Who will fall in love? ©

Capítulo 86: Dudas resueltas

Eran las 10 de la noche, durante todo el día no había vuelto a hablar con Isa y solo me había dedicado a estar recostada sobre mi cama pensando estupideces, definitivamente el amor te vuelve estúpido y no estaba segura de si quería estar así para siempre.

Narra Justin.

Eran las 10 de la noche y los chicos habían estado toda la tarde conmigo en mi casa desde que salí del hospital, todos menos Jessica que no supe porque no había llegado pero no quise preguntar en ningún momento, aunque noté que mi mamá si le preguntó a Isa, hice el esfuerzo por escuchar pero no lo logré. Estando en mi casa, con mi familia, mis amigos, ver las habitaciones y todo me hizo recordar varias cosas. Mis padres decidieron hacer un asado para celebrar que estaba de vuelta en casa, en eso habíamos estado toda la tarde, durante la noche comenzó a hacer un poco de frio y subí a mi habitación a buscar una chaqueta, Ryan me siguió y noté de inmediato que era porque quería hablar conmigo.

-Qué te sucede hermano? Ni si quiera has preguntado por qué no vino Jessica –dijo al sentarse sobre mi cama mientras yo me ponía una chaqueta.

-Supongo que porque no quiere –respondí sin mirarlo.

-Y ni si quiera te preguntas por qué?

-Quizá su conciencia no la deja estar en paz conmigo –lo miré unos segundos y vi su rostro confundido.

-De qué estás hablando?. Justin sé que algo te pasa y quiero que me lo digas, soy tu hermano, confía en mí.

-Respóndeme algo Ryan –me senté a su lado-. Serias capaz de mentirme solo para que estuviera con ella porque te gusta para mí? –lo miré a los ojos.

-No tengo necesidad de mentirte, con quién quieras estar amorosamente es un problema tuyo, pero si me agrada Jessica para ti porque sé que la amas, te vi sufrir por ella, te vi conquistarla y luego te vi siendo feliz con ella, por eso me agrada, soy tu amigo y quiero lo mejor para ti –me dijo mirándome a los ojos también.

-Estás seguro de que ella es lo mejor para mí? –pregunté.

-Dime lo que estás pensando, te puedo responder lo que quieras y te repito que no tengo necesidad de mentirte –respondió seguro.

-Es cierto que ella me engañó primero y por eso fue que yo la engañé también? –pregunté luego de unos segundos en silencio.

-Claro que no –dijo de inmediato.

-Y tampoco es cierto que ella me iba a dejar por su ex novio?

-No Justin, ese tema tu lo aclaraste con ella –me miró confundido.

-Entonces si existe ese ex novio –suspiré.

-Justin escucha, ella si tiene un ex novio que vive en París, el chico llegó a buscar aquí a Los Ángeles y cuando llegó a su departamento a pedirle una oportunidad ella le dijo que no, le dijo que estaba feliz contigo, Isa escuchó toda esa conversación, Jessica lo rechazó totalmente y el chico se iba a ir de inmediato pero tú llegaste al departamento porque ese día vendrías acá a la casa de tus padres con Jess a presentarla como tu novia, cuando viste a ese chico ahí te volviste loco de celos, no dejaste que Jessica te explicara nada y te fuiste –hizo una pequeña pausa-. Te fuiste a un bar a emborracharte y llamaste a una chica que siempre ha estado obsesionada contigo, ahí fue cuando engañaste a Jess y ella llegó al bar a buscarte, los vio juntos –suspiró-.

-Soy un imbécil –dije de inmediato mientras miraba al suelo e intentaba recordar-.

-Sí, pero lo pagaste muy bien, sufriste demasiado y ella también sufrió, fueron meses horribles para todos, ya no podíamos estar en grupo como siempre, ella no estaba nunca presente si tú lo estabas y tú solo te encerrabas en tu habitación –me miró con tristeza-. Ella decidió irse a París para olvidarte, te dejó una carta diciendo que te perdonaba y no aguantaste, esa misma noche tomaste un avión para ir a buscarla –sonrió dándome un golpecito en la espalda-.

-Necesito decirte algo –respiré profundo-. Ayer una chica me visitó en el hospital cuando ustedes se fueron a la cafetería, ella me dijo que Jessica me había engañado, que me dejaría por su ex novio y que ustedes me mentían solo porque querían que siguiera con ella, fue por eso que he estado así en cuanto al tema de Jess.

-Qué chica? –me miró sorprendido-. Déjame adivinar, una pelirroja?

-Sí, cómo lo sabes? Supongo que la conoces, me dijo que éramos amigos, pero no me quiso decir su nombre,

-Ella es Alexandra –bufó.

-Alexandra? –Recordé algunas cosas que me había dicho Jessica-. Con ella es con quién engañé a Jess? –me sorprendí de inmediato.

-Sí, está loca, realmente enferma de la cabeza, está obsesionada contigo y había estado en el hospital antes pero Jessica no había dejado que entrara a verte.

-Cada vez me convenzo más de lo idiota que soy –reí sarcástico.

-Sí, pero estás a tiempo de enmendar tus errores.

-Tú crees?, me siento pésimo, le he hecho mucho daño a Jessica y ahora estoy sin recordar nuestra relación, aunque debo confesarte que estando cerca de ella si siento cosas –sonreí un poco.

-Ella te ama Justin, tú piensas que ahora está feliz en su departamento sonriendo?, te aseguro que no, la he visto devastada por ti, al igual que a ti por ella.

-Eres nuestro Cupido? –sonreí divertido.

-Algo así –rió mi amigo-. Por cierto aquí tienes algo que te puede ayudar a recordar, me lo mencionaste alguna vez –se puso de pie y comenzó a buscar entre algunas cosas, tardó unos minutos y luego me entregó un álbum de fotos-.

Lo abrí en silencio, comencé a ver fotos mías con Jessica desde pequeños, las reconocí de inmediato, estábamos en el colegio juntos y en varias fotos aparecía Karen, las imágenes parecían estar desde las más antiguas a las más nuevas, eran varias que me provocaron sonrisas pero solo llegaban hasta el momento en que yo recordaba todo, hasta cuando ella viajó a París con su familia. Miré a Ryan en silencio y él me entregó su celular con una foto en la pantalla, era Jessica y yo, abrazados y sonrientes, más atrás aparecía Karen con la lengua afuera queriendo arruinar la fotografía, sonreí al verla.

-Necesito verla, necesito pedirle perdón por todo, me llevarías a su departamento? –dije en un impulso.

-Ahora no Justin –rió-, están todos abajo esperándote y si voy por ella tampoco va a acceder a venir, ahora deberías llamarla y mañana vas a visitarla, me encargo de que Isa los deje solos –sonrió mi amigo.

-Me prestas tu teléfono para llamarla?

-Claro.

Ryan marcó su número y me entregó el celular cuando ya estaba marcando, ella tardó en contestar pero finalmente lo hizo, Ryan me dejó solo en la habitación y me quedé mudo cuando ella habló, hasta su voz por si sola me provocaba cosas.

-Hola? –Repitió por tercera vez-. Ryan que quieres?

-No soy Ryan –hablé por fin.

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CAPÍTULO DEDICADO A UNA DE MIS LECTORAS MÁS FIELES DESDE EL PRINCIPIO, JAVIERA VARAS I LOVE UUUUUUUUUUUUUUUU <3