Capitulo 55

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(Inma)

La alarma del reloj me sobresaltó. Anoche habíamos llegado tarde del viaje y hoy tenía que madrugar para volver a la rutina. Remoloneé un poco en la cama hasta que me decidí a levantarme. Me dí una ducha rápida que me espabilara para empezar el día. Me sequé un poco el pelo y me maquillé un poco para disimular las suaves ojeras que tenía. Me vestí y fui a la cocina a desayunar un café bien cargado para terminar de despertarme. Volví al dormitorio a despedirme de Juan Pablo que aun estaba en la cama.

-Me voy a trabajar - dije acariciando su pelo

-Que tengas un buen día - susurró medio dormido

-Nos vemos luego - le dí un beso en la mejilla - te quiero, gordito

-Te quiero, koalita - bromeó

Me fui del cuarto dejándolo dormir y salí de casa directa a la escuela. Las dos primeras clases se pasaron un poco lentas y aproveche mi hora libre para tomarme otro café y ponerme al día con correcciones de algunos trabajos.

-¿Inma? - oí un a voz desde la puerta - ¿se puede?

- Claro - animé al director a pasar - ¿Pasó algo?

-Solo me gustaría hablar contigo - dijo sentándose frente a mi

-Le escucho - dije apartando los papeles que tenia sobre la mesa

-Bueno, Inma - empezó a decir- como ya sabes tu plaza aquí es temporal

-Si, vine a cubrir una vacante temporal - asentí

- El caso es que la profesora a la que cubres - dijo- se va a reincorporar en unos días, y eso significa...

-Que tengo que dejar la escuela...-susurré

-Exacto - dijo - quiero que termines esta semana y te despidas de los niños, que te adoran - me sonrió - me siento horrible, porque eres una profesora excelente y trabajadora, pero todos los puestos están cubiertos...

-Este día tenía que llegar, no se preocupe - sonreí levemente

-Te prepararé una carta de recomendación y si en algún momento necesito contar con alguien no dudaré en llamarte - aseguró

Estuvo un rato más hablando conmigo y cuando sonó la campana salió de allí. Me llevé las manos a la cara. Por más que me había mentalizado para esto sentí que se me hacía un nudo en el estómago. Trabajar en aquella escuela había sido una de mis mejores terapias, para dejar atrás ciertos aspectos de mi pasado y sabía que iba a echar mucho en falta a esos chiquillos.

*Pequeña* - leí el mensaje de Isaza que acababa de llegar - *¿Cómo va la mañana?*

*Pues genial* - respondí - *Nótese la ironía*

*¿Pasó algo?* - preguntó

*Te cuento cuando llegué a casa ¿vale?* - escribí

Bloqueé el móvil y esperé a que los pequeños llegaran a clase para dar la siguiente lección. El resto de la mañana me la pasé pensado en como iba a ser capaz de despedirme de aquellos diablillos a los que tanto cariño había cogido esto meses. Al salir de la escuela pasé por la pequeña tienda de los padres de Camila, un chiquita a la que adoraba y que era tremendamente fan de los chicos.

-¡Inma! - se abalanzó sobre mí al verme- ¡ya te echaba de menos!

-Siento no haber venido - me disculpé dándole un abrazo- pero apenas he tenido tiempo y además he estado unos días fuera de la ciudad

-Acabo de ver las fotos que subió Isaza- sonrió - sois tan goals

-¿Cuándo subió fotos? - pregunté

-Hace un momento - rió - ¿y ese anillo?

-Te lo cuento si me prometes guardar el secreto - dije

-Sabes que lo haré - me miró divertida

-Isaza, me pidió matrimonio - le susurré al oido

-¡¿Qué?! - exclamó llevándose la manos a la cara - enhorabuena - me dio un abrazo emocionada

-Gracias -reí - pero de verdad no se lo puedes decir a nadie

Prometió que no lo haría. Hablamos durante un rato. Desde que conocía a Camila había sentido un gran apego hacía ella, y es que me recordaba mucho a mi en ciertos rasgos de su personalidad. Era una chica especial y la quería muchísimo. Tenía un talento increíble para la pintura y me encantaba hablar con ella durante horas.

-Cam, se me ocurrió algo - dije

-¿Qué cosa? - preguntó

-¿Qué te parece si te vienes a comer a casa? - propuse - seguro te encantará pasar un rato con los chicos

-¿Bromeas? - se sorprendió ante mi propuesta

-No, te lo digo muy en serio - respondí- avisa a tus padres y nos vamos

Salió corriendo feliz y tras avisar a sus padres salimos de la tienda en dirección a casa. Ella iba agarrada a mi brazo como si de una niña pequeña se tratara y no paraba de reír por los nervios. Al llegar a casa, Malta salió a saludarnos, suponía que Isaza había ido a buscarla a casa de sus padres, donde de quedó durante el viaje. Camila y yo oímos algo de jaleo en el sofá y al pasar vimos a los chicos hablando entre ellos. Ella se llevó la mano a la boca emocionada.

-Y esto es lo que provocáis en una adolescente- reí

-¿Quién es ella? - preguntó Isaza - ¿Y qué hace aquí?

-Mi nombre es Camila - se presentó - conocí a Inma hace unos meses y es como una hermana mayor, siempre que puede viene a visitarme...aunque creo que esa historia ya la sabes - dijo ella

-¿Me he perdido algo? - la miré

- Cuando te diste ese beso con Yatra - contestó

- Me mando un mensaje contándome todo lo que habías hecho por ella - añadió Isaza- y pidiéndome que te perdonara, de hecho, creo que lo guardé

Buscó en su teléfono y me enseñó lo que Camila le escribió. La miré y le di un abrazo, susurrándole un 'gracias' al oído. Comimos con los chicos, a los que Camila les había traído unos dibujos que ella misma hizo para ellos.

-Tienes un gran talento - dijo Villa

-Y una curiosidad - dijo Isaza- ¿quién de los cuatro es tu favorito?

-Pues seguro que yo - dijo Simón - a mi me ha hecho dos dibujos y a vosotros uno

Camila se sonrojó y negó con la cabeza mirando a Simón, dando a entender que se estaba equivocando.

-Mi favorito es Martín - dijo ella

Martín sonrió orgulloso y todos rieron.Al acabar de comer, fui a la cocina a recoger los platos, dejando a los chicos con ella en el salón.

-¿Me vas a contar que pasó esta mañana? - preguntó Isaza abrazándome por la espalda

-Esta semana tengo que dejar la escuela - respondí dándome la vuelta- la profesora a la que sustituyo vuelve a su puesto y me tengo que despedir de los niños...

-Sé lo mucho que esos niños significan para ti - tomó mi cara entre sus manos - pero estoy seguro que pronto encontraras otro colegio y más niños a los que les encantará tener una profesora tan divertida, inteligente y guapa como tú - me besó

¿Quién te dijo esa mentira?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora