Intenté mantenerme seria por lo que dijo pero no pude, una leve sonrisa estuvo en mis labios permanentemente mientras lo miraba atónita, su rostro siempre parecía ser tan perfecto, sus lunares, su piel color canela, sus ojos color miel que siempre estaban fijos en los míos y su lengua jugando dentro de su boca, me eché a reír por eso y él sonrió mostrando sus dientes. Me detuve a mirarlo más aún y cuando su lengua se asomó a humedecer sus labios me acerqué a él con delicadeza a besarlo, él posicionó sus manos en mi cintura mientras me besaba y yo las perdí en su cabello, fue un beso largo y profundo, en el departamento existía un silencio total y solo se escuchaban nuestros besos. Comencé a caer sobre él lentamente, él no oponía resistencia a eso, estaba un poco recostado en el sofá y yo casi sobre él por el costado de su cuerpo, el beso se hacía cada vez más intenso y sentía su corazón en mi pecho, su pulso se aceleraba y pude notar su nerviosismo cuando sus manos comenzaron a recorrer mi espalda, sus besos bajaban desde mi boca hasta mi cuello y hacían un camino hasta mi hombro, yo inclinaba mi cabeza hacia un costado para dejarle un total acceso y él lo disfrutaba, me besaba el cuello y los hombros mientras sus manos me acariciaban. En una maniobra torpe intentó sentarse y yo me senté sobre él rodeándolo con mis piernas, sus besos en mi cuello eran tibios y suaves, poco a poco sentí como su manera de besarme se aceleraba y su manera de tocarme también.
-Jess -me susurró al oído-. Deberíamos bajar ahora? -me habló sin dejar de darme pequeños besos en mi cuello.
-No lo creo -sonreí un poco.
Su boca subió hasta encontrar la mía y me besó con más intensidad, tan bien como pudo me quitó de encima de él para ponerse de pié, estuve de puntillas mientras él se inclinaba hacia abajo para no separar nuestros labios y comenzó a caminar lentamente, sabía a donde quería llegar y se lo permití, a paso lento llegamos al pasillo y lo recorrimos hasta el final en donde estaba la puerta de mi habitación, caí sobre la cama cuando estuvimos ahí y él se puso sobre mí con delicadeza, no dejaba de besarme y sus manos recorrían mi cuerpo con temor. Me recosté más cómoda sobre la cama cuando nuestros labios se separaron unos segundos y Justin me siguió, volvió a besarme rápidamente, le quité la chaqueta de cuero que llevaba puesta y la lancé al suelo, una de sus manos estaba en el costado de mi cabeza para mantenerse en el aire y no aplastarme mientras la otra de sus manos estaba deslizando una de las mangas de mi vestido para dejar mi hombro libre, luego el otro y con incomodidad intentó bajar el cierre trasero del vestido, reí de su intento fallido y me senté en la cama, sentí vergüenza en su mirada cuando nos miramos a los ojos y una leve sonrisa dibujada en sus labios. Me puse de pie y él me siguió, solo nos iluminaba una pequeña lámpara que estaba en una esquina de mi habitación, de pié junto a mi cama puse mis manos en su cuello y él se inclinó, volví a besarlo mientras le quitaba su camiseta y él me ayudaba a eso, mis manos recorrieron sus bíceps y él comenzó a bajar el cierre de mi vestido, con mucho cuidado cuando el cierre estaba abajo me quitó el vestido desde arriba, sus manos temblaban y sentí mi pulso acelerar al máximo, el vestido cayó totalmente y estuve frente a él solo con ropa interior.
-Si quieres detenerme tengo que decirte que éste es el momento -me susurró al oído-, luego no podré detenerme ni aunque me lo supliques -su voz ronca me provocó escalofríos.
-No quiero que te detengas -le respondí en un susurro también.
-Estas segura? No quiero que te arrepientas de nada -me miró a los ojos con sus manos fijas en mi cintura.
-Estoy segura Justin -le dije mirándolo hacia arriba.
Me dio una pequeña mirada de los pies a la cabeza y sentí mis mejillas arder totalmente, con delicadeza me volvió a recostar en la cama, ésta vez bajo las sábanas mientras se quitaba el cinturón de su pantalón, sus manos recorrieron mis muslos y luego subieron por la espalda para llegar a mi sujetador, torpemente comenzó a intentar desatarlo y yo reí de eso. No lo ayudé y solamente comencé a quitarle su pantalón, para cuando se lo quité totalmente él ya había desatado mi sujetador e intentaba quitármelo totalmente y opuse un poco de resistencia.
-Hice algo mal? -me susurró mirándome a los ojos.
-No Justin tú estás perfecto -sonreí un poco-, solo me da un poco de vergüenza -el sonrió escucharme.
-Eres tan hermosa Jessica -me miró fijamente -, sabes que te respeto totalmente, si no quieres seguir no lo haré -me dijo con una sonrisa.
-Si quiero seguir, solo me avergüenza estar totalmente desnuda frente a ti.
-Confía en mí y relájate -susurró a mi oído-, si no quieres que mire no lo haré -rió un poco.
No dije nada, respiré profundamente y ahora le ayudé a quitarme el sujetador totalmente, una vez fuera su cuerpo presionó el mío y sentí su piel más caliente que hace unos minutos. Todo se dio poco a poco y eso me hizo sentirme cómoda con Justin, no había prisa y no lo sentía acelerado, era como si quisiera disfrutar cada segundo en que me besaba o recorría mi piel. Él fue delicado conmigo, no dejaba de acariciarme y besarme con cuidado, siempre me pregunté si para los hombres existía una diferencia entre tener sexo y hacer el amor, Justin me demostró que si, no sentí que para él fuera solo sexo, él me hizo el amor con delicadeza y pasión, disfrutaba de cada minuto en que nuestros cuerpos estaban unidos y lo podía sentir en sus besos, en su manera de tocarme y en la manera en que me cuidaba de no lastimarme. Sentí que nada existía, era solo él y yo, entonces me di cuenta de que nada podía ser más perfecto que eso, él es el único que podría hacerme sentir en el cielo mientras me hacía el amor, porque yo sabía que me deseaba y me amaba, sabía que eso no era lo que él buscaba, sabía que él disfrutaba tanto de una cena conmigo como de estar en una cama haciéndome suya.
-Te amo -le dije por fin, lo sentí y lo dije en medio de todo eso. Él se detuvo totalmente y se paralizó mirándome a los ojos.
-Qué dices? -me miró sorprendido sin despegarme de su cuerpo.
-Te amo Justin -le repetí mirándolo a los ojos y sonrió ampliamente.
-Jamás me lo habías dicho.
-Ahora estoy más segura que nunca de eso, te amo Justin -volví a repetirle.
-Yo también te amo princesa, no te imaginas cuanto -me dijo con una sonrisa y volvió a besarme continuando todo.
Finalizó con un poco de sudor en su frente y se recostó a mi lado, su pulso aún estaba al máximo al igual que su corazón y el mío, me acurruqué en su pecho y él me abrazó rodeándome por completo. Una serie de dudas llegaron a mi cabeza, quise preguntarle mil cosas pero me detuve a pensar, estamos juntos y él me ama a mí, qué puede importar que pasó en su pasado? qué puede importar si alguna vez había hecho eso con otra chica si yo sabía que solo a mí me había hecho el amor. Suspiré quitando esos pensamientos de mi cabeza, no quería arruinar el momento.
-Sabes cuánto tiempo espere lo de hoy? -me dijo mientras me abraza-. Y no me refiero a esto, es decir, no puedo negar que esto también lo esperé -rió-, pero me refiero a cuánto tiempo esperé que me dijeras que me amas.
-Tenía que sentirlo totalmente para decírtelo -le respondí sin alejarme de su cuerpo.
-Lo sentiste ahora? -rió un poco.
-Claro que sí -reí también.
-Estas segura que estas enamorada de mí? Cómo lo supiste? -se alejó para mirarme a los ojos.
-Creo que siempre lo supe, solo estaba huyendo de mi misma porque tenía miedo de nuestro destino. Sería una total idiota si no te amara -reí un poco.
-Por qué? -me miró sonriente.
-Justin como te lo explico? Desde que llegué lo único que haces es ser atento conmigo, me mimas en todo momento, te preocupas por mí, te preocupas de sorprenderme, me compones canciones -sonreí animada-, me llamas todo el día, me apoyas en todo, me proteges, me amas Justin, me amas como nunca nadie podrá amarme y lo sé, lo siento, me demuestras tu amor cada vez que me miras, cada vez que me besas, cuando me tocas y me lo demostraste ahora cuando me hiciste el amor. Me haces sentir amada y valorada, eres único Justin Bieber, puedes ser un celoso en exceso pero es porque me amas, y yo te amo tal cual eres, celoso y gruñón, pero el más tierno de todos -. En todo momento mientras hablé Justin me miró sonriente y no despegaba sus ojos de los míos.
-Te amo, te amaré toda la vida, eso lo tengo muy claro y si te vuelvo a perder en algún minuto de mi vida te aseguro que ya nada tendrá sentido -su voz se apagó en esa última frase.----------------------------------------------------------------------------------------
CAPÍTULO TOTALMENTE DEDICADO A MI AMIGA MARIANA QUE ESTABA LOCA POR LEER QUE TUVIERAN SEXO AJSJAJSJAJSJAJ .. NO SÉ SI SUBA MÁS CAPÍTULOS HOY, PERO CREO QUE LAS DEJÉ FELICES A TODAS CON ÉSTO O NO?
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Who will fall in love? ©
Teen FictionDos adolescentes mejores amigos desde la infancia se separan por 4 años en donde ella se va del país. Cuando regresa ambos han cambiado pero siguen su inmensa amistad, la cual es interrumpida por el gran amor que comienza a sentir el chico por ella...