polos opustos

LIVIANDAD

Shane

Ya a pasado una semana desde que no e visto a Mariana, una semana del cumpleaños de Tamara, una semana que no le e preguntado a Lola sobre Mariana,  una semana que Lola andaba muy pendiente al celular mas de lo normal, una semana que Estef me miraba raro por lo desconcentrada que estaba.

No queria levantarme, Nike estaba durmiendo en mi habitación, el tampoco parecia querer levantarse, además que el clima esta nublado y friolento.

- creo que hoy nos quedaremos a ver peliculas Nike - el mueve la cola en respuesta. Busco el control entre las almohadas y prendo el televisor, busco un canal donde esten poniendo una buena pelicula.

- pon esa - dice Estef sentándose en mi cama, no sentí cuando entró a mi habitación.

- esa es muy romántica - digo reclamando.

- entonces no comerás lo que e preparado - dice cruzandose de brazos.

Nike y yo nos miramos, parece que nos tocara ceder esta vez.

- esta bien, miraremos esa - Estef se acomoda en mi cama y nos ponemos a mirar la pelicula.

Paso algo de 15 minutos y Estef empezo a jugar con mi mano, deje que siguiera hasta que empezó a pellizcarme el brazo.

- haber dime - digo apagando la televisión, no se porque me hizo ponerla si no la iba a ver.

- no se de que hablas y porque apagaste la televisión - dice cruzandose de brazos.

- dime en que parte iba - digo jugando con el control, la cara de Estef se pone pensativa - no la estabas mirando.

- vale, no le preste tanta atención - dice   rodando los ojos, yo rio - pero bueno, ahora que estas mas concentrada, me diras que te a pasado esta semana, has estado muy distraida, hasta Tamara lo a notado.

- no se de que me hablas - digo mirando al televisor apagado.

- ahora eres tu la que no sabes - dice pellizcandome el brazo.

- eso duele - digo frotandome el brazo.

- responde Shane - dice mirandome a los ojos - desde el cumpleaños de Tamara estas asi, si hay algo que no te gusto puedes decirmelo, a mi me gusto la decoración y el vestido estaba hermoso, fue el mejor cumpleaños que todo...

- no es nada de la fiesta Estef, tranquila - digo agarrando sus manos que empezaron a moverse involuntariamente - la fiesta estaba increible y me gusta escuchar que te gusto demasiado.

- entonces que es - dice acariciando mi rostro, su preocupación por mí me hace sonreir, Estef siempre andaba pendiente de mi, al igual que yo lo estaba de ella, es increible que no seamos pareja, siempre que nos ven piensan que estamos, incluso mi mamá me dice que aprueba la relación con Estef, que es la mejor nuera de todas, hasta e llegado a pensar en estar con Estef, ya tenemos todo, vivimos como una pareja practicamente, no se si ella se habra hecho la misma pregunta que yo.

- ¿alguna vez has pensado en estar conmigo Estef? - Estef deja de mover su pulgar, no esperaba esa pregunta.

- bueno - dice agarrando su cabello - no me esperaba esa pregunta - rie un poco.

- no tienes que contestar - rio junto con ella - no se porque se me vino a la mente.

- tranquila - dice sonriendo - la verdad si e llegado a pensar en esa pregunta, como sabras no es novedad que nos anden diciendo que somos pareja.

- a cada rato - ella rie, hago lo mismo.

- vivimos prácticamente como una.

- algunas veces pienso que me amarraste con Tamara - Estef achina los ojos y me golpea el brazo.

- pues si Shane, era mi carta bajo la manga ya que no me pedias para estar - dice riendo maliciosamente - solo estaba esperando este momento para que me des el anillo de oro, si que demoraste mucho - dice sacandome la lengua.

- todavia anillo de oro - digo levantando una ceja - que exigente que eres, no te basta con la casa.

- podria ser mas grande - dice encogiendose de hombros.

- asi - digo haciéndole cosquillas, ella empieza a reir y trata de apartarme, pero tengo mas fuerza.

- nike ayuda - dice con el poco aliento que le queda, Nike empieza a ladrar.

- no ladres Nike - digo mirándolo - vas a despertar a Tamara - Nike deja de ladrar y sale de la habitación. Estef lo mira irse y yo paré de hacerle cosquillas.

- que mejor amigo del hombre - dice reponiendose del ataque de risa.

- me hizo caso a mi - ella en un rápido movimiento se sube encima mio.

- haber ahora quien te defiende - empieza hacerme cosquillas y empiezo a reir, trato de detenerla, pero con sus piernas inmoviliza mis brazos, asi que muevo mi cadera para arriba y libero mis brazos y la tumbo en la cama, estoy entre sus piernas, tiene el cabello alborotado y las mejillas rojas por el esfuerzo que realizó, nuestras respiraciones estaban descontroladas, me acerco a su rostro y ella suelta un gemido, habia empujado mi cintura con su pelvis sin darme cuenta, su gemido me excitó, hace cuanto que no tenía sexo con alguien, me concentre en Estef y Tamara que habia dejado mi vida desenfrenada a un lado, al igual que Estef,  no habiamos tenido amorios desde hace mucho tiempo. Estef volteo su rostro, el rojo de sus mejillas ya no era por el esfuerzo de hace rato, no estaba pensando claro, muevo mi cadera de nuevo hacia arriba y Estef suelta otro gemido, me mira a los ojos, trago saliva, hago otro movimiento y Estef cierra los ojos y suelta el aire que tenia reprimido, mi excitación estaba aumentando, muevo mi cadera de nuevo hacia adelante y repito la acción, Estef me agarra del cuello y me atrae hacia ella, enrieda sus piernas en mi cintura, con cada movimiento que hago sus gemidos son mas graves, Estef muerde mi oreja cuando acelero la velocidad, suelto un gemido cuando lo hace, nos miramos, sus pupilas estan dilatadas, tiene la boca entreabierta, miro sus labios, jamás habia querido sentirlos como ahora, Estef me acerca a su rostro, nuestros labios estan por chocar, nuestras respiraciones se vuelven una sola, Estef se muerde el labio y yo pierdo el sentido con ese acto, nos besamos, con pasión, atrapa mi labio inferior entre sus dientes y jala de el para luego continuar con el beso.

Tamara empieza a llorar, me doy cuenta de lo estoy haciendo, Estef se separa de mi, dejo de mover mi cadera, Estef suelta el amarre de sus piernas, nos quedamos en silencio escuchando el llanto de Tamara, que había pasado, estaba apunto de llevar a Estef al clímax, Estef no me mira, parece que la puerta esta más interesante que yo, me muevo de entre sus piernas y me siento sobre mis pies, Tamara había dejado de llorar, parece que solo fue un mal sueño y volvió a dormir, mi respiración empieza a tomar su ritmo normal,  Estef ahora mira el techo, se incorpora y nos miramos.

- debemos hablar - dice con la vos rasposa.