Me Perteneces

Capítulo 166

Math no encontraba la manera de decirle a Mario así que solo jugaba con sus manos mientras le hacia preguntas raras.
Tn: Math quiere preguntarte algo pero por lo que veo le causas muchos nervios, lo haré yo.- me puse de pie mientras guardaba en mi bolsillo trasero las gomitas.- desde hace días Catalina está un poco distraía y Math piensa que algo malo le ocurre así que le propuse que quizás necesita una amiga para poder platicar o ir de compras.
Mario: ¿y porque no la sacas a algún lugar para que conozca personas?- parecía que no estaba entendiendo o más bien sí entendía pero no quería aceptarlo.
Tn: yo seré su amiga pero para eso necesito que tú me dejes salir con ella sin necesidad de traer vigilantes o que tú vengas conmigo, quiero estar sola con ella.- él rápidamente negó, ni siquiera terminaba de hablar cuándo él ya estaba moviendo la cabeza en forma negativa.
Mario: eso es una locura, Math.- suspiro mientras colocaba sus manos en la cintura.
Tn: ¿crees que puedas dejarme a solas con Mario?- el chico asintió rápidamente mientras se retiraba, estaba un poco cabizbajo y como no sí la chica que más amaba en el mundo estaba extraña y lo peor de todo es que no sabe la razón.- por favor, nunca te he pedido nada.
Mario: lo sé pero no me pidas esta clase de cosas porqué me negaré rotundamente, sí quieres te compró todo lo que te guste de las tiendas, hasta un elefante sí así lo deseas pero no me pidas que te deje salir sola.- rodeé su cuello con mis manos y lo miré fijamente, sé que aún tenía miedo de que yo me escapará pero creo que eso ni siquiera lo llegue a pensar.
Tn: sé de lo que tienes miedo pero ¿no te he dejado en claro que jamás me iría de tu lado a menos de que tú me lo pidieras?- él bajo su mirada hasta mis labios sin decir ninguna palabra.- solo quiero ayudar a Math en esto para que su corazón esté tranquilo y que confirme que su chica está bien.
Mario: lo pensaré ¿de acuerdo? No es fácil aceptar que comenzarás a salir sin mí a tu lado y que quizás todos los malditos hombres enfermos te mirarán de una forma mórbida.- reí ante lo que acababa de decir y le di un pequeño beso en sus labios.