Advertencia: contenido sensible (Yaoi ), recomendado para mayores de 14 años.PD// perdón por no revisar antes xD
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- Me tienen las bolas hartas esos dos... ¿No deberían cada quién estar haciendo su trabajo? - Killer T se quejaba en voz alta mientras sus leales soldados aprobaban cada cosa cosa que decía (mayormente por temor a represalias).
- Si señor -
- Están ahí, paseándose como si no supiéramos todos ya que tienen una relación romántica, par de estúpidos -
- Si señor - respondían a coro los soldados.
La vista del furioso rubio Killer estaba clavada en las dos células que bebían el té juntos. Ambos con una sonrisa en el rostro, el rubio podía jurar que se alcanzaba a ver un leve tono rosa en las mejillas del neutrófilo. El molesto rubio conocía esa mirada, conocía esa sonrisa, como prestaba atención a cada palabra que salía de los labios delicados de la pelirroja, sabía tan bien incluso lo que ese par de tortolos aún no sabían... Saber tanto, que duele.
El rubio sabía que él el neutrófilo miraba con amor a aquella chica, y de algún modo, dolía.Es difícil ser de esos seres que se enamoran del la escencia, del alma, los sentimientos y no del recipiente que los contiene. Es más difícil tener que ocultarlo porque no todos lo aceptan, es aún más difícil tener que ser el más rudo, siempre.
El rubio veía molesto como el neutrófilo miraba con ternura a la pelirroja que le relataba su día, cómo fue entregar ella sola sin perderse. Sin saber que el albino estuvo velando por ella durante toda su travesía.
El pálido rostro de 1146 tenía el golpe que le había propinado con anterioridad Killer T, y ni así el neutrófilo dejó de estar junto a la chica, ni así dejó de verla con amor.Los soldados volvieron a la base, salvo el líder del escuadrón quien apoyado en una pared seguía espiando escondido a la pareja que se despedía para volver cada quien a sus deberes.
- No estoy celoso...- se dijo a sí mismo el rubio golpeando la pared con el puño. Le dolió cuando el albino volteó a ver cómo se perdía la chica en la distancia.
"Cuando realmente amas a alguien, volteas"
- Realmente la ama... Idiota -
El rubio se sentó en una banca, soltó un enorme suspiro. Y comenzó a recordar cuando comenzó su martirio... En la escuela.
Él era solo un niño asustado que quería ser un héroe. Desde que nació fue un poco más emotivo y sensible que los demás niños, también soñador e ingenuo.
Le costó pero logró ingresar a la escuela Timo, fue difícil adaptarse, todos eran muy rudos y valientes. Incluso las chicas mas de alguna vez le dieron una paliza solo porque podían hacerlo. Aprendió a ser fuerte y frío entrenó día a día, noche tras noche logró graduarse con honores y el día que se activó los dejó a todos en shock: Fuerte, rudo, invencible... Desafortunadamente, se tuvo que volver un brabucon, al igual que ellos que tanto lo hicieron sufrir en la escuela.En el fondo el no era así, el mundo frío y cruel de los linfocitos lo moldeó para ser así.
Cuando conoció a U1146 quedó sorprendido, era bastante amable y aún así era muy bueno en su labor. Él era definitivamente la célula más profesional y buena persona que había conocido, por unos instantes incluso se lamentó no ser un neutrófilo... Pudieron ser compañeros, amigos desde la niñez y aprender juntos.
Había algo en esa agradable neutrófilo que le resultaba llamativo, es decir, de por si era agradable a la vista esa misteriosa sonrisa que tenía cuando platicaba con sus colegas, también ese flequillo que cubría uno de sus orbes negros le daba un aspecto de "chico malo" pero quien lo conocía sabía que 1146 era alguien a quien podías confiarle tu vida.
Cómo deseo ser su amigo, compartir con él...
Cómo quiso reír y compartir experiencias igual a como lo hacía con esa eritrocito torpe... Pero no podía mostrar debilidad. El debía ser fuerte, no podía mostrar sentimientos "blandos" o pensarían que él lo es y todas esas burlas y agresiones de la niñez que lo marcaron para siempre podrían volver; o peor... Ser descubierto.Sentía envidia...
Él estaba conforme con su cuerpo, estaba conforme con ser varón, fuerte, musculoso, incluso le gustaba su cabello rebelde. En no quería ser una "chica" claro que no, pero quería poder ser "el mismo" sin temor a represalias.
"Los hombres no hacen eso"; "eso es de maricones"; "comportate como hombre". ¿Qué regla mide la masculinidad? ¿Por qué nos obligan a comportarnos de una forma u otra en base a nuestro sexo?. El sexo es lo único que nos diferencia, el género es algo que inventa e impone la sociedad.
Él jamás se atrevería a decirle a 1146 lo que pensaba y sentía por él. Pero le dolía ver cómo suspiraba cada vez que esa pelirroja eritrocito separaba su camino del suyo.
Killer se lamentaba de que el neutrófilo nunca siquiera se cuestionase porque el rubio siempre se lo topaba por ahí.
"También te encuentras conmigo todo el tiempo... Pero parece que no te importa, pero bueno, somos hombres ¿Qué más da? ¿No?".
El rubio fue sacado de golpe de sus pensamientos cuando un castaño de gafas se sentó junto él en la solitaria banca.
- ¿Qué te esta molestando ahora? - preguntó el castaño Helper T Cell.
- Nada - respondió en seco el rubio.
- Sabes que soy la única célula en este mundo que te conoce lo suficiente como para reconocer celos cuando los ve... ¿Es el Neutrófilo? - preguntó el castaño mientras limpiaba sus gafas con un pañuelo.
- ¿Cómo lo haces? - preguntó el rubio sin levantar la mirada.
- Es fácil, tomas un pañuelo y das movimientos en el cristal y... -
- No seas imbécil, sabes que no me refiero a eso... - respondió molesto el rubio.
- ¿Qué cosa entonces? - preguntó el castaño acercandose un poco más al rubio.
- ¿Cómo puedes verte al espejo y no odiarte? Cómo puedes jugar con Regulatory T Cell y no sentirte mal... - preguntó el varón rubio llevándose las manos a la nuca. El castaño sabía a lo que se refería.
- Del mismo modo que tú te desahogas con NK, supongo... No lo hago para hacerle daño, lo sabes. Tú más que nadie sabe que lo último que quiero hacer en la vida es hacerle daños los demás, por lo mismo no te reprocho lo del neutrófilo... -
El acongojado Killer volvió a suspirar, Helper era "un fenómeno" igual que él. Ambos eran cómplices desde jóvenes, el castaño lo veía como él veía a 1146.
- ¿No es una mierda no poder controlar los sentimientos? - preguntó el rubio levantando la mirada al horizonte.
- Es una putada... Deberían funcionar con botones - respondió Helper.
El rubio sonrió por lo bajo, a veces las ocurrencias y caras despreocupadas de su amigo de gafas le hacían sonreír. Y ahora que nadie los estaba viendo, se dió el gusto de reír a sus anchas.
- Es agradable verte sonreír de vez en cuando... - añadió el castaño ofreciendo unas galletas a su colega.
- No hagas esto... Tú sabes que yo no... -
- Lo sé, lo sé... No es recíproco, pero ¡hey! Eso no significa que no me preocuparé por tí ¿Ok? Ahora, levanta ese trasero y vamos a mi casa por unas bebidas - exclamó el castaño poniéndose de pie invitando al rubio a seguirlo.
El rubio sabía cómo terminaban esas invitaciones a beber, sabía que aceptaría de igual forma, sabía que toda esa fachada de "rudeza y hombría" seguirían igual, sabía que él también lo sabía...
Saber tanto, que duele.___________________________________
Amar a una persona, no significa que la otra te deba amar a ti.
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Hataraku Saibou (Historias breves)
FanfictionFanfics breves en un solo lugar (AE3803 x U1146 mayormente). Cómo serán historias cortas, las iré poniendo en este lugar ❤️