¿Quién te dijo esa mentira?

Capítulo 78

(Inma)

Después de mucho insistirle Isaza había bajado a la cafeteria a comer algo. Estaba más cabezota que de costumbre y aunque entendía que no quería separarse de mi, no debía descuidarse.

-Permiso - dijo una voz femenina desde la puerta

-¿Sophie? - me sorprendí al verla allí

-Sé que no soy la visita que esperabas, pero quería saber como estabas y también queria hablar contigo - respondió

-Adelante - la anime a entrar- ¿de que quieres hablar?

-Solo quería pedirte disculpas - susurró

-No, Sophie - la corté- soy yo quien deberia pedirte disculpas, te juzgué mal desde un principio y ni si quiera te dí una oportunidad

-Bueno en tu lugar, yo tampoco me la habria dado - respondió cabizbaja

-No digas eso - le agarré la mano - ¿sabes? Isaza me ha contado lo que  pasó tras el concierto...

-¿Y me odias? - preguntó

-No, ni mucho menos - contesté - estar enamorada no es fácil, cometemos locuras y quizá yo en tu lugar habría hecho lo mismo

-Eres muy comprensiva - sonrió

-Me pillas de buenas - bromeé - chistes a parte, no tengo intención de pelear y menos con la que podría ser mi gemela mexicana

-Es curioso ¿cierto? - rió 

-¿Te parece si empezamos de cero? - propuse - quizá podríamos ser buenas amigas

-Me parece una gran idea - me tendió la mano y yo se la estreché

Hablamos durante un largo rato, hasta que Isaza hizo acto de presencia en la habitación y Sophie, se despidió dejándonos solos. Isaza me miró frunciendo el ceño como si no entendiera que acababa de ver.

-¿Qué ha pasado? - preguntó sentándose en la cama

-Nos aliábamos contra ti - bromeé

-¡Qué boba eres! - exclamó

Se acercó para besarme y bajó a mi cuello a dejar algunos de sus besos, pero aquellos besos no iban con segundas intenciones, eran inocentes de esos que te hacen reír de las cosquillas.

-Disculpad - oímos al doctor a los pies de la cama- no quería interrumpirlos 

-Discúlpenos usted a nosotros  - dijo Isaza con una sonrisa avergonzada en la cara 

-¿Tiene noticias del bebé? - pregunté

-Sí - respondió- y he de decir que son buenas

Miré a Isaza que respiró aliviado. Se notaba que aunque lo noticia le había pillado tan de sorpresa como a mi, le hacía ilusión ese bebé, o al menos lo deseaba más que yo. Me sentía horrible por pensar así, pero Isaza y yo éramos tan jóvenes. Además, Juan Pablo tenía toda una carrera por delante que le obligaba a pasar meses fuera de casa. Meses en los que yo tendría que dar todo de mi a ese bebé.

-El bebé está bien - dijo el doctor - por suerte no ha sufrido daños, y estoy seguro que nacerá muy sano

-No sabe lo que nos alegra oírlo, doctor - dijo Isaza

-Aun así Inma, quiero que cuando vuelvas a Colombia hagas revisiones constantes - me aconsejó - para asegurarnos de que se desarrolla bien

-Lo haré - asentí con la cabeza 

-En cuanto a ti - me dijo- todo está bien y aunque podría darte el alta, quiero que te quedes mínimo un par de días más para quedarnos del todo tranquilos

El médico se fue de la habitación e Isaza sonriente me volvió a besar emocionado. Se le notaba feliz y adoraba verlo así. No tardó en escribir a los chicos para darles la noticia.

-Espero que sea una niña - dijo guardándose el móvil en el bolsillo- con los ojitos verdes y la misma sonrisa que su madre

-Va a ser un niño - respondí - estoy tan segura, un mini Isaza 

-Será una mini Inma - negó con la cabeza

-¿Qué nos apostamos? - lo reté 

-El que gane, tiene la potestad de elegir el nombre del bebé - sonrió

-Me parece bien - sellamos el trato

Pasamos un buen rato juntos, riendo y pensando nombres locos que ponerle al bebé. Hasta que al cabo de un rato Eli, Aleja  y Sue aparecieron por allí. Isaza me dejó con las chicas, para irse al hotel a descansar unas horas, cosa que casi le rogué que hiciera.

-¡Enhorabuena! - me abrazo Eli - No sabes lo que me alegro que el bebé esté bien y que me tengas en cuenta como madrina - me guiñó un ojo

-Un mini Morat en camino - dijo Aleja emocionada

-Te complicaste la vida, primita -Sue rodó los ojos - pero me alegro de que este todo bien

-Si os soy sincera - dije- no estoy especialmente emocionada, Sue tiene razón es complicarnos la vida - me expliqué - pero ver a Isaza tan feliz hace que se desaparezcan todos esos miedos

-Isaza está feliz porque tú estás bien - me dijo Eli- tú eres su prioridad, y lo has sido desde que te ingresaron 

-Creyó que te perdía - añadió Aleja - todos lo pensamos

-No os podíais librar de mi tan fácilmente - bromeé

-¿Te contó que mañana vuelven a retomar la gira? - preguntó Sue

-Sí, ya me dijo - respondí - y entiendo que tengan que hacerlo

- Te vas a hartar de nosotras - rió Eli 

Tener a las chicas ahí me emocionaba muchísimo y más después de todo lo que les había escuchado decirme. Ellas eran esas hermanas que habia tenido la oportunidad de elegir y las adoraba. Al igual que Isaza, ellas, junto a los chicos, eran una parte muy importante en todo este proceso de superación. Sin ellas no hubiera sido lo mismo y me sentía muy afortunada de tenerlas conmigo.

-¿Sabéis que chicas? - dije

-¿Qué? - preguntó Sue

-Que os quiero mucho - dije tapándome la cara

-¡Ay que mona! - exclamo Eli - se merece un abrazo grupal

Y todas se abalanzaron para abrazarme. Seguro que aquella imagen era digna de admirar.

-Oye y una pregunta - me miró Eli curiosa - ¿no hablaron sobre su boda? No sé quizá con el bebé en camino deberiais buscar una fecha pronto

-¿Por qué? - pregunté - podriamos esperar a que el bebé naciera y hacerle participe de ella

-Tan pequeñín ni se enterara - dijo - yo creo que teneis que casaros pronto

-Dejemos primero que se casen Tani y Alejo - dije - y ya veremos que hacemos Isaza y yo

Con las chicas pasé un rato divertido. Ellas eran un buena terapia para todo. Siempre gastando bromas y contando chistes absurdos.