Capítulo 34

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Mario: Mike, te he preguntado algo y estoy esperando la respuesta, te dije que tuvieras mucho cuidado con la privacidad de este lugar pero ve lo primero que haces.- iba a golpearlo pero lo detuve inmediatamente, no sé de dónde tome el valor para poder siquiera tocarlo pero lo hice, él deposito sus asesinos ojos sobre mí haciéndome flaquear.
Tn: él no tuvo la culpa de absolutamente nada, dejame explicarte.- él me tomó bruscamente del brazo para después sacarme de ese cuarto, me llevaba casi arrastrando y su agarre en mi muñeca era demasiado fuerte, entramos a la que era su habitación y él encendió la luz.- me dejaste comiendo sola en ese enorme cuarto por lo tanto fui a dónde Rose para terminar de comer, fue ahí cuándo llego Mike y dijo que comería rápido porque tenía que volver a un asunto que tenía pendiente, él salio de la cocina y debido a que estaba aburrida lo seguí y me dio curiosidad saber que era lo que había detrás de esa puerta de metal, fue cuándo yo...entre.
Mario: ¿te dije que hablarás? No ¿verdad?- estaba harta de la manera en la que estaba siendo tratada por él pero no era lo suficientemente valiente cómo para comenzar a insultarlo.- eres demasiado curiosa lo cual tienes prohibido de ahora en adelante, aún estoy pensando en el castigo que voy a ponerte por haber desobedecido.
Tn: puedes matarme, esa sería una solución perfecta y creo que para ti es fácil.- él me pego a la pared haciendo que lanzará un leve gemido de dolor, sus manos estaban a los costados de mis hombros y sus ojos negros clavados en los míos.
Mario: yo no te importo a ti en lo más mínimo creeme que eso ya me ha quedado claro infinidad de veces pero eso no quiere decir que tú no me importes a mí, por algo estás aquí y no es solo para tratarte cómo cualquiera, ahora estás esperando un hijo mío lo cuál te hace aún más especial para mí, y sí querías saberlo, me lastimaste hace rato con lo que dijiste de que jamás me ibas a querer, ya puedes estar tranquila.- se quitó bruscamente y se quitó la playera así quedando solamente en los pantalones de pijama, se recostó en la cama y apagó la luz.
Tn: ¿cómo se supone que se abre está jodida puerta?- susurre.

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