Me Perteneces

Capítulo 182

Había un silencio terrorífico en la casa, podían escucharse pequeños murmullos pero de ahí en más no se escuchaba ningún sonido, no teníamos idea de por donde caminábamos pero según Mike, tenía grabado cada centímetro de la casa. La puerta principal se abrió haciendo que entrará un poco de luz debido a las lámparas callejeras. Por un momento pensé que había llegado Mario y me sentí un tanto aliviada, pero eso solo fue por unos segundos. Sentí cómo sujetaron mis brazos por la espalda y rápidamente alejaron la mano de Mike, hizo un poco de esfuerzo para no soltarla pero no funcionó en lo absoluto, las luces volvieron a encenderse dejándome ver que era lo que en realidad estaba sucediendo. Había 5 tipos dentro de la casa con pasamontañas y chalecos antibalas, dos tenían sujetado a Mike por los brazos mientras este luchaba por safarse del agarre. No podía ver quien se encontraba detrás de mí pero sí observe un tatuaje de la santa muerte en su antebrazo, me removí un poco debido al agarre tan intenso que estaba empleando en mis brazos pero no conseguí mucho.
Mike: ¿qué es lo que quieren?- uno de los hombres, que por supuesto no había visto, se colocó frente a el propinandole una bofetada, el sonido de la piel chocando con la palma de su mano sonó demasiado fuerte haciendo que sintiera el dolor ajeno. El hombre le hizo una señal a los demás, sentí cómo un fuerte golpe se colocaba en las corvas de mis piernas haciendo que quedará de rodillas frente a ellos, mi corazón palpitaba muy rápido y sentía que en cualquier momento se me saldría por la boca. Lo mismo hicieron con Mike, el hombre se coloco en cuclillas frente a él y sonrió de una forma malévola.
Xx: tú más que nadie sabe lo que quiero ¿dónde está?- no tenía idea de a quien se referían, pero la forma en la que hablaban estaba cargada de odio y venganza.
Mike: no les diré absolutamente nada, aparte de que no estoy enterado de ningún movimiento que emplean en esta casa, solo soy un puto doctor.- él estaba mintiendo, claramente.
Xx: no vine aquí a tratar de convencerte, solo quería preguntarte, quizás podías salvar tu vida y el cuerpo de esta hermosa señorita.- me miró con lástima.