Who will fall in love? ©

Capítulo 22: Un poco desenfrenada

-Lo siento Javiera, hoy me estoy reservando para alguien más -respondió él y quise sonreír, pero hice como si no hubiera escuchado nada, pero vi la mirada decepcionada de la chica.
-Todos listos? Ya nos vamos? -habló Karen y todos asintieron.

Salimos de la casa y Justin se aseguro de dejarme sentada en el copiloto de su auto, vi como Javiera no nos despegaba la vista y se quedaba cerca del auto de Justin, pero Karen le arruinó todo y la llamó diciéndole que se fuera con ellos, y sé que eso no fue casualidad por parte de Karen. Chaz y Romina también se fueron con ellos y nosotros con Isa y Chris, el camino fue de algo cerca de 25 minutos en donde solo se escuchaba la música como de costumbre, Justin tarareaba las canciones y yo solo reía de eso.
Llegamos a un lugar justo a la orilla del mar, era un recinto totalmente de vidrio y de dos pisos, desde afuera podíamos ver a cientos de jóvenes bailando ahí dentro en ambos pisos y todos muy entusiasmados. Al entrar tuvimos que esquivar a las personas como pudimos, estaba muy lleno y subimos al segundo piso en donde nos ubicamos mejor, era un lugar muy grande, estábamos todos en círculo y Justin sostuvo mi mano y me atrajo hacia él con delicadeza.

-Qué quieres hacer?, quieres un refresco o una cerveza? -negué con la cabeza-, entonces quieres bailar?
-Creo que te aceptaré una cerveza y luego bailar -sonreí y fuimos a la barra.

Pedimos una cerveza para cada uno y la tomamos en solo segundos, sentí un sabor asqueroso en la boca, no acostumbraba a tomar y eso había sabido realmente mal, pero quería divertirme con Justin y no ser la Jess aburrida de siempre, entonces pedí algo más fuerte, un tequila. Sentí mi garganta arder cuando el trago pasaba por ahí, Justin no me dejó pedir nada más y tomándome de la mano me llevó a una esquina del lugar a bailar, todo estaba oscuro y apenas se podían ver los rostros de las personas cuando una luz que parecía robótica alumbraba de repente.
Me dejé llevar por la música y comenzamos a bailar algo alejados al principio, pero en minutos Justin ya me tenía presionada a su cuerpo, sus manos en mi cintura eran comunes. Poniéndome de puntillas llegué con mis manos a rodear su cuello y él se inclinaba para que yo no estuviera tan incómoda, así su boca llegó a mi cuello y comenzó a besarlo delicadamente provocándome cosquilleos y risas, él disfrutaba de verme sonreír y yo disfrutaba de su compañía. Estuvimos varios minutos jugueteando de ese modo, él con mi cuello y mis hombros y yo con su cabello, además de que en un momento puse mi mano por debajo de su camiseta para tocar sus bíceps y él solo rió de eso.

-Dame un beso Jessica -me habló al oído.
-Los besos no se piden, solo se dan -le hablé al oído también y él en segundos ya estaba con sus labios puestos en los míos.

Nos movíamos más lento, pero el beso estaba casi desenfrenado y sus manos recorrían mi espalda más rápidamente, sus labios no me querían dar un respiro y comencé a sentir como el tequila se me subía a la cabeza, pero continué besándolo. Nuestros labios se separaban por solo segundos y volvían a juntar, por dios!, sus besos eran tan maravillosos, sentía como si me besara luego de haberlo deseado toda la vida, luchando porque nuestros labios no se separaran jamás, pero yo me alejé un poco. 

-Justin, estoy un poco mareada, ese tequila no me hizo bien, necesito tomar aire -me sostuve de su brazo.
-Vamos afuera cariño -su voz dulce no parecía salir de la misma boca que me había estado ahogando hace segundos.

Salimos del lugar y estábamos en la arena a orillas del mar, él me sostuvo con ambas manos y comenzamos a caminar, caminamos bastante hasta ya estar muy alejados del club y la noche parecía desierta, nos sentamos en la arena y yo apoyé mi cabeza en las piernas de Justin.

-No te vayas a quedar dormida Jessica, sería capaz de lanzarte al mar para que despertaras -dijo mientras acariciaba mi mejilla.
-Sabes perfectamente que no lo harías -reí y me puse de rodillas mirándolo. 
-Estas segura?
-Si -sonreí y él me devolvió la sonrisa.
-Me gusta que confíes en mí -me dijo mirándome a los ojos.

Me sentía un poco mareada pero me acerqué a Justin y levantando una de las piernas la crucé sobre él y me encontré sentada en sus piernas, con las mías abiertas rodeando su torso y mis brazos rodeando su cuello.

-Qué haces Jessica? -me miró extrañado.
-Bésame Justin, solo bésame -le dije con los ojos entrecerrados.

Y así fue, me beso, me beso y me beso, sus manos estaban alrededor de mi cintura cruzándose en mi espalda y yo seguía en la misma posición. Comencé a bajar lentamente sobre él logrando que estuviera acostado en la arena y yo quedé sobre él apoyada en las rodillas a los costados de sus caderas, pero pronto me acomodé acostándome totalmente a su lado. Los besos iban aumentando y sentí que mi pulso estaba a lo máximo que podía estar, la mano de Justin estaba al costado de mi cadera y bajó por mi muslo, puse mis manos en su nuca y lo atraje bruscamente a besarme más rápido aún, sentí como se contenía un poco de moverse hasta que lo atraje más y él finalmente se movió rápidamente y se quedo sobre mí, tenía sus manos a los costados de mi cabeza apoyados en la arena pero yo crucé mis manos por su cuerpo y lo atraje hacia abajo, noté como él hacia lo posible por no aplastarme pero sentía todo el roce de su cuerpo. Mi boca comenzó a bajar a su cuello y él besaba mis hombros, sentí una cierta adrenalina en el cuerpo que no supe adivinar si era por lo que estaba pasando, por el tequila o por ambas cosas. Casi desesperada le quité su camiseta a la fuerza, su mirada estaba ida y solo podía seguir besándome, abrí las piernas y rodeé su cuerpo con ellas y comencé a sentir su cuerpo más aún sobre el mío, sus manos ahora estaban subiendo desde mis muslos por la parte trasera de ellas y llegaron a mi trasero y apretó con fuerza, en segundos se alejó totalmente de mi, agarró su camiseta y se la puso muy rápidamente. Sentí mis mejillas arder y lo peor era que no podía controlar mi boca, lo que pensaba solo lo decía y supuse que era consecuencia del alcohol.

-Qué pasa Justin? No te gustó como estábamos haciendo esto?
-Si Jessica, pero no me gusto recordar que estas con alcohol en el cuerpo y por eso estás haciendo esto -me miró muy serio.
-No Justin, lo hago porque quiero.
-A si? quieres tener sexo conmigo en medio de la playa?, quieres tener sexo con tu mejor amigo? No lo creo. 
-Y tú acaso no quieres? Eres hombre Justin, no se supone que deberías estarte dejando llevar por los impulsos de tu cuerpo?. Qué quiere tu cuerpo? Te aseguro que quiere estar conmigo -no podía creer cada palabra que decía pero simplemente salía y yo maldecía estar en ese estado.
-No quiero que pienses que me aproveché de ti mientras pude. Y sabes algo?, quizá si quería que esto pasara, pero cuando tú estés sin alcohol te aseguro que te ibas a arrepentir y ahí todo se arruinaría para siempre. 
-Lo siento -dije suspirando y entrecerrando mis ojos.
-No lo sientas Jessica, me gusta esto, es obvio que me hubiera gustado hacerlo contigo, pero no de este modo, no contigo así. Y solo espero que sigas bebiendo para que mañana no recuerdes lo que pasó ni tampoco recuerdes lo que te he dicho –se quedó de pie a mi lado-, es mejor que volvamos a la fiesta, te parece?

Asentí avergonzaba y él me extendió su mano para ayudarme a que me pusiera de pie.

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