Bonus Especial

1.5K 91 35
                                    

'Bueno he decir que este bonus es especial, porque no es de uno de los personajes principales, pero que me hace mucha ilusión, porque es una colaboración de una persona a la que adoro y que quiso participar en mi fic. Y no pude negarme, me propuso escribir su propio bonus y amé la idea.
Por supuesto os recomiendo pasaros por su perfil porque escribe increíble.

VanneMorat mil gracias por colaborar aquí y ya sabes que tenemos pendiente escribir algo juntas'

-*-*-*-*-*-*-*-*-
(Vanessa)

Al fin Pedro y yo habíamos hecho coincidir nuestras vacaciones y habíamos decidido ir a Colombia. Pedro se pasó muchos meses en Colombia por su trabajo y siempre que teníamos un hueco, nos gustaba volver. De paso, aprovecharía la visita para visitar a mi hermana Eli, que estaba viviendo en Bogotá con su novio. Hacía bastante que no la veía y me moría de ganas de darle un súper abrazo. Sí, de vez en cuando me sale la vena de hermana mayor y no me gustaba nada estar tan lejos de ella y aunque vivíamos en el mismo continente, estábamos a muchos kilómetros de distancia. Nuestra visita la tomó por sorpresa y aunque tenía otros planes, me convenció para salir a comer las dos solas mientras Pedro visitaba a unos amigos que había hecho durante su estancia en la capital.

-A ver, cuéntame, ¿qué tal todo con Pedro?- preguntó curiosa durante el postre.

-Muy bien, como siempre- respondí naturalmente.

-Noto cierta preocupación en tu voz, ¿pasa algo?- dijo cambiando el gesto y yo suspiré profundamente.

-Está bien… a ti no te lo puedo ocultar.

-Por Dios, no me preocupes- comentó asustada agarrándome las manos.

-No te preocupes… es solo que Pedro y yo decidimos que es el momento de tener un hijo y…

-¿Tú no quieres? ¿Es por eso?

-No, claro que no, es lo que más deseo. El problema es que llevamos mucho tiempo intentándolo y no lo conseguimos- dije dándole vueltas a la taza de café.

-A ver, entiendo tu frustración, pero es pronto para que te preocupes tanto. Seguro que cuando menos los esperes te llevarás una sorpresa- sonrió tratando de tranquilizarme.

-A veces pienso que la mayor eres tú- bromeé dándome una bofetada mental- soy una tonta.

-No eres ninguna tonta. Eres una mujer que está muy enamorada de su novio y que está ansiosa por poder darle un hijo, pero no eres tonta. Trata de relajarte. A lo mejor es cuestión de no forzar tanto las cosas. Dejad pasar un tiempo y lo volvéis a intentar.

-Eres la mejor hermana del mundo.

-¿A qué sí? Pues nadie se lo cree- y las dos reímos ante su comentario- Pero por lo demás, ¿todo bien?

-Sí, todo va genial.

-Pues eso es lo que más importa, que los dos estéis bien y felices juntos. Por un momento pensé que habías descubierto que Pedro te estaba engañando.

-¿Cómo crees?- dije sorprendida.

-Es que si me entero de algo así, me encargo de que no tenga descendencia- respondió en un tono amenazante.

-Por momentos me das miedo.

-No exageres… solo digo que si te hace algo, le cortó los huevos. No es para tanto- dijo sin más, como si lo que acabara de decir fuera lo más normal del mundo.

-Lo tendré en cuenta- comenté antes de darle un sorbo a mi café.

----------

Pedro y yo llevábamos un par de semanas ya en Bogotá, en un apartamento que Pedro había comprado para nosotros. Ambos odiábamos los hoteles y él decidió que sería buena idea tener un apartamento para nuestras vacaciones en Bogotá. Estábamos en la cama, yo ocupada con un asunto de trabajo y Pedro sumergido en un guion que le habían mandado hace poco. Lo observé unos segundos y vi cómo hacía muecas con la cara y no pude aguantarme la risa.

-¿Qué pasa?- preguntó al darse cuenta, mirándome por encima de sus gafas.

-Es que me encantan esos gestos que haces con la cara cuando lees un guion.

-¿Qué gestos?- dijo algo confuso.

-Podría reproducirlos, pero es imposible- respondí sin parar de reír- ¿Le pasa algo al guion?

-No termina de convencerme- me dijo mientras dejaba el libreto sobre la mesita de noche con las gafas sobre él- ¿Y tú? ¿Cómo vas con eso?- preguntó girándose y apoyándose sobre su costado para mirarme.

-Ya casi he terminado- dije volviendo a mi ordenador y entonces empezó a darme besos en el cuello, justo detrás de mi oreja- Pedro, ¿no puedes esperar unos minutos?

-Yo sí, pero hay alguien que no- susurró en mi oreja y definitivamente no podía resistirme a su voz en mi oído. Cerré el portátil y lo guardé en el cajón de la mesita.

-Pues igual voy a tener que calmar a ese alguien- respondí juguetona antes de besarlo.

----------

Estaba en el salón del apartamento con el sobre de la clínica en mis manos, eran los resultados de mis últimas pruebas de embarazo. Le di mil vueltas y no me atrevía a abrirlo, así que llamé a Eli para que me acompañara. Estaba sentada frente a mí, tan ansiosa como yo.

-Cariño, ábrelo ya de una vez- respiré hondo por última vez y procedí a abrirlo. Lo leí con el corazón en la garganta

- ¿Qué pone?- preguntó nerviosa al ver que comenzaba a llorar.

-Abrázame, por favor- se acercó a mí y me abrazó con todas sus fuerzas.

-Dime, ¿estás embarazada?- preguntó secando mis lágrimas.

-Sí…- dije en un sollozo antes de volver a abrazarla.

-Te dije que era cuestión de tiempo- me miró con una gran sonrisa- No me lo puedo creer… ¡Voy a ser tía!- exclamó de lo más emocionada y yo solo pude reír al verla- ¿Cuándo se lo dirás a Pedro?

-Mañana es su cumpleaños y este será su regalo.

-¿Serás capaz de aguantar hasta mañana?

-¿Y tú? ¿Serás capaz?- le comenté en tono de advertencia.

-No sé por quién me tomas- respondió haciéndose la loca- no se lo voy a decir a nadie, te lo prometo.

-No me lo puedo creer todavía…

-Pedro va a dar saltos de alegría cuando se lo digas. Moriría por ver su reacción- rio Eli.

-Mañana te contaré cómo fue todo.

----
-Mi amor, ¿qué haces despierta a estas horas?- dijo Pedro entrando en la cocina frotándose los ojos.

-No podía dormir y decidí levantarme para prepararte un desayuno especial- respondí con una enorme sonrisa, rodeando su cuello y dándole un beso dulce- Feliz cumpleaños- susurré en sus labios.

-¿Y no podrías ser tú mi desayuno?- preguntó con aire de malicia sujetando mi trasero.

-¿Y arruinar todo lo que he hecho para ti?- dije haciendo puchero.
-Tiene todo muy buena pinta- comentó ojeando todo lo que había en la encimera.

-Especial para ti… cuando termines, te daré tu regalo- Pedro se sentó y dio un trago al zumo de naranja recién exprimido.

-¿Tengo un regalo?- preguntó sorprendido.

-El mejor regalo de tu vida- dije rodeándolo desde su espalda, acariciando su pecho sobre la camiseta y él me miró alzando una ceja, divertido.

-¿Qué estarás tramando, flaquita?

-¿Este es el mejor regalo de mi vida?- dijo al ver el pequeño sobre- ¿Qué es?

-¿Qué te parece si lo abres?- comenté sarcástica- Deja de juzgar el regalo por su envoltorio- Pedro no dijo nada más y abrió el sobre, entonces sacó lo que había dentro y me miró fijamente.

-Esto es… es… una ecografía- asentí sonriendo- ¿Estás… embarazada?- preguntó con los ojos humedecidos.

-Sí, mi amor… ese es nuestro bebé- dije llorando y Pedro me tomó en brazos, rodeando su cintura con mis piernas y su cuello con mis brazos, besándome como nunca lo había hecho.

-¡Vamos a ser padres!- exclamó con la mayor expresión de felicidad que había visto jamás en una persona- Ni te imaginas lo feliz que me siento, lo feliz que me haces… Te amo.

-Nosotros también te amamos- dije después de observar mi vientre.

-Ahora sí que comienza lo bueno.

¿Quién te dijo esa mentira?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora