pequeño como si entendiera dejó a su madre y siguió jugando en su andadera, Olivia todas las mañanas quitaba y levantaba todo lo peligroso con lo que su hijo se pudiera lastimar.

Jules y Olivia era el secreto que Charles Leclerc tenía, todos sabían que el había tenido una relación con la monegasca pero por contratos le impidieron estar con ella pero el piloto nunca la dejó, amaba a su Liv y nadie la apartaria de él.

La monegasca salió embarazada y Charles estaba más que feliz, nadie de sus amigos sabía que tenía un hijo y una futura esposa solo su familia, ya que la señora Leclerc llegaba seguido a casa de su nuera para ver a su nieto.

—¡Jules, ven! — le gritó Olivia —¡Jules!

El pequeño llegó obediente hasta ella y lo sacó de la andadera, lo llevó a la habitación de él pequeño en la primera planta y lo cambió de ropa. Le dió un juguete para entretenerlo para que pudiera peinarlo.
Jules era una copia de Charles era idéntico a él, el niño desde bebé ya era precioso con esos ojos verdes.

Olivia escuchó que abrian la puerta y salió con su hijo encontrándose con Charles, el piloto dejó caer su mochila y se quitó su gorra para correr hasta su pequeña familia.

—Hola campeón — cargó a su hijo y le dió un beso —Ya llegó papá.

El bebé acarició la barba de su papá y le empezó a dar besitos a como su mamá lo enseñó.

—Hola mi amor — le susurró en los labios de su chica —Te extrañé mucho.

Ambos caminaron a la sala y dejaron a Jules en la alfombra con sus juguetes, Charles se sentó en el sillón y en sus piernas sentó a su novia.

—¿Como te fue?, ¿qué tal la carrera

El piloto aún estaba con su uniforme, hizo una mueca y escondió su rostro en el cuello de ella.

—Quedé en quinto lugar, no está tan mal pero se que debí de dar más — murmuró —Me hiciste mucha falta allá, siempre me haces falta.

—No sabes cuanto me gustaría estar con Jules apoyándote en las gradas, pero lo hacemos desde aquí. Quinto lugar no está nada mal mi amor, día con día mejoras más.

Charles asintió y se separó de ella para besarla pero el pequeño empezó a llorar por que su padre estaba besando a su mami.

—Eres un celoso Jules — se rió Charles al separarse de ella —Mamá mía, es mía.

Jules gritó y a como pudo se levantó del suelo y caminó hasta sus padres.

—Mia mamá — extendió sus bracitos.

Olivia lo cargó y lo sentó en sus piernas, Leclerc quiso besar de nuevo a Olivia pero su hijo lo empujaba con su mano, la pareja se rió y el niño abrazó a su madre, hasta en eso se parecía a Charles el piloto nunca dejó que ningún otro hombre se acercara a su Olivia.