(Inma)
Había pasado la noche en casa de las chicas, Sue nos propuso pasar una noche de películas de terror y palomitas. Nos habíamos acostado bastante tarde y me despertó el sonido del timbre. '¿Quién podía ser a esas horas de la mañana?' me pregunté mientras me levantaba de la cama frotándome los ojos. Eli y yo nos cruzamos en el pasillo camino a la puerta.
-Juro que voy a matar a quien este detrás de la puerta - dijo bostezando - ¿quién puede llamar a estas horas de la mañana?
-¿Algún vecino tocahuevos? - respondí encogiéndome de hombros
-Pues me va a tocar a mi otra cosa - rodó los ojos mientras abría la puerta
-¿Quién te va a tocar qué? - dijo Simón riendo
-Tú, lo que vienen siendo los bajos - respondió Eli con una sonrisa irónica - y no me refiero a instrumentos musicales
-Soy fan de esta chica - me eché a reír
-Yo también lo soy - dijo Simón acercándose a su novia para besarla
Eli cedió ante el beso de su novio, mientras el resto del grupo entraba en dirección al salón. Isaza se paró a mi lado y tras darme un tierno abrazo, dejo un beso sobre mis labios. Me aferré a su camisa haciendo que le beso fuera algo más duradero.
-Veo que tenías ganas de verme - susurró cerca de mis labios
-No te haces a la idea - sonreí algo sonrojada al darme cuenta de que Villa y Martín nos miraban riendo y poniendo morritos
-Más bobos y no nacen - dijo Isaza rodando los ojos
Tras dejar las maletas en el salón, Villa y Martín fueron a despertar a sus novias, que a pesar del jaleo aún seguían durmiendo.
Pasamos toda la mañana juntos en casa de las chicas, escuchando las anécdotas de la gira que ellos nos relataban entre risas, hasta que los chicos decidieron que era hora de hacer una pequeña visita a sus familias, las cuales también estarían deseando verles. Acompañé a Isaza a casa de sus padres, dónde sus hermanas le recibieron con abrazos.
-¡Sasa! - dijo Angela tras abrir la puerta - ¡qué ganas teníamos de que volvieras!
-Yo también tenía ganas de volver - respondió cediendo al abrazo de su hermana
-¡Enhorabuena futuro papá! - exclamó Susana abalanzándose sobre su hermano
-Cuánta efusividad - bromeó Isaza
Entramos a la casa a saludar a su padres. Su madre lo llenó de besos y muestras de cariño, mientras su padre algo más comedido le dio un breve abrazo, que Malta interrumpió subiéndose sobre Isaza y llenándolo de cariñosos lametones.
-¡Malta para! - rió - yo también me alegro de verte pero para ya
Estuvimos el resto del día con su familia y después de cenar volvimos a casa. Tras entrar al piso, me aparté un poco de la puerta para que él pasara y cerré la puerta a mi espalda, apoyándome en ella. Isaza dejo su maleta en el suelo y se giró para mirarme, acercándose despacio a mí. Agarró mi cara entre sus manos y me beso de un forma muy sensual y candente. Lo atraje hacía mi tirando de su chaqueta y él desplazó su manos a mis caderas, recorriendo mi cuerpo con detenimiento. Sin pensárselo mucho se deshizo de mi camiseta y con una sonrisa en la cara observó durante unos segundos mi incipiente barriga de embarazada.
-Eres una mamá muy sexy - dijo antes de dar un suave mordisco en mi labio inferior
-Lo que tú digas - rodé los ojos incrédula
-¿No me crees? - sonrió
-No - le saqué la lengua
Negó con la cabeza y volvió a centrarse en lo que teníamos entre manos. Despacio y con cuidado de no tropezarnos con nada recorrimos los escasos metros que habían hasta el dormitorio, dónde nos dejamos caer sobre la cama. Se colocó sobre mí, acariciando mi mejilla y sonriendo.
-Tenía ganas de volver - dijo antes de volver a besarme - de estar contigo
-Yo también tenía ganas de que volvieras - respondí - aunque me estaba acostumbrando a tener la cama toda para mi
-Siempre puedes mandarme al sofá - rió
-No me des ideas - le sonreí
Desplazó sus labios hasta mi cuello, dejando besos cortos y cálidos que hicieron que se me erizara la piel. Nos envolvieron las ganas de estar juntos y simplemente nos dejamos llevar por la situación.
-Echaba en falta esto - dijo rodeándome con su brazo
-Ahora que estamos solos me gustaría darte algo - dije levantandome de la cama y poniendome su camiseta
Me acerqué al armario y agarré una pequeña cajita envuelta en papel de regalo que llevaba varia semanas guardando. Volví a la cama y me coloqué de rodilla al lado de Isaza que se incorporo apoyando su espalda en el cabecero. Le cedí el regalo y el lo aceptó. me miró sonriente e intrigado a la vez, y sin decir nada empezó a quitar el envoltorio. Abrió la caja dentro de la que había un reloj y antes de preguntarme a qué de debía ese regalo, me extendió la carta que había en su interior.
-Quiero que me la leas tú - dijo casi suplicando
-Ay qué vergüenza- bromeé -'Supongo que he de aclarar porque te estoy regalando un reloj. Un objeto que visto por si solo carece de valor, pero que en realidad tiene un bonito trasfondo - Empecé a leer - Alguien me contó que en México, es tradición que cuando una pareja se compromete, la novia, tras aceptar el anillo regala a su prometido un reloj para sellar de alguna manera esa promesa de pasar el resto de su vida juntos. Y después de todo lo que pasó en España, después de enterarme de que íbamos a ser padres, caí en la cuenta de que a pesar de haber dicho que sí a esa propuesta que me parecía tan loca, que a pesar de haber aceptado ese anillo que representa tantas buenas cosas, necesitaba sellar este compromiso... - vi como se dibujaba una sonrisa en su rostro- Necesitaba decirte que me muero por empezar esta nueva locura contigo, que quiero ver como el tiempo pasa a tu lado y que aunque aun no termine de creerlo, quiero ver como crece ese pequeño garbancito que casi llegó sin avisar. Quiero muchas cosas y espero conseguirlas a tu lado... - doblé la carta y acabé de recitar la última frase sin necesidad de mirar - Así que, este reloj que parecía no tener ningún valor, es la manera definitiva de darte el 'Sí, quiero' a tu petición'.
![](https://img.wattpad.com/cover/133982275-288-k319488.jpg)
ESTÁS LEYENDO
¿Quién te dijo esa mentira?
FanfictionAl final del camino siempre encuentras a esa persona capaz de reparar un corazón tan roto que parecía no tener arreglo. Sabe exactamente que hacer, o decir para cicatrizar esas heridas que no cerraban. Por que a veces tenemos que rompernos, para q...