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La vida de Olivia nuevamente había cambiado, no podía salir a la calle sin que personas la grabaran o le hicieran preguntas, estaba en todos lados de internet y muchas personas la atacaban diciendo que no era la suficiente bonita para Charles que su ex estaba mejor y otras personas la defendían.

Todo se estaba repitiendo de nuevo, volvía estar en boca de las personas y su privacidad ya no era privacidad, nuevamente era mencionada y no le gustaba para nada, ella ya salía a la calle y nadie la miraba pero había cambiado todo de nuevo.

Se sentía estúpida por no haberse dado cuenta de que en realidad estaba saliendo con Charles Leclerc el piloto de Ferrari de formula 1, su hermana le había mandado las publicaciones que hacían y Olivia no dudó en crear una cuenta de Twitter y buscó el nombre del monegasco y ahí aparecieron las publicaciones, estaba molesta y decepcionado porque él le había mentido.

Estaba sentada en uno de sus sillones tomando una taza de té eso le ayudaba a estar tranquila y se asustó cuando escuchó golpes en su puerta.

—¡Olivia, abre por favor! — golpeaba Charles la puerta —¡Cielo, debemos hablar!

Ella se levantó y caminó sin hacer ruido hasta la puerta pero no quería abrirle.

—¡Se que estás aquí la recepcionista me dijo que no has salido! — insistió de nuevo —¡Déjame explicarte, te prometo que resolveré esto pero primero quiero que me dejes entrar!

No respondió nada y se recargó de espaldas en la puerta, Charles recargó su frente mientras golpeaba la puerta y repetía el nombre de la estadounidense.

—Lo siento Olivia.

Liv suspiró y puso su mano en la manija para abrir, no escuchaba más a Charles y abrió, miró hacia el piso y ahí estaba él sentado recargado de la pared, se levantó rápidamente mirándola nervioso.

—¿Cómo debo llamarte?, ¿Marc?, ¿o mejor dicho Charles?. Cierto ese también es tu nombre por que tienes infinidades, debes irte a casa yo voy a solucionar esto.

—¿Y qué harás?, ¿esconderte?

—Si es necesario si, ¡fui al hospital y habían personas ahí por ti Charles!

—Estoy muy apenado contigo, en serio no quería mentirte pero cuando te hablé por primera vez y no sabias quien era sentí mucha paz Olivia, me sorprendí al saber que no me conocías y créeme que por primera vez tuve una conversación con alguien que no hablara de mi trabajo.

—Pero eso no te da el derecho de mentirme, no eres ni abogado, esas supuestas reuniones eran falsas, por eso actuabas tan raro conmigo al salir en público, la vez que fuimos a la plaza y me jalaste era por que había un paparazzi — Leclerc tragó en seco —¿Tú historia de que perdiste a personas importantes para ti también es mentira?, por que esa vez que te desahogaste conmigo terminamos acostándonos, ¿esa es tu táctica?

—No Liv lo de esa vez era cierto, esa primera vez que me escuchaste y que me desahogué contigo fui sincero.

—Te desahogaste conmigo diciéndome que tu trabajo a veces te cansaba y que las estrategias que usaba tu equipo cada vez fallaban, fui tan estúpida.

Charles negó y sus ojos picaron.

—¿Por qué no me dijiste la verdad?

—Quería hacerlo amor.

—¡No me digas así! — le pidió molesta.

—Liv, déjame entrar alguien puede escucharnos aquí.

La estadounidense lo pensó por varios segundos y terminó accediendo, entraron al departamento y caminaron hasta la sala.

—Quería decírtelo esa vez que te invité al yate, creí que después de la cafetería no volvería a verte pero no fue así. Esa tarde que estuvimos juntos se sintió bien y las ansias de verte aumentaron pero si te decía te ibas a alejar de mi, por todo lo que me habías contado.

One shots | Charles Leclerc Donde viven las historias. Descúbrelo ahora