Me Perteneces

Capítulo 164

Solo quería estar a su lado y sentir sus suaves manos en mi piel, anhelaba tenerlo cerca por mucho tiempo, solo eso necesitaba.
Mario: ¿por qué me miras así?- dijo mientras sonreía tímidamente, su mirada no se centraba en la mía y es que aunque quisiera dejar de verlo, no podía, me estaba perdiendo tan profundo en él que ahora me costaba mucho buscar una salida, tampoco es cómo sí quisiera encontrarla.- nena, me estás asustando.
Tn: no es nada, eres realmente atractivo, tanto que no sé que hice para merecerte.- él sonrió de una manera indescriptible, los hermosos hoyuelos de sus mejillas se hicieron notar haciéndolo ver más lindo y tierno, sus manos tomaron mi rostro y unió sus labios a los míos en un beso corto.
Mario: ¿en serio te preguntas eso? No tienes una jodida idea de lo mucho que anhelaba tenerte de esta manera, debo aceptar que la primera vez que te vi en aquella cafetería, solo quería tenerte por un momento pero conforme paso el tiempo y te seguía observando de cerca, sentía que eras ese complemento que necesitaba mi vida, ahora no quiero tenerte por un momento, quiero tenerte para toda mi vida y no sé que haría sin ti.- recargue mi rostro en su pecho así logrando escuchar los latidos de su corazón, sus manos acariciaban mi espalda y besaba constantemente mi nuca.- cuándo recién te tuve, no sabia ni que demonios hacer porqué estaba todo en mi contra, tu actitud en ese momento era muy retadora y yo mismo estaba haciendo que me odiaras y la primera vez que me besaste por tu voluntad, no sabes lo increíble que me sentí, quizás en ese momento no lo demostré pero cuándo me fui a mi despacho estaba sonriendo cómo un maldito estúpido, era la primera vez que me sentía de esa manera y pensaba que todo era un sueño, nunca pensé que lograría tenerte así.- era la primera vez que le escuchaba hablar de esa manera tan dedicada, sentía sus palabras sinceras y eso me hacia sentir realmente bien.
Tn: yo tampoco sabía que terminaría de esta manera, pensé que moriría a las pocas semanas de conocerte ya que me dabas un poco de temor, sin embargo, me convencí a mi misma de que sí demostraba ese miedo tú abusarías de ello.